12

2K 86 0
                                    

Lucía.

Abrí los ojos, e inmediatamente un ardor insoportable inundó mi cuerpo, solté un suspiro de dolor, intente incorporarme, pero el dolor me lo impedía..

-Lo mejor es que por el momento no se mueva señorita--dijo la chica que había visto antes de perder la conciencia-Su piel está demasiado lastimada, así que tendré que mandarle algunos medicamentos para el ardor, mientras se encontraba inconsciente le inyecte un médicamento que le ayudara a rebajar el dolor, en unos 2 minutos más el dolor deberá empezar a disminuir--dijo con una sonrisa en su rostro, y efectivamente el dolor comenzaba a disminuir.

-Gracias - dije, mientras ella salía de la habitación

-Hey, que bueno que ya estés bien, pero... No me vuelvas a hacer esto quieres.. - Me dijo Miranda, mientras varias lágrimas caian por su rostro. Recordé todo y no pude evitar sentirme mal..

-Perdón, te prometo que no volverá a pasar nada -

-Alex estaba demasiado preocupado, creo que iré a avisarle que ya despertaste -

-¿Alex estaba preocupado? -

-Demasiado, no paraba de pedirnos perdón, decía que si no te hubiera dejado sola, esto no te hubiera pasado, bueno iré a hablarle-

-No, espera aún no le hables - no quería verlo aún- solo dile que estoy bien, y después regresa, porfavor, me da pena que me vea así. Se que me vio  hace rato que estaba peor, pero solo no le hables..

-Ok, esta bien.. - parecía confundida.

Miranda volvió más rápido de lo que esperaba... Pero no volvió sola, Alex venía tras de ella, por un momento la mire con enfado, pero por la expresión que me hizo, al parecer no había logrado que el no entrará en mi habitación...

-¿Cómo te sientes? - pregunto preocupado.

-Bien, ya no me duele tanto- dije con una sonrisa algo forzada

-Me alegro... Mmm Lucía, en cuanto te recuperes, necesito hablar contigo--dijo serio

-¿De qué? - mi tono fue algo grosero...

-De los mensajes que te han estado llegado...-su cuerpo se tenso

-¿De qué mensajes hablas? - mi corazón latía más rápido que nunca.

-Sabes perfectamente de que mensajes hablo, mira no quiero estresarte en estos momentos, pero cuando estés mejor, vamos a hablar. - no me dio tiempo de contestar, ya que inmediatamente salió del cuarto.

Miranda me miraba confundida...

-Ni me mires así, creeme que yo tampoco tengo idea de lo que habla-mentí, sabía perfectamente de que mensajes hablaba...

Logré incorporarme, me dirigí al espejo de mi tocador y no pude creer lo que veía...

Mis piernas estaban irritadas, tenía cortadas, por casi todas mis piernas, al igual que mis brazos...

Antes de acostarme, tome los medicamentos que me había mandado la doctora, aunque estos me ayudaron con el dolor no podía moverme demasiado...

Mi alarma sonó, la apague rápidamente, ya que no estaba dormida, no pude dormir ni 5 minutos, el ardor era demasiado, me pare, y me dirigí al baño, me preocupaba el que me pondría, la tela de mi pijama era suave, y no me lastimaba, pero no podría estar en pijama todo el día, intente tomar un baño, lo cual al principio me parecía imposible, pero tenía que hacerlo, ya que la doctora me había dicho que tenía que bañarme por más que me doliera, así que me bañe con agua helada, me vestí con ropa para entrenar, ya que no me lastimaba nada, baje las escaleras como pude...

Caminaba como pingüino , ya que mis piernas no podían rosarse gracias al ardor que sentía, me encontre a Amelia en la cocina, la cual al ver mis brazos, empezó a llorar inmediatamente, logré calmarla, después se fue de la cocina, y me quedé totalmente sola.

Minutos después apareció Alex..

-Buenos días - le dije  con una sonrisa en el rostro.

-Buenos días, ¿no pudiste dormir? - preguntó preocupado

-No, ¿cómo lo sabes? -

-Por tus ojeras - dijo señalando las enormes bolsas que se encontraban debajo de mis ojos.

-Cierto, olvide maquillarlas -

-Hey tranquila, no te ves tan horrible - dijo riendo

-Jaja, que gracioso-dije mientras volteaba los ojos

-Es broma, sabes que eres hermosa de cualquier forma - dijo y yo me sonroje

-Yo... tengo que tomar el medicamento - dije para poder escapar de ahí, al pararme mis piernas me ardieron, y no pude evitar quejarme..

-Auch- dije mientras me iconporaba

-¿Estas bien? - dijo preocupado

-Si, solo me dolieron las piernas un poco - antes de que pudiera salir de ahí, sus brazos me rodearon...

-No vuelvas a hacer este tipo de cosas porfavor- por el tono en que lo dijo, parecía que me estaba suplicando

-No lo volveré a hacer lo prometo -

Después de esto, el me beso, el ardor que sentía en mi piel se fue instantáneamente, el beso era desesperado, tenía mucho que no nos besabamos, realmente había extrañado esto...

Se escucharon unos pasos que se dirigían a la cocina, nos separamos lo más rápido posible, en cuanto sus labios se separaran de los míos, la sensación de ardor volvió a invadir mi cuerpo..

-Wow prima, ¿qué te pasó? - era Alondra, en su cara se podía ver la alegría que le daba el verme así, antes de que pudiera contestar Alex se adelantó

-Señorita Alondra, si ha venido aquí a molestar a su prima, le voy a pedir que se vaya, ella no puede alterarse en estos momentos - dijo serio

-No, yo no vengo a molestar, yo solo venia por agua - sabía que estaba furiosa y eso me llena a de alegría.

Han pasado dos semanas, mi piel ya no me arde, las heridas, ya son casi imperceptibles, Alex ha sido un amor conmigo, pero hoy era el día en que habíamos acordado  que hablaríamos, estaba realmente nerviosa...

-Hola- dije mientras el entraba a mi habitación, estábamos solos en la casa, mis padres habían salido a una reunión de negocios y Miranda los había acompañado, y Alondra nunca estaba en la casa.

-Hola- dijo serio

-¿De qué quieras hablar? - dije nerviosa

-¿Confías en mi Lucía?- dijo con los ojos entre cerrados

-Claro, ¿por qué lo preguntas? -

-Porque no lo parece -

-¿Qué? -

-Voy a ir al grano, ¿Qué es esto? - dijo mostrandome su celular...
No puede ser, ese imbécil le habia mandado toda nuestra conversación, incluso le habia mandado... El video

Mi Guardaespaldas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora