Pasaron dos semanas, había cuidado de mi madre, ella había estado descansando, yo ocupaba el lugar de ella, volvía a sentirme tan cansada, pero no importaba, primero estaba mi mamá, en esas dos semanas no había estado con Timothée, lo veía pero no quería hablar con el, tenía que enfocarme en el bien de mi mamá, no importaba que perdiera a Timothée, me dolía verlo con Wanda, pero era mejor así, siempre debió ser así, ni siquiera sabía si seguíamos teniendo una relación, ya no sabia nada.
El Rey había estado ocupado, ahora el iba a la casa de su hermano, ya no se le veía al Principe Henry por el castillo, Melissa atendía a todos los demás y me hacía el favor de checar a mi madre, Glass algunas veces me ayudaba a repartir la comida y acomodar unas cosas.
Me encontraba cenando con mi madre, no había dejado que se levantara, el doctor dijo que su corazón estaba normal.
- Es muy temprano para cenar, ¿No?
- Mamá, son las 7:30 de la noche, además debes dormir a tus horas
- Gracias cariño, pero no puedo acostumbrarme a esto y dejarte la responsabilidad a ti
- Yo me he acostumbrado ya, incluso soy muy buena en todo, ya me apuró, Glass me dijo que he mejorado y eso que es Glass Din Gruñon
- Has hecho un buen trabajo, estoy muy orgullosa de ti -sonrió-
- ¿Te gusta la cena?, yo la preparé
- Solo picante fruta
- Exacto, solo yo, además yo la decore, tal como los platillos de restaurantes caros
- Lo he notado, Glass te ha contagiado si amor a la cocina
- Mamá, te mereces todo esto, ahora que ya has terminado, debes dormir, yo me quedaré estudiando un poco, ¿Te he dicho que estoy dominando el Italiano?
- Eres muy inteligente.
- No lo sé, pero se me da muy bien esto de los idiomas
Comencé a estudiar cada libro que me había dado Timothée, cada página, la estructura, una vez que termine de estudiar me di cuenta que mamá ya estaba dormida, yo iba hacer lo mismo, pero recordé que debía checar que todo estuviera en su lugar, el trabajo de mi madre era más pesado de lo que me contaba ella.
Salí de la habitación en silencio, apagando las luces, cheque la cocina y todo estaba en orden, fui a la puerta principal, estaba cerrada, la biblioteca estaba sola y las luces apagadas, ya todo estaba obscuro, saque mi lámpara y caminé hacia la cocina para que después me dirigiera a la habitación.
- ¿A dónde vas? -alguien susurró en el oído de Gisselle haciendo que se exaltara-
- Timothée, me has espantado -dijo dándole un manotazo en su hombro-
- ¿Sigues enojada?, te he traído una rosa, se que los tulipanes son tus favoritos pero no los he podido conseguir y se que esta casi marchitandose, intente ponerla en agua, te la iba a dar hace días pero no pude, iba a conseguir otra pero unas dos o tres astillas se enterraron en mi mano
- Gracias, debo irme
- No, espera, hace tiempo que no paso tiempo contigo, eres mi novia.
- ¿Aún lo soy?
- Nunca has dejado de serlo, te has enojado de que este con Wanda, pero no es más que una princesa, no me gusta
- Pero la pasas bien con ella.
- La paso mejor contigo, lo sabes, además te he intentado buscar, pero no encuentro excusa, cambiaste por Melissa... ¿Como sigue Jazmín?
- Un poco mejor, su corazón está bien, me preocupa que algunas veces no coma
- Por eso estás estresada, ¿No?
- Si -suspiro- he intentado hacer todo como lo hacía mi madre, pero no soy ella, no soy tan ordenada.
- Solo debes practicar
- Lo he hecho, pero es tan cansado, estar al mando, la semana pasada la Reina me regañó por olvidar llevarle la comida a su habitación.
- Entonces debiste mandar a alguien más.
- Debía ser yo, siento que explotare en cualquier momento
- Entonces, explota conmigo -dijo abrazando a Gisselle-
- ¿Ya aprendió a jugar golf?
- Es muy tonta -Gisselle sonríe- creo que lo hace intencionalmente, no quiero que te pongas celosa pero siento que intenta hacer que vea su trasero -Gisselle se alejo- Se lo he dicho, no quiero nada con ella, le dije que si seguía así le pediré con mucha educación que debe irse del castillo.
- Le gustas Timothée
- Lo se, no soy tan tonto, toma en cuenta que me incomoda, se que muchos hombres solo esperan a que una chica ponga el culo y...
- Si, ya lo se -un sonrojo apareció en el rostro de Gisselle-
- No soy ese tipo de hombre, yo me enamore de ti, lo estoy y no quiero a alguien más, eso tampoco lo entiende y si me sigue haciendo eso, no me quedará más opción que decirle la verdad
- Entiende que ella está enamorada de ti, también te entiendo, hablaré con ella, le diré que te de tu espacio, pero no le diré de nosotros, no quiero romperle el corazón, ella es una gran chica
- Una chica que quiere convertirse en Reina y que se la...
- Timothée
- ¿Que?, estabas enojada por que pasaba más tiempo con ella y ahora que te digo lo incómodo que me siento le das la razón, no te entiendo -ahora el frunció el ceño-
- Lo siento, estoy celosa, pero también me pongo en su lugar, hablaré con ella, tal vez trate de cambiar sus planes de "coqueteo"
- Que bueno -suspiro- Me siento mejor, estaré mejor si le dices que estamos en una relación, en donde tu me gustas y no queremos que alguien se meta entre nosotros
- Que bueno, entonces eso me mantiene más tranquila
- ¿Estas estresada? -la pregunta dale de Timothée como si nada-
- Demasiado, los días son tan pesados -dijo mientras Timothée se acerca a ella-
- ¿Quieres que te quite ese estrés? -susurro cerca de su oído haciendo que Gisselle se estremeciera-
- ¿Lo has dicho enserio?
- Mi cama comienza a extrañarte -dijo mientras sus manos se posaban en su cintura-
- Tienes suerte de que yo también extrañe a tu cama - unió sus labios con los de el, mientras a tropezones y besos intentaban llegar a la habitación- No nos tienen que oír -susurro abriendo la puerta de Timothée-
- Por mi no hay problema - dijo cerrando la puerta y poniendo seguro- depende de ti que no nos oigan y no te la dejaré fácil
Maratón 2/3
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ᴋɪɴɢ ɪ | ᴛɪᴍᴏᴛʜÉᴇ ᴄʜᴀʟᴀᴍᴇᴛ - VERSIÓN NO CORREGIDA
Ficção Adolescente𝐓𝐄𝐑𝐌𝐈𝐍𝐀𝐃𝐀 - SIN EDITAR ᴋɪɴɢ: ʟᴀ ʀᴇᴀʟɪᴅᴀᴅ ᴅᴇᴛʀÁꜱ ᴅᴇʟ ᴅᴇʙᴇʀ • Esta historia contiene una segunda temporada... Un Príncipe nunca está lo suficientemente preparado hasta que le ponen la Corona y toca defender a su pueblo con su vida. Un Rey no...