Anónimo

19_Ahora yo sí y tú no

Jake observó con cuidado al amigo que le acompañaba y que parecía bastante tenso. Luego, clavó su mirada en la mesa en la que estaba sentada Gabi junto con Sofía y Dave en la que hablaban de forma normal. Al comprobar que Mykel aminoraba el paso para quedarse ahí, le empujó ligeramente para que continuara andando.

Siguieron caminando hasta llegar a una mesa vacía y allí tenía la intención de sentarse. Sin embargo, de repente, Mykel le dio su bandeja a su amigo, obligándole a agarrarla para que no se cayera al suelo.

-Sujétame esto un segundo, por favor.- Le dijo sin dejarle tiempo para decir no.

-¿Qué vas a hacer?- Preguntó extrañado por aquel comportamiento.

-Lo que te prometí.- Respondió.

-¿Qué?- Se atemorizó el mujeriego sabiendo perfectamente a qué se refería.

Su amigo se subió encima de la mesa y comenzó a llamar la atención de todos hasta que, por fin, inundó un silencio lo suficientemente grande como para poder ser escuchado.

-Compañeros. Tengo algo importante que decir y no pienso dejar que el miedo me obligue a callar... - Añadió mirando a Jake. -Llevo un tiempo enamorado de una chica muy especial para mí y hoy, ahora, voy a confesarle todo lo que siento con una simple pregunta... ¿Querrías venir conmigo a un baile...? - Confesó mirando hacia la mesa donde estaban Gabi y Sofía.

La joven rubia apretó el cubierto que sostenía pensando que podría tratarse de ella o, en el peor de los casos, de Gabi.

-¿Querrías salir conmigo? ¿Lilly?- Concluyó.

Sofía abrió la boca impresionada antes de mirar detrás de sí donde, casualmente, se encontraba Lilly y sus amigas. Fue entonces cuando una de sus amigas, llamada Heather, le dio un codazo con cierto odio, fingiendo que era para animarla a levantarse y responder.

-¿Qué? ¿Todo este tiempo a sido Lilly? ¿Esa víbora?- Gritó Sofía ofendida pero, gracias a que Dave la calmó, nadie logró oírla.

Mykel bajó de la mesa y se acercó a su amor platónico, la agarró de las manos y preguntó con bastante temor:

-¿Qué me dices?-

La chica comenzó a dudar. Miró un segundo a sus amigas para confirmar su decisión. Le miró fijamente a los ojos.

-...Sí.- Respondió mientras le abrazaba.

Todos estallaron en aplausos y gritos pero tras cesar los ruidos, Mykel se acercó a su amigo que aún estaba alucinando.

-Mi parte ya está hecha.- Dijo mientras agarraba sus cosas y se sentaba en la mesa por fin.

-¿Cómo has sido capaz de hacer eso?- Preguntó impresionado.

-Con mucho valor y un par de cojones. Ahora te toca a ti.- Añadió señalando a Gabi con la mirada.

-¿Ahora?- Reprochó Jake.

-Sí.- Contestó tajantemente.

*****

-Ha pasado media hora. ¿Vas a cumplir tu parte del trato o no?- Preguntó Mykel viendo cómo su amigo solo removía las sobras de su plato sin querer moverse.

El joven respiró profundamente antes de dejar caer su cubierto, haciendo un ligero sonido agudo, y se levantó para caminar directamente hacia Gabi que parecía charlar con sus dos amigos.

-¿Cómo puede haber hecho eso?- Dijo Sofía enfadada.

-Simplemente ha confesado su amor. No tiene nada de malo.- Comentaba objetivamente Gabi.

-Ha sido cruel. Él sabía que me gustaba y hace esto delante de mí

-En eso le doy la razón a Sofía.- Añadió Dave.

-Es cierto que no ha sido el mejor momento para hacerlo pero, aún así, se ha expresado como quería y tú deberías hacer lo mismo con él.- Le aconsejó la chica de negro.

-¿Quieres decir que le mate?- Dijo la novata medio en broma-medio en serio.

-No. Quiero decir que le cuentes lo que sientes.- Explicó la chica.

-Hola, Gabi.- Saludó Jake sentándose en frente de ella.

Los tres se quedaron mirándole.

-¿Qué pasa?- Preguntó confuso.

-¿Ahora me hablas?- Dijo Gabi un poco ofendida.

-Mira, he estado pensando en eso de que volvamos a ser amigos y creo que tienes razón... - Intentó explicarse.

-Y eso, ¿por qué?- Preguntó Sofía entrometiéndose en la conversación.

-Sí, ¿por qué?- Repitió Gabi para ponerle nervioso.

-Oye, sé que hice mal al no haberte perdonado el primer día que me lo pediste pero tienes que entender que estaba enfadado y necesitaba un tiempo para pensar en ello. Ahora lo único que quiero es que volvamos a ser como antes... -

-Puede que ahora sea yo la que no quiera ser tu amiga.- Respondió enfadada la misteriosa chica mientras se iba.

-No te mereces que ella te perdone.- Añadió Sofía intentando irse pero Jake le agarró la muñeca.

-Creía que eras mi amiga, ¿por qué no me ayudas?- Dijo él.

-Me importa más ella que tú. Solo quiero que no sufra.- Respondió.

-Lo único que quieres es tener a alguien que esté tan sola como tú para poder manejarla.-

-En la guerra y en el amor no hay amigos.- Comentó la chica como si fuera suficiente.

-Esta no es tu guerra.- Concluyó Jake antes de irse.

La joven hizo un gesto de desaprobación antes de sentarse de nuevo.

-Tiene razón y lo sabes.- Añadió Dave que había estado observando toda la escena.

-Tú te callas.- Le gritó ella.

El chico la miró con el ceño fruncido, sintiéndose ligeramente ofendido por aquel comportamiento.

-Solo era una sugerencia.- Añadió él mientras se levantaba y dejaba a la chica sola.