Dʀᴜɢs ~ Zᴀsᴋᴏ (🆃🅴🆁🅼🅸🅽🅰🅳🅰)

epílogo

Elisa's pov

Cerré mi carpeta y me puse de pie.

Salí de la institución y caminé de nuevo lentamente hasta mi apartamento. Estaba muy cerca y siempre me tomaba el tiempo de caminar a casa.

En el camino saqué las llaves y mis audífonos. Al menos alcanzaria a ponerme una canción.

Estaba sonando una canción de Chemi, sí, Chemi nuestro amigo.

Había conseguido grabar con un estudio y se había ido a competir internacionalmente al freestyle. Me daba mucho gusto saber que le iba bien.

Hablando de él, se había quedado mi apartamento y vivía con Elise ahí.

También me daba gusto que Pablo e Itziar había vuelto, y según Pablo, estaba tan enamorado de ella que iba a pedirle matrimonio después de 3 años de novios.

Ginés y Manel seguían viviendo en el apartamento de a un lado y de vez en cuando venían a casa a hacer pijamada.

Sibel y Javi seguían en Inglaterra, eran muy felices, había recibido tres tarjetas de navidad, porque Sibel era tan fuerte que convencí a Javi de hacer lo que ella quisiera.

Hace 2 años tuve noticias de mi madre biológica. Mi abuela me llamó para decirme que había muerto, al parecer... No era tan fuerte como decía y las drogas le habían pasado factura.

Sentía una tristeza extraña porque a pesar de no vivir con ella muchos años sentía un cariño por la persona que me dió la vida. Fue de gran ayuda que tanto mi padre como mi hermano y mi estupendo novio me habían ayudado.

Mi padre no había vuelto con mi madre, pero se había puesto mucho más feliz. Mis sospechas son que sale con una mujer y por lo que he investigado es la madre de Itziar.

Él dice que no, pero yo creo que sí.

Con Ginés todo estaba bien.

Después de que llegó a mi apartamento aquella vez, habíamos pasado los mejores momentos juntos.

Decidió pedirme que fuese su novia 1 mes después. Sí, vivíamos juntos y aún no éramos novios. Era porque ninguno de los dos sentía la necesidad de pedirlo. Ya nos sentíamos el uno del otro.

Pero Ginés era un tierno y una tarde que volví de la universidad me tenía la casa llena de rosas y velas. Me había hecho la cena y había preparado un par de películas para ver.

Me pidió que fuese su novia entre tartamudeos u palabras nerviosas. Cosa que me dió ternura porque nosotros ya éramos novios aunque no lo dijéramos.

Habíamos hecho el amor el mismo día en que volví a verlo, nos habíamos entregado con amor y esta vez sin el pensamiento de que al terminar uno de los dos se apartaría.

Ahora estábamos a 2 años de acabar la carrera. Y éramos muy felices los dos juntos en casa.

Aún no teníamos planes de nada, aunque llevasemos 3 años ya juntos, claro que había peleas, pero eran tan insignificantes que terminábamos pidiendonos perdón entre besos.

Aún me costaba trabajo pensar que había conocido al amor de mi vida por culpa de una estúpida tutoría que al final no había quitado puntos.

Pero supongo que ambos necesitábamos esto, para dejar las drogas que teníamos y drogarnos con la mirada del otro.