[Mo Dao Zu Shi] WinterFest 2019 (ZhuiYi)

Snow

Era algún tipo de ritual curioso e innombrable: cada vez que se anunciaba tormenta de nieve, uno de los dos muchachos se iba a quedar a dormir a la casa del otro, y al día siguiente jugarían entre la nieve.

Ese año a JingYi le tocaba ir a la casa de Yuan. Aún a sus diecisiete años, amaba pasar la noche con él, sobretodo si al día siguiente habría una maravillosa tormenta de nieve que los mantendría encerrados en casa, y después podrían desahogar sus frustraciones a través de una guerra de nieve.

Sin embargo, cuando llegó a la casa, no fue tan agradable como lo esperaba.

-A-Yi. —Habló su tío WangJi, mientras a sus espaldas estaba Wei Wuxian.

-JingYi, mi niño, A-Yuan está enfermo y pidió expresamente que te mantuviéramos lejos del cuarto. —Wuxian suspiró—, pero no dijo que no podías entrar si nosotros no estábamos...

JingYi sólo se carcajeó. Su tío era un caso perdido.

-Sé cuidadoso, si enfermas, le diré a A-Cheng que fue por la nieve, ¡No por A-Yuan! —Bramó, mientras Lan WangJi parecía bastante enfadado a sus espaldas, sin embargo, era el estado de ánimo por defecto.

Cuando entró al cuarto, el cambio de temperatura fue sofocante. Realmente hacía mucho calor en el sitio, y estaba totalmente seguro de que Yuan no se mejoraría si se quedaba allí.

Necesitaba un golpe. ¡Un golpe de frío, por supuesto!

-¿A-Yi? —Preguntó Yuan, y el mencionado se cuestionó cómo es que lo reconoció.

Era imposible que Yuan reconociera al más bajo sólo por la forma de caminar, ¿No?

-A-Yuan, vine a cuidarte. Tus papás se fueron por el momento. —Dijo, mientras tomaba asiento en una silla que Wei Wuxian había dejado casualmente junto a la cama.

¡Casual los guantes que había olvidado para darle la mano a Yuan como excusa! Su tío sabía que a JingYi le gustaba Yuan y sólo lo torturaba cada vez que podía.

-¿A-Yi? —El muchacho recostado murmuró desde su cama—, ¿Puedo pedirte algo?

JingYi sonrió para sus adentros.

-Sí, A-Yuan, de inmediato entraré a la cama contigo. —Y vio como los ojos de su amigo se abrían ampliamente, mientras JingYi comenzaba a quitarse los zapatos.

¡Sólo quería molestarlo, claro está!

-¡Te vas a resfriar, no lo hagas!

... Pero JingYi era fan de desobedecer las reglas, sobretodo las que le impedían pasar un buen rato con Yuan.

-¡Hazme un sitio! —Exclamó, apartando a Yuan hacia el rincón donde la pared estaba fría.

Ambos estaban de espaldas, y JingYi sintió que definitivamente había cruzado la línea esa vez. Se sentía ciertamente incómodo, pero no sabía por qué, si siempre habían dormido juntos y compartido cama.

JingYi se removió un poco. Luego otro poco. Y finalmente se sintió ahogar.

-A-Yi, deja de retorcerte. —Pidió Yuan, y JingYi sólo suspiró.

-No puedo dormir. —Comentó.

JingYi se volteó. El rostro de Yuan estaba allí. Ahora estaban uno frente al otro, cubiertos por una sábana, en un ambiente jodidamente caluroso. JingYi podía sentir el aliento de Yuan sobre su rostro, y se acercó a él.

Yuan suspiró cuando JingYi juntó sus frentes.

-A-Yuan... —Susurró— tienes fiebre. No podremos salir a jugar a la nieve. —Volvió a suspirar, porque era tan poca la distancia, y la tentación tan clara.

La luz del exterior lucía pulcra, limpia. Seguramente ya había comenzado a nevar, y ese año no podrían salir a jugar, pero eso no podía importarle menos a JingYi.

Sin media palabra, en el interior de la cama de Yuan, con sus frentes una sobre otra, y movió su nariz muy suavemente.

-Estoy preocupado. —Admitió—, tienes mucha fiebre.

Yuan guió sus manos al cuerpo de JingYi, a sus caderas, y lo envolvió fuertemente, separando sus rostros y llevándolo al espacio entre el hombro y el cuello del chico.

-Tengo frío. —Murmuró cálidamente, y el más bajo se estremeció. ¿Qué debía hacer? Se sentía colapsar.

Con su dedo índice, comenzó a acariciar de arriba a abajo la columna de Yuan, trazando la línea divisoria, y Yuan tembló bajo su tacto. Se acurrucó más contra él, porque tenía frío.

Pero no hacía frío para JingYi, sólo se quemaba en esos estúpidos sentimientos que lo consumían.

Como si algo se le ocurriera, comenzó a trazar un par de sinogramas en su espalda.

¿Si escribía esas palabras, Yuan algún día las leería? ¿Las correspondería?

¿Sentiría Yuan algún día lo mismo, o estaba condenado a ser por siempre el mejor amigo?

-JingYi, no. —Se quejó Yuan, y el mencionado se sintió más extasiado de lo que le hubiera gustado admitir.

Quería besarlo. Necesitaba besarlo.

-Lo siento, A-Yuan, ¿Quieres que me detenga? —Preguntó, mientras movía su cabeza contra la de su amigo, tratando de levantar la mirada.

Yuan sólo apretó más el abrazo, pero se negaba a verlo.

-A-Yi, no. —Dijo entre dientes—, no hagas nada. —Rogó. Pero JingYi ya no quería quedarse así. Quería ver el rostro de Yuan.

Ya había comenzado a nevar al exterior. Suspiró. Se ahogaba en esa incertidumbre.

-A-Yuan, por favor. Debo controlar tu fiebre. —Pidió, regañándose por usar esa excusa.

El mencionado se apartó del hueco entre el hombro y el cuello de JingYi. Estaba sonrojado.

Rayos, JingYi necesitaba tener gripe en ese instante.

JingYi mordió su labio inferior.

-¿Te siente muy mal? —Exhaló silabeando cada fonema de esa oración, sintiendo el misterio de la mirada perdida de Yuan.

-Sí. —Respondió.

Se miraron. Yuan buscaba el frío en el rostro de JingYi, que se acercó a él y juntó sus rostros para transmitir el frío.

-A-Yi... Basta. —Murmuró—, no quiero que sea así.—Pero JingYi no entendía.

¿Qué cosa no podía ser así?

Cuando Yuan miró sus labios, JingYi mandó al carajo la cordura. Lentamente comenzó a acercarse, por si Yuan no quería, por si le asqueaba, pero en cambio, parecía gustoso de recibirlo.

Ya se mezclaban sus alientos, casi tan ávidamente como sus manos lo estaban.

-¡A-Yi, A-Yuan! —Gritaron desde el exterior los padres de Yuan, haciendo que se separaran asustados.

Repentinamente odiaron que la nieve cayera afuera.

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Okay, al principio quería hacer ¡Guerra en la nieve! Un hermoso beso bajo la nieve. Pero ya he escrito muchos besos, así que ahora no los hice canon 😎 nos leemos mañana 💛 por cierto, ahora dedicado a luhmml porque me he divertido hablando con ella, eres un sol ¿?