Despierto y Miranda ya no está, hoy me sentía mejor, me puse ropa para hacer ejercicio, y baje directo al gimnasio. Al llegar a este me encontré a Alex, por primera vez, no sentí ese hueco en el pecho, si no sentía rabia y coraje, pase al lado de él ignorandolo.
-Buenos días señorita Lucía- dijo a lo que yo solo le dedique una sonrisa fría.
Termine de hacer ejercicio, y me sentía feliz, subí a bañarme, y a cambiarme.
Al bajar a la cocina a desayunar, me encontré con la incómoda escena de Alex y Alondra besándose, pero si les soy sincera, ya no me afectaba del todo, y si lo hacía no se los demostraría.
-Oh, perdón primita - dijo Alondra limpiandose el labial que se le había corrido.
-No te preocupes, sigan que yo ya me voy- dije, y antes de salir les guiñe un ojo. Alex solo me miraba frunciendo el ceño.
Al subir a mi habitación le hable a Lorie, necesitaba salir y conocer a más gente.
-Hola Luci-
- Hola, ¿Tienes planes para hoy? -
-No, bueno iba a salir con mi hermano, pero si quieres puedes venir con nosotros -
-¿Vas a salir con Leo? -
-Si, ese mismo - dijo riendo.
-Bueno pues encantada de ir - digo riendo.
-Vale, pasamos por ti a las 6-
-Perfecto -
Leo fue mi amor platónico de la adolescencia, estuvimos a punto de tener algo serio, pero simplemente no se dio. Baje a ver si mis padres ha habían llegado, y afortunadamente ya lo habían hecho, todo el personal estaba saludándolo, incluso Alondra se veía feliz de que hayan vuelto.
Corrí a abrazar primero a mi papá, e inmediatamente a mi mamá.
-Los extrañe tanto-
-Y nosotras a ti mi amor - dijo mi mamá.
Nos contaron como les fue en su viaje, y dentro de toda la charla no me percate de que eran las 3 de la tarde, Dios tenía que comer, bañarme, cambiarme, no me daría tiempo.
-Bueno yo los dejo, tengo que arreglarme, ya que saldré - dije, pero mi papá me detuvo.
-Oh, espera, no se si ya sabias, pero Alondra y Alex tienen una relación -
-Si, yo ya lo sabía - voltee a ver a Alondra y a Alex, y este estaba tenso.
-Te lo comento, porque que tal y no lo sabias y sería incómodo. -
-Si pa, no te preocupes, no me siento incómoda al respecto - dije, iba a salir, pero recordé que si salía Alex tendría que acompañarme, y eso sería demasiado incómodo.- Ah oye papá, ya que sabes de la relación de Alondra y Alex, quería proponerles algo- dije y Alex me miró frunciendo el ceño.
-Claro hija dime -
-Pues quería ver si, ¿podríamos hacer cambio de guardaespaldas?, digo Alex es bueno en su trabajo, pero pues ahora que anda con Alondra, si hacemos cambio, podrá estar más cerca de ella, y si tienen planes, no serán interrumpidos, porque yo tenga que salir -
-Me parece una gran idea - dijo Alondra, a Alex parecía no agradarle la idea.
-Ok, esta bien, desde hoy, Guillermo cuidará de ti, y Alex de Alondra -
-¿Solo con Lorie? - preguntó mi papá cruzandose de brasos.
- Bueno, también irá Leo-.
-Con qué Leo eh!! - dijo Miranda, guiñandome un ojo.
-Me parece perfecto, Leo siempre me pareció un gran partido para ti hija- dijo mi mamá con una enorme sonrisa.
-Ah....bueno yo me voy- esto me incomodaba, ya que al lado de mi, se encontraba el hombre que amo con todas mis fuerzas, el cual estaba demasiado tenso, y más al escuchar a mi mamá decir que el era un buen partido.
-Ponte guapa hija, Leo y tú simpre tuvieron algo especial - dijo y yo solo salí lo más rápido de ahí.
Alex parecía molesto, pude notar que cuando mi madre dijo eso último, el apreto sus puños con fuerza, pero tampoco dejaba de pensar en que mi madre tenía razón, Leo y yo eramos inseparables, él era 4 años mayor que yo, al igual que Alex.
Comi, y me metí a bañar. Tarde años encontar que me pondría hasta que encontré el outfit perfecto...
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Al principio pensaba en ponerme un short, ya que hacía demasiado calor, pero decidí que sería mejor no hacerlo. Me sujete el pelo, en una coleta alta, ya que Miranda decía que mi cara se viera más fina.
Dieron las 6, y Lore ya había llegado por mi, estaba realmente nerviosa, no sabía cuánto había cambiado Leo. Siempre tuvo un cuerpo de infarto, era alto, guapo, ojos azules, y una hermosa sonrisa. En cambio yo, era una tablita, pero al parecer Dios se apiado de mi, y de un momento a otro me desarrolle más de lo que hubiera querido.
Salí junto con Guillermo, a diferencia de Alex, él mantenía más distancia, y no era tan fácil entablar conversación con él, Alex era más divertido, y me sentía más protegida... Intenté sacar de mis pensamientos a Alex, debía apagar todo el amor que sentía por el.
Subí al coche y me percate de que Guillermo no nos seguía...
-Oh, Lorie creo que perdimos a Guillermo--dije volteando hacia atrás.
-Tranquila, Leo habló con tus papás, y los convenció de que no sería necesario que llevaras a tu guardaespaldas -
-Vaya, por cierto, ¿Dónde está Leo? - de tanto pensar en Alex, no note que Leo no se encontraba en el coche.
-Él se adelantó, reunió a todos nuestros amigos, básicamente será como un reencuentro Luci, Leo no puede esperar para verte -
-¿Enserio? - dije con una risa nerviosa.
-Si, desde que le dije que nos acompañarías, se puso como loco para ver que se pondría, y a donde iríamos - dijo riendo.
-La verdad yo también estoy ansiosa por verlo -
-Al parecer iremos de antro, dijo viendo su celular -
-Yo no vengo vestida para la ocasión - dije señalando mi ropa.
-Tranquila, yo te presto ropa -
-Vale - el reto del camino Lorie me pregunto por Alex, y le conté que había hecho un cambio con mi prima.
-Verás que eso te ayudará a olvidarlo más rápido -
-Si, tienes razón -
-Eso y... Mi hermano - dijo casi en un susurro.
-Eres una tonta - dije dándole un pequeño sape.
Llegamos a la casa, y mis manos no dejaban de sudar, entramos y nos dirijamos a la sala. Lorie llamó a Leo, y en un par de minutos el bajó...
