MAGNATE Trabajando para el Sr. Goku

CAP 6: ¿La decisión correcta?

Todos sufrimos cambios constantemente, de hecho, lo hacemos todo el tiempo, es parte de nuestra naturaleza.

Pero cuando nos vemos obligados a cambiar para hacer algo por alguien entendemos que no es normal, algo está cambiando, y no somos nosotros precisamente, es algo en nuestro interior, y algunas veces desearíamos que se quede como era antes.

***

Imaginé que al igual que en todos los lugares llegaría un momento en el que podría conocer al señor Sanders, pero que se presente de esta forma tan inusual, es...

Ya sabemos como se siente.

-Disculpe señor -digo algo atónita por su presentación- pero no entiendo que puede ser realmente eso que nos involucre al señor Goku y a mí en la presidencia -eso es muy extraño.
-Concuerdo con eso -me apoya el señor Goku.

-Me enteré del pequeño -se detiene un momento para pensar, como si buscara la palabra correcta- accidente, sí, llamémoslo accidente, y vaya que es realmente justo lo que necesito, es perfecto que lleven una relación así puesto que no será la última vez.

Realmente no podría describir como me sentía, aunque no podía ver mi rostro sentía como mis mejillas ardían avergonzadas, y de hecho, aún intento entender el porqué me dejé llevar por su atrevido y seductor encanto, él me sedujo y yo caí, y es la primera vez que algo así me pasa.

-Señor puedo explicarlo -intento explicar.

-Papá podrías dejar eso a un lado y decir de una vez que es lo que querías decirnos a ambos -reclama el jefe con ese adorable humor de ogro.

-Está bien -responde- quieres que sea directo con ambos pues bien lo seré, y empezaré por ti, sabes perfectamente que a nadie de la familia le agrada Milk, -la expresión de mi jefe cambia de enojado a asesino serial furioso- esa mujer solo ha traído discordia a la familia y no aceptaré que te cases con ella.

-Es una broma -refuta mi jefe enojado- en serio crees que voy a cancelar mi boda porque ustedes me lo piden.

-Sabía que escucharía algo como eso -añade el padre del jefe- y es aquí donde entra usted señorita Gremory.

Mi cerebro daba volteretas tratando de entender que tenía que ver yo con toda esa historia.

-Aún no entiendo señor -digo confusa.

-Escuchame bien hijo, -responde el papá del jefe- no cancelaras tu matrimonio siempre y cuando la mujer con la que te cases sea ella.

Yo... la palabra "ella" resonaba como eco en mi cabeza una y otra vez sin parar, porqué debería casarme con él, eso es algo tonto, nisiquiera nos conocemos, puede que tengamos un par de sucesos extraños en común, pero casarse iba más allá de cualquier cosa.

-¿Qué?... -fue lo único que pude decir, estaba totalmente confundida.

-Olvidalo, -responde mi jefe- olvidalo quieres, yo no me casare con mi asistente ni con nadie más que no sea la mujer a la que yo elija.

-No estás en condiciones de elegir, -interrumpe su padre- escuchame bien, o te casas con la señorita Gremory o te quito no solo la presidencia, sino también la herencia y cualquier vínculo con la empresa y con nuestra familia.

-¡No puedes hacerme esto! -grita furioso.

-Claro que puedo -responde retandolo- soy el dueño y fundador de esta empresa y puedo sacarte cuando yo quiera, no dejaré que esa mujer destruya todo lo que he construido y no dejaré que te destruya a ti también.

-No puedes -añade el jefe- y ella, ella no aceptará -dice señalandome.

-Escucha hija -se dirige a mí el papá del jefe- sé que esto no es algo de tu agrado, y sé que no hay nada que pueda ofrecerte para que aceptes esto pero si no aceptas no solo se destruirá mi familia, también mi empresa.