When you opened your eyes | Billie Eilish

Capítulo 26: Te llevaste algo mío

**3 años después**

-Ha sido un gusto chicas, nos vemos mañana en la uni! -se despidió Halsey.

-Chao tórtolas! -dijo Ashley cerrando la puerta de nuestra casa.

En nuestro aniversario número dos, Maggie, Patrick y mi madre nos dieron la sorpresa de que teniamos que firmar el contrato de alquiler de nuestra nueva pequeña casita. Estaba situada cerca de mi antigua casa, a sólo dos manzanas. Un amigo de Patrick vivía allí y como su familia se agrandó puso la casa en alquiler para irse a otra más grande, en cuanto mi suegro se enteró habló con el y nos la dejó a un precio que podíamos pagar entre Billie y yo con nuestros trabajos de fin de semana, en la misma cafeteria del centro.
Halsey y Ashley se reuníam con nosotras todos los jueves para cenar las cuatro juntas, íbamos a la universidad de la ciudad todo el grupo junto, menos Tay que se mudó a la ciudad del lado, a dos horas de Norwalk, pero lo veíamos seguido.
Era una pequeña casa con la fachada blanca, dos plantas y todo el suelo de madera oscura menos la cocina que eran losas blancas, tenia un pequeño baño al lado del comedor, junto con la cocina. En la planta superior habia una habitación de invitados, un baño, nuestra habitación con baño própio y una pequeña terraza que daba al pequeño jardín trasero.

-Mañana es un día muy especial. -dijo mi novia sentándose a horcajadas sobre mi, que estaba sentada en el sofá.

Rodeó sus brazos en mi cuello y yo agarré su cintura con una mano mientras ponía un revelde mechón de su pelo tras su oreja mientras observaba sus hermosos hoyuelos.

-Muy muy especial, y tengo un regalito para ti. -dije dándose un casto beso en los lavios.

-¿Y ese regalito eres tú? Porque no necesito nada más. -dijo robándome otro beso.

-Si, yo también, pero hay algo más. -le dí un toquecito en su pequeña nariz.

-¿Y cuando lo sabré?

-Mañana, no te puedo decir nada más. -rodeé su cintura.

-Pues ahora quiero un adelanto, te quiero a ti. -dijo enredando sus manos en mi pelo y besándome con hambre.
No puse pega alguna y la subí a horcajadas sobre mi hasta nuestra habitación.

****

Desperté temprano a la mañana siguiente, junto con una hermosa Billie abrazándome por la cintura y con la cabeza en mi pecho con su reboltoso cabello rubio. Si, el azúl se lo dejó por un año y medio y luego decidió volver a su color natural, y no podía estar más guapa.
Intenté zafarme de su tierno agarre intentando no despertarla y me tomé unos minutos para observarla bajo la clara luz del sol mañanero que entraba por la ventana.
Vivir juntas fué un gran paso, y nuestra convivencia era perfecta, con pequeñas discusiones momentáneas pero siempre me era imposible enfadarme con ella y acababa bajo su cuerpo desnudo cuando nos reconciliábamos.

Nunca habia sido tan feliz en mi vida, justo cuando pensaba que ya nada tenia sentido a mis 17 años, entré a robar a una casa y me topé con el hermoso ángel que me salvó de esa oscura época. Ahora teníamos 21 y queria pasar el resto de mis años junto a la hermosa mujer que dormia plácidamente frente a mi.

Bajé a la cocina y preparé dos cafés, bebí de un sorbo el mío y preparé un desayuno para mi novia. Coloqué las tostadas con mermeladas, frutas, el café y el zumo de naranja en una bandeja y subí a la habitación colocándola sobre la mesita de noche junto con una nota:

Buenos días mi princesa, perdón por si no estoy a tu lado cuando despiertes pero es por una buena causa. Disfruta del desayuno y nos vemos dentro de un rato. Feliz tercer aniversario.
Te amo.