La Clase De Ciencias

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-...este año vamos a cambiar la organización de la clase porque, aunque me gusta veros las catas a todos, prefiero organizaron por grupos de trabajo. Así que voy a pasar lista y os pondré en grupos de tres...- dijo Celia rebuscando en un bolso de tonos marrones lo que parecía una lista con nuestros nombres.

Tras terminiar de pronunciar todos nuestros nombres, la prifesora se puso en pie, miró la lista, luego a nosotros, y de nuevo a nosotros. Yo solo podía pensar en con quien nos iban a sentar, porque lo único que quería era que me tocara con Yaiza, ya que era la única a la que conocía y con la que me sentía verdaderamente bien .

Yaiza estuvo hablando conmigo sobre la organizacion por grupitos de la clase: "las pijas que se creen las mejores", "los tios que se creen que estan buenos (playboys)", "las normalitas (que eramos nosotras mas algunas chicas)", "los jugadores de videojuegos", etc. Esta chica es muy extrovertida y dice lo que piensa. También dijo algo sobre los playboys que...😶. Digamos que es un poco mal pensada jeje.

La profesora tomó su decisión. Y nos colocó en 7 grupos:

Grupo 1: Alex, Tim y Anabel
Grupo 2: Liam, Steven y Jeremmy
Grupo 3: Sarah, Mary, Paula
Grupo 4: Yaiza, Victoria y yo
Grupo 5: Tiffany, Mackencie y Marisa
Grupo 6: Tonny, Jeff, Greg
Grupo 7: Max, Billy y Marta

Juntamos las mesas y nos pusimos mirando a la señorita. La tal Victoria se acercó. Era morena, con rizos y de ojos marrones. Tenía una expresión alegre en su rostro.

-¡Hola chicas! Soy Victoria y me alegro de conoceros- Nos dijo. Yo me ruboricé y me escondí bajo mi chaqueta. No suelo conectar con nadie a la primera porque me da mucha verguenza. Tras unos minutis, cogí confianza y la saludé.- Menos mal que no me han colocado con Tiffany. Esa chica es lo peor.¿Sabéis que? Me han contado que esta obsesionada con Instagram. No hay hora en la que no suba una foto posando con su ropa Chanel.

Tenía la sensación de que esa chica era un poco loca, a la vez que chismosa, pero me caía bien. Tenía una energía que contagiaba la alegría.

-Bueno,ahora que todos estáis sentados, os dejaré el resto de la hora para que os conozcáis mejor- anunció Celia.
-Bueno pues... yo soy Yaiza y esta es Merliah... encantadas...¿supongo?- dijo Yaiza con expresión de incomodidad. Yo la saludo con la mano y ella me sonría mientras masca un chicle.
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Salimos de clase y fuimos las tres directas a las taquillas. La mía es la 342 y está junto a la sala de trofeos. Yaiza, Vicky (así quiere que la llamemos) y yo quisimos investigar acerca de esa sala y entramos. No había nadie custodiandola ya que estaba abierta al público. Había muchas medallas y copas en honor a la escuela.
-Wow, espero conseguir uno de esos algún día...- dijo Vicky. Yaiza y yo asentimos.
-Sí, mi tía se pondría muy contenta- añadió Yaiza. La verdad es que mi madre también se sentiría muy orgullosa.
-Sería un gran avance que una persona con mis capacidades pudiera ganar uno de esos...- dije observando el más grande de todos. Era en honor a un tal Harry Williams. Era curioso, porque no ponía nada sobre la categoría a la que pertenecía ni por qué le dieron aquel premio...
Riiiiiiin
Era el timbre, que nos avisaba de que era la hora de comer. Nos dirigimos al comedor. Vicky se fue porque dijo que tenía que presentarnos a alguien y que iba a buscarlo... No se pero esta chica es muy rara, así que Yaiza y yo nos limitamos a mirarla, mirarnos y reírnos. El comedor era amplio y estaba dividido en mesas para 5. También había algunas mesas en el patio para aprovechar los rayos de sol, ahora que aún estamos en verano. Yaiza y yo cogímos unas bandejas y nos dirigimos a la gran barra de buffet. Había todo tipo de comidas imaginables: sushi, carne, pescado...
Yaiza y yo escogimos ensalada y filete de lomo y de postre un trozo de tarta de zanahoria que estaba deliciosa. Tras un rato, apareció Vicky agarrando de la camisa a un chico que murmuraba algo sobre "vergüenza".
Se nos acercó y se sentó. Él la imitó.
-Chicas, este es mi amigo Ethan. No os importa que se siente aquí, ¿no?- ambas negamos con la cabeza y yo sentía unas enormes ganas de que me tragara la tierra.

Amistad SuperdotadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora