CAPITULO XIV.- CAPULLO DE FLOR

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- ¡UNA VEZ MÁS! – Pedía una agotada Sam Manson entre jadeos a sus maestros.

- Ya es suficiente – respondía Dan

- ¡NO! Aun me quedan fuerzas

- Sam... - Dan la miraba preocupado y a la vez impresionado por su convicción.

- ¡Dijiste que no tendrías compasión! Pues bien quiero más – ella seguía jadeante, mirándolo con fuego en las pupilas

- Es admirable su determinación – decía Maleza mientras miraba atónito el aguante que tenia esa chica

- Igual que un felino cazando a su presa – Soltó para sorpresa de Maleza – Muy bien Gatita ¿Quieres más? Te vamos a dar más.

Él comenzó a clonarse de tal forma que parecían ser infinitas sus copias, ella se colocó en posición de batalla, sus ojos amatistas tomaron un color completamente verde y con una sonrisa comenzó a levantar sus manos haciendo que la tierra vibrara, un ejército de enormes plantas vivientes salió del suelo de golpe y comenzaron a atacar los clones de Dan Phantom. Las ramas servían como lanzas que atravesaban uno a uno a algunos clones, mientas las lianas atrapaban y estrujaban a otros hasta hacerlos desaparecer. Al final en la arena sólo quedaban Dan y Sam, ella tenía la respiración agitada y el sudor emanando de cada poro, los golpes eran evidentes en su cuerpo a estas alturas y el cansancio comenzaba a cobrar factura; por otro lado, él seguía impasible, sin evidencia de pelea en su cuerpo.

- ¡ROUND FINAL!

Gritó Dan y acto seguido se abalanzo directo hacia Sam mientras ella levantaba un muro de plantas, el cual estallo después de que un rayo de ectoplasma se estrellara contra él, Dan atravesó el humo topándose con la nada, cuando de pronto una espina roso su mejilla dando paso a otras más las cuales apenas si pudo esquivar, una patada golpeo su rostro seguida de los puños de la joven, ambos comenzaron a pelear uno a uno a puño limpio, estaban al mismo nivel y eso era evidente, Sam había progresado considerablemente. El puño de él golpeó su mentón y ella voló varios metros hasta quedar en el piso, él se acercó a su cuerpo, estaba a punto de caer inconsciente y aun así miraba a su entrenador desafiante.

- Se termino Gatita, ahora a descansar

- Aún no – respondió tratando de incorporarse, el suelo crujió y una planta salió velozmente disparándolo hacia el otro extremo, Sam se dejó caer por completo en el piso.

- Ahora si se terminó – quedó inconsciente después de estas palabras.

- Bien hecho Dan, la llevaste al límite – maleza se acercaba hacia el con una sonrisa en el rostro

- Y aun así logró seguirme el paso, además de darme un buen golpe.

- Es una excelente estratega, pero si él no lucha con nosotros no funcionara... fuiste muy claro en ese punto.

- Lo hará, al final lo hará

- ¿Cómo estas tan seguro?

- Digamos que somos muy similares, además de que lo mantengo vigilado...mientras tanto es mejor que nosotros nos preparemos ya que no tardará en atacar.

- ¿Amorpho?

- Será mejor que no sepas quien... por lo pronto la llevaré a casa a descansar

Dan tomó a Sam entre sus brazos y acto seguido abrió un portal fantasma que daba directo a la habitación de Sam en su mansión en Amity Park.

- Mientras yo regreso contacta a los otros y pregúntales si están listos

- Entendido

Entró al portal e instantáneamente este se cerró dejando a maleza sólo, del otro lado Dan posaba a Sam sobre su cama mientras con la mirada recorría cada detalle de esta, se transformó en su forma humana, algo similar a Danny, sólo que más musculoso y con el cabello largo además de ojos color miel. Usaba pantalón de mezclilla color negro al igual que su camiseta, cadenas adornaban las presillas de su pantalón cayendo en curva hacia sus bolsillos, una chamarra de cuero y botas negras. Miraba con detenimiento a la mujer que ahora dormía plácidamente en aquella suave cama, parecía un ángel dormido ¿Quién diría que bajo ese rostro angelical se escondía una mujer guerrera, fuerte y sensual? La contempló por largo rato y no dejaba de preguntarse ¿Cómo había podido ser tan estúpido? Agradecía el poder estar con ella, hablarle, hacerla reír ¿Cuántos años estuvo lejos de esa mujer? Ya había perdido la cuenta, la había perdido en una explosión, después cuando lucho con su pasado y ahora la recuperaba. Tres veces vio su vida pasar, tres vidas diferente y en cada una de ellas, seguía escogiéndola, seguía cayendo en sus encantos tarde que temprano.

DANNY PHANTOM: TIEMPO FUERADonde viven las historias. Descúbrelo ahora