||CAPÍTULO 2||

4.8K 521 774
                                    

Lección de vida #1

'Un maratón de Crepúsculo puede salvar tu vida'


---------------------------------- 🖤

Sígueme en Instagram, @Emilybasems22

---------------------------------- 🖤

—Guao... ¿Y eso? —señalo, olvidando lo que mamá me enseñó de pequeña y aún me sigue recordando.

No señales, Alex. Eso es de mala educación.

—Labial láser —responde en un gruñido.

Me pregunto si me darán uno de esos.

—Ah... ¿Y eso? —nuevamente le pregunto, refiriéndome a otro raro y peculiar objeto en un aparador.

Nick suspira irritado. 

—Bolígrafo de dardos, Alex. Es un bolígrafo de dardos.

¿Qué tan difícil es responder? ¿A caso se le deforma un abdominal cada vez que responde a una de mis preguntas?

Puto.

Hace una hora, Nick pasó por mí, tal y como habíamos acordado. Él me trajo a un raro lugar del cual no tenía idea de su existencia. Hay muchas personas comprando cosas, otras entrenando. Y yo, Alex Piterson, no paro de preguntar como una niña en una tienda de dulces.

—¿Eso es talco? —pregunto curiosa, cuando veo a un hombre bañado en un blanco polvo de pies a cabeza.

Me sorprende que pueda respirar, si yo fuera él, estoy segura que hubiera armado todo un drama.

—Si, es para el trasero de tu abuela.

De hecho... A mi abuela le encantaba el talquíto.

De inmediato protesto.

—¡Oye! —golpeo su hombro.

—¿Qué? —dice cínicamente.

¿Te crees graciosito, Nico?

—Eres muy grosero, y lo cómico no te queda nada bien —comento, mirándolo por encima de mi hombro.

—Y tú muy parlanchina, ¿alguna vez te han dicho que hablas mucho? —inquiere arqueando una de sus cejas de manera divertida.

—Bueno... no tengo muchos amigos con quién hablar, pero admito que tengo a mi madre al borde del colapso, y siempre me mandan a callar en clases —digo con toda sinceridad.

Lo admito, amo hablar hasta volver loca a la gente, es un don.

—¿En serio? —finge asombro—. No lo hubiera imaginado.

Abro mis ojos como si hubiera visto al mismísimo rey de los michis, al mirar hacía mi derecha y encontrarme a un hombre con una mochila que vuela.

¿Pueden creerlo? ¡La puta mochila vuela!

—¡¡Yo quiero una de esas!! —exclamo en un chillido.

—¿Qué cosa? —mira hacia donde yo señalo— ¡Oh! Eso es una mochila cohete de propulsión. Y no te emociones mucho, sólo los de nivel 10 las tienen —yo gruño.

—¿Es en serio? Pero que gran mierda —protesto cruzándome de brazos.

Que injusta es la vida.

—Vaya, de verdad amo tu léxico. Es fenomenal —ironiza.

Espía Adolescente©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora