BAEKHYUN - I

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El nerviosismo se ponía oler ha kilómetros, el líder del grupo se encuentra temblando. No tenía idea alguna sobre que hacer, nunca pensó en estar aquí.

—¿Junmyeon hyung? —El bailarin chino le intenta llamar la atención, alza una mano y toca su frente. —¿Pasa algo?

—¿Eh? —Mira a su al rededor, notando como la mayoría ha acabado con su comida, mientras que la de él está intacta. —Nada, no pasa nada.

Yixing sube los hombros derrotado, un puchero adorable se instala en su rostro mientas su atención es robada por otros integrantes. Por otro lado, Suho intentaba disfrutar su cena, tomaba entre sus palillos la deliciosa y jugosa carne, su favorita. Al meterlo en su boca y masticar el sabor era casi nulo, no sabía a nada.

—Maldición. —Pensaba el líder.

No podía negar lo ansioso que se encontraba, era ridículo pero entendible. Seguía pensando el porqué acepto este trato tal fácilmente, puede que la situación de los menores lo volvió de una manera vulnerable. Un blanco fácil, el propio CEO sabía la decisión que tomaría, era muy obvio.

De pronto varios ruidos sacaron al líder coreano del trance, ver como la mayoría se paraba de su lugar y agradecían por la comida le revolvió el estómago, no pudo moverse hasta quedar cara a cara con el pequeño vocalista.

—¿Vamos? —Le sonríe de forma coqueta.

El mayor asiente y se levanta de su lugar, imitando los movimiento del más bajo. Esto era nuevo, no tenía idea alguna sobre hacerlo entre hombres, pero por si a caso ya tomó sus precauciones, tomando un largo e íntimo baño.

—¿Puede ser en mi habitación? —Lo mira con esos brillantes ojos. —Por favor.

El mayor suspira y asiente tímidamente, el otro sonríe al salirse con la suya una vez más. Caminan y camina hasta estar frente a una puerta de madera, el silencio invadió todo el pasillo, provocando que Suho tome una gran bocanada de aire.
Era más difícil de lo que se aparenta.

Entran a la pequeña habitación, un poco descuidada con ropa posiblemente sucia en el suelo junto a la cama desordenada. El mayor frunce el ceño ante tal desorden, pensaba en darle una reprendida antes de sentir la delicada mano tomar sus hombros con poca fuerza. La atención estaba totalmente a Baekhyun, quien no quitaba una ligera sonrisa en su rostro.

—Para ser sincero no me llama la atención tener sexo contigo, voté por Sehun al tener un bonito cuerpo y gran trasero. —Alza una ceja mirando de arriba hacia abajo al mayor. —Me decepcioné al saber la conclusión del contrato, me parecía tentador tener una prostituta, pero...

Empuja con la suficiente fuerza el pecho del mayor para que este cayera sentado en la cama, encima de las desarregladas sábanas color azul oscuro.

—Tienes algo que envuelve a cualquiera, intentas no llamar la atención sin darte cuenta que brillas por tu propia luz. —Explica. —Piel suave, ojos risueños y una bonita sonrisa, tienes cualidades físicas perfectas. Tu cuerpo es algo masculino, por eso no tendremos relaciones, por ahora.

Junmyeon se perdió en las palabras del menor, no sabía si tomarlas como un halago o una crítica en sí.
Todos sus pensamientos fueron dramáticamente interrumpidos al ver como las manos de Baekhyun viajan hasta llegar al botón de su pantalón.

—¿Eh? —Un jadeo se escapa de sus labios al observar lo erótico que podría ser su menor.

Baekhyun masajea con su mano derecha su miembro por encima de la ropa, da lentos movimientos circulares en su anatomía hasta que esta se despierte. Sus ojos nunca los giró a otra dirección, siempre viendo las divertidas reacciones de su líder favorito; las mejillas rosáceas junto a un ligero ceño fruncido. Desabrocha el botón y baja la bragueta, soltando un suspiro al no tener tanta presión en su ya erecto miembro.

Con la mano izquierda toma el antebrazo de Suho y lo acerca a su erección. Un grito de sorpresa se cuela en sus labios al sentir el tímido moviendo de Junmyeon, acariciando con sumo cuidado y lentitud su cabeza.

—Baja mi bóxer. —La voz se le vuelve más aguda al estar excitado. —No quiero tus manos, haz magia con tu linda boca.

Vergonzoso, una incontable vergüenza abraza al más alto.
Tenía que seguir con las peticiones de su menor, así que sin perder más tiempo baja de forma lenta la prenda interior color negra, encontrándose cara a cara con el largo falo, arrancándole un suspiro.

Saca con timidez su cálida lengua, lamiendo de forma vertical toda la extensión del menor, besa la cabeza y sopla provocándole un gemido ahogado a vocalista principal.

—¿Ya has estado con otros hombres? —Respira profundo, intentado tomar el mayor aire posible.

—Uhm, no en realidad. —Dice avergonzado. —Vi algo de porno gay, me informé por si a caso.

—Maravillo. —Sonríe. —Muestra tus nuevas habilidades, lo estás haciendo bien hasta ahora, sigue así.

Junmyeon vuelve a bajar la mirada concentrándose en la felación a su menor, sigue humedeciendo el falo hasta que introduce la punta del pene a su cavidad bucal.

Una mala idea, puede sentir como se ahoga, no sabia controlar la respiración en esos casos, nadie le enseñó a hacerlo. Aunque a Baekhyun le agradó la sensación, tomando de los cabellos para atraerlo más a su pelvis.

—M-mierda. —Jadea.

Sin piedad ni importancia en las arcadas del mayor, toma el control de las estocadas hasta sentir el muy conocido cosquilleo golpearlo. Mete y saca su falo rozando la lengua que le volvía loco.
Después de unos tortuosos segundos aleja su miembro de los hinchados labios, con la respiración agitada Junmyeon respira frenéticamente, tosiendo.

—Abre la boca y mírame. —La última orden del vocalista.

Suho abre sus ojos y observa a Baekhyun masturbándose frente a su cara, al escuchar un gemido sigue con la instrucción y abre la boca sacando la lengua por inercia.

Aquel caliente líquido se dispara por toda la cara del mayor, acumulándose principalmente por la parte de los labios.

—Trágalo. —Pasa por la manchada cara su miembro, haciendo círculos por las bonitas mejillas de Junmyeon, ve como este traga su esencia y ríe. —¡Gracias por tus servicios, Myeonnie!

𝑻𝒐𝒙𝒊𝒄 | ᴇxᴏ》 Vᴇʀ. II 《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora