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¿Así será?

Pucca se encontraba caminando por las afueras de la aldea de Sooga, estaba pensativa, la chica de ya 14 años seguía enamorada de su ninja favorito Garu, y eso para nadie era de dudar ni ella lo había dudado ni una sola vez.

Pero un recuerdo asalto su mente, de esa vez en la que encontro ese cuadro donde aparecía su ancestra y él de Garu juntos, recordó como se desconcerto en ese momento pero eso duro poco por las palabras de Ching:

— Se parecen a ti y a Garu ¿Ves? ¡Es obra del destino que esten juntos!

Solo necesito esas palabras de Ching para querer comprar esa fotografía y por supuesto dársela de regalo a su amado, recordar como él también quedo desconcertado al ver esa foto donde parecian ser ellos con diferente vestimenta, pero a pesar de ello acepto el regalo sin chistar, le causo cierta ternura.
(Aunque fue porque sabía como es Pucca enojada)

La chica de peinado redondo nuevamente volvió al mundo real al notar que estaba muy cerca de la casa de su amado, su sonrisa se ensancho de esa forma tan especial de ella, en especial cuando se trata de Garu, iba a comenzar a correr directo a tocar la puerta, pero antes de siquiera dar el primer paso una idea cruzo su mente como un rayo.

« Si esos eran nuestros ancestros significa que en algún momento estuvieron juntos »

Esto la hizo que se pusiera completamente recta, eso era muy obvio si salian juntos en esa foto, pero...

« Garu y yo no tenemos lazos familiares en común lo que significa que... Ellos no se casaron y no estuvieron juntos por siempre »

Parecía algo muy básico e infantil, pero eso la afecto de sobre manera a nuesta chica, si sus ancestros no estuvieron juntos significa que algo o alguien los separo, o tal vez... Él la dejo a su ancestra.

Era una completa posibilidad, él se aburro de ella y la dejo por otra mujer, no pudo haber sido su antepasada ya que ella cuando salió de la foto buscaba a Garu.

Esta simple idea dejo descolocada a la chica, sus piernas  comenzaron a tambalearse por lo que debio sentarse en el suelo sin importar si se ensucian sus ropas.

« ¿Ese sera mi futuro con Garu?»

Si le paso a sus antepasados
¿por qué no a ellos? ¿Qué diferencia podría haber?

Los ojos de la chica comenzaron a llenarse de lágrimas.

« ¿Así sera? ¿ Así será todo? ¿Una vida sin él a mi lado? No puede ser...»

Y finalmente las lágrimas surcaron sus ojos para pasar por sus rosadas mejillas, se sentía muy triste.

Garu estaba saliendo se su hogar, el día para él estaba siendo muy tranquilo, pudo entrenar bastante bien sin ninguna interrupción, exceptuando a Abyo quien venía a buscar pelea como siempre, pero lo aprovecho para entrenar.

Lo que aún no podía sacarse de la cabeza es en donde estaba su tormento, el con 15 años ya se había acostumbrado a que la chica llegara puntual a las 9:00 AM para estar con el, pero ya eran las 1:00 PM y ella todavía no se presentaba, no es que le preocupara claro que no, él tenía claro que Pucca era capaz de defenderse por si misma, después de todo era más fuerte que cualquiera, pero se sentía extrañado.

Cerro la puerta de su casa y al mirar al frente la noto.

« Y hablando de ella... »

Al observarla notó como estaba sentada en el suelo, con las piernas apegadas a su pecho y la cara oculta en ellas, parecía estar llorando, no sabía que hacer, ver a Pucca llorar era extraño, sus razones solo varian estre él o sus amigos y tíos.

Su trance termino cuando escucho un hipido, muy leve y suave, proveniente de la chica, no le gusta verla así por más molesta que pueda llegar a ser, asi que se acercó, acuclillandose a su lado le tocó el hombro provocando que ella lo mirará.

« ¿Que sucede? »

Le pregunto el ninja con su mirada y su característico silencio, Pucca solo lo miro y se lanzó a abrazarlo,tecleandolo en ello.
Garu tuvo el impulso de escapar de ella, pero no lo hizo, al verla la noto tan frágil. A aquella chica más fuerte que un toro e increíblemente habilidoza acurrucada en su pecho de adolescente entrenado, escondiéndose como para escapar de lo que le hiciera daño, así que solo se dejo abrazar por lo que lentamente se recosto en el suelo con ella encima.

Solo se limitó a mirarla, esperando pacientemente a que se calmara, pero parecía que eso no sería pronto, por lo que haciendo caso a una voz interior Garu delicadamente puso su mano enguantada sobre la cabeza de la chica dándole leves palmaditas, esto provocó que la chica por sorpresa dejará de llorar desconsoladamente y solo se quedará ahí acurrucada en aquel fuerte abdomen tratando de normalizar su respiración.

El silencio era tranquilizador, Pucca sintió que solo eran ellos dos quienes estaban en el mundo, solo ellos y nadie más.

Unos minutos más tarde ya mucho más tranquila se separo del pecho de Garu y lo miró, el se levantó levemente del suelo apoyandose en sus antebrazos.

La chica tenia los ojos rojos e hinchados pero a pesar de eso le dio una sonrisa sincera a su amado.

« Gracias »

Dijo con su mirada al ninja, el le entendió perfectamente y solo agacho su cabeza en señal de:

« No hay de que»

Pero él seguía preguntandose el motivo del llanto de la chica, pero todas sus dudas se dispersaron al sentir el contacto de unos labios muy conocidos para él, provocando que se sonrojara y volviera a estar contra el suelo solo que esta vez la chica sobre él lo estaba besando de manera tierna y pausada.

Y ahí recordó, porque debía ser tan paciente con Pucca y porque estaba tan sensible.

Por la sencilla razón que a la chica le había llegado su primera menarquia, o su primer periodo.

¿Cómo lo sabía? Estuvo ahí cuando ocurrió, más bien corriendo de ella, pero no es bueno entrar en detalles.

Pero sabía que era una nueva etapa para la chica y algo que la acompañara durante muchos años, sabía perfectamente que eso provoca alteración en sus hormonas, en su estado de ánimo.

Sin darse cuenta él le comenzo a corresponder el beso, como si fuera lo más natural del mundo, pero solo por inercia o tal vez... Algo más.

Pucca se sentía bien, su chico le correspondió el beso de una forma que nunca pensó que lo haría, se sentía amada por él y esto hizo que las dudas que atormentaron su corazón adolescente se disiparan.

« Que pasé lo que tenga que pasar, mientras tanto seguire aprovechando cada momento al lado de Garu »

Fin.


Pucca x Garu - One shortsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora