18

1.6K 67 0
                                    

Por fin era viernes, he de admitir que estaba bastante nerviosa, Miranda había invitado a demasiadas personas, incluso Lorie me llamó para reclamarme el porque había sido Miranda la que la invitará y no yo.

Eran apenas las 3 de la tarde, la fiesta empezaba a las 8, así que decidí que dormiría un rato, para así tener energía en la fiesta, me dormi al rededor de 2 horas, si no fuera porque Alex me despertó, no se a que hora me habría despertado, a las 5:30 Miranda entró como loca a mi cuarto.

-Tenemos que comenzar a arreglarnos ahora!!!,! Es tardísimo! - volteo y se percató de que Alex estaba en la habitación -! Tú fuera! - dijo y Alex se fue.

-Hey, relajate, aún es temprano - dije riéndome.

-! ¿Temprano?!, Lucía por dios,! Son las 5:30!,! Apenas y nos dará tiempo! -

-Ok, esta bien hay que empezar -

A las 7:30 ya estabamos listas, mi vestido era rojo, y llevaba unas zapatillas doradas.

A las 7:30 ya estabamos listas, mi vestido era rojo, y llevaba unas zapatillas doradas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me deje el pelo suelto, Alex aún no había visto cómo era mi vestido, así que cuando baje, no pude evitar reír al ver como babeaba

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me deje el pelo suelto, Alex aún no había visto cómo era mi vestido, así que cuando baje, no pude evitar reír al ver como babeaba.

-Te ves realmente hermosa-dijo dándome un tierno beso.

-Gracias, tú no te quedas atrás - dije guiñandole un ojo-Iré a ver si Miranda necesita ayuda.

Me dirijo al jardín y me quedé sorprendida, todo se veía hermoso, hoy era mi cumpleaños número 24, y Miranda había organizado todo a la perfección, había una mesa con un montón de bebidas, obvio todas alcohólicas, había sillas y mesas repartidas en el jardín,y hasta una pista de baile, todo estaba perfecto.

Dieron las 8, y todos empezaron a llegar, muchos eran mis amigos de la infancia, a las 8:30 llegó Lorie.

-Wow, te ves hermosa!!, nunca creí que Lucía Allent usaría un vestido como este - y tenía razón, nunca fui de  usar cosas escotadas.

-Siempre hay una primera vez- dije riendo.

-Y, ¿qué pasó con Alex?! -

-Pues logramos arreglar las cosas y ahora estamos mejor que nunca -

-Me alegro, se ve que te quiere, pero bueno dejemos de hablar de amor, y vamos a bailar- dijo jalandome hacia la pista.

Pase al menos 3 horas bailando y ya me dolían los pies, así que me puse a buscar a Alex, ya tenia pocas copas encima, y estaba algo mareada. Cuando logre verlo, una bola de chicas se encontraban a su alrededor, y al verme me miró con cara de ayuda. Me acerque hice a un lado a todas las chicas,y me lleve a Alex estas solo me dedicaban miradas asesinas, y yo solo sonreí victoriosa.

-Me voy un rato y ya andan tras de ti-

-Pero de ti ni se diga, ¿crees que no me doy cuenta como todos los hombres te miran? - dijo y me dio un tierno beso. - Quería golpearlos -

-Hey tranquilo, yo soy toda tuya - dije dándole otro beso.

-Y yo todo tuyo -

Nos dirijamos de nuevo a la pista y seguimos bailando, de un momento a otro Alex se encontraba agarrandome de la cintura, y yo estaba bailandole demasiado provocativa, después de unos segundos lo bese, el beso cada vez era más intenso...

-Hay que subir - dije agitada.

-Me encanta esa idea -

Subimos a mi habitación, y seguíamos besándonos, comencé a quitarle el saco, pero el me paro.

-Luci, ¿estas segura? - dijo preocupado.

-Claro que sí, te deseo, y quiero que me hagas tuya ahora - dicho esto lo jale de corbata y volví a juntar nuestros labios, Alex apretó uno de mis gluteos, y yo le quite su corbata, al igual que su camisa. Seguimos besándonos por un rato, hasta que Alex comenzó a bajar el cierre del vestido, y deje que cayera en el suelo, quedando solamente en bragas, Alex se detuvo un momento a contemplarme, ya me había visto así, pero parecía como si fuera la primera vez, volvió a besarme, y yo comencé a desabrochar su pantalón, de momento sentí una de las manos de Alex sobre mi pecho derecho y eso me hizo soltar un pequeño gemido, terminé de quitarle el pantalón, y el me tiro a la cama, se colocó encima de mi, y comenzó a besar mi cuello, después pasó por mi clavícula, hasta llegar a mis pecho, los cuales beso, chupo y mordisqueo, haciéndome gemir de placer, siguió bajando hasta mi ombligo, quito mis bragas, y me sonroje, el solo sonrió por eso, volvió a besarme y comenzó a susurrarme al oído...

-Eres hermosa Luci- dijo y mordió mi oreja, sin querer arañe su espalda, el solo soltó un gruñido, siguió besándome, y sin pensarlo le quite su bóxer, sentí algo de temor al ver el tamaño, ya no era virgen, pero aún así estaba nerviosa, el saco un paquete plateado de su pantalón, y se colocó el condón, volvió a besarme y de momento entró en mi, la sensación no era para nada incómoda, al contrario, no pude evitar soltar un gemido, Alex cada vez me embestida más rápido, a lo que yo mordía su hombro para evitar que mis gemido se escucharán por toda la casa.

-Aa... lex- gemia su nombre una y otra vez.

-Dios Luci...eres perfecta - dijo Alex con voz ronca, ambos logramos corrernos gritando nuestros nombres, este hombre realmente estaba cambiando mi vida.

-Te amo - dije sin más.

-Yo también te amo, hermosa--dijo y me volvió a besar, ambos nos quedamos recostados sin decir nada, solo asimilando, lo hermoso que había acabado el día, de momento sentí como los ojos me pesaban, y no se en que momento caí en un profundo sueño.

Mi Guardaespaldas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora