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Nos bajamos de la camioneta y fuimos hasta la vereda. El edifico era realmente enorme.

Ven, sigueme─habló el mánager.

Lo seguí y entramos en el gigantesco edificio. Llegando a la recepción una secretaria, asumo, se nos acercó y me miró de pies a cabeza.

Es está nuestra nueva niña?─dijo sonriendo la mujer.

Sí, no sabes lo amable y buena que es, estoy muy contento porque las chicas se llevarán una muy buena amiga─le dijo volteando su cabeza hacia mí.

La mujer nos sonrió y seguimos de largo. El edificio era amplio, cada piso estaba organizado y lleno de gente pasando y haciendo sus cosas. Me gustaba el ambiente profesional que tenía el lugar.

Todos eran amables y se respetaban, priorizaban su trabajo y tenían todo en su lugar.

Ah─dijo el mánager mientras frenaba al frente de una habitación─Olvidé los papeles en la oficina y no le avisé al Ceo.

Puedes ir, tranquilo, no me voy a perder.

Me sonrió.

Bueno está bien, quédate por aquí y esperame unos minutos.

Si oppa.

El mánager se fue corriendo hasta desaparecer por una de las esquinas del pasillo. Me causó gracia verlo correr.

Giré y miré hacia la puerta en la que el mánager había frenado antes.

Supongo que aquí es donde íbamos a entrar?─pensé.

Decidí entrar y divertirme un poco.

Podía ser la mejor empleada, pero eso no quitaba el hecho de que me gustara hacer las cosas a mi manera y meterme en problemas.

Abrí la puerta y la cerré detrás mío. Había varias personas pero noté que había idols y managers, los cuales diferencie por su vestimenta y aspecto rápidamente.

Ninguna me dedico demasiada atención ya que entraba y salía gente a menudo por la puerta.

Pero una chica de pelo enrulado y castaño claro que estaba sentada en uno de los sillones jugando con su celular me notó y se quedó mirándome. Se dio cuenta de que no era de por allí y era demasiado joven como para ser mánager.

La miré y se quedó mirándome también, bastante confundida sobre quien era o que hacía ahí. Me acerqué despacio y con respeto hacia donde estaba ella y me paré enfrente suyo.

Le sonreí.

Me miró confusa.

Estire mi brazo y rápidamente le saqué el celular de las manos y antes de que se pudiera dar cuenta comencé a correr por la sala.

Pero qué-intentó decir─OYE MI CELULAR─gritó al reaccionar y comenzar a perseguirme.

Me reí tanto mientras corría, no podía evitar gritar e imitarla para molestar.

Ooh noo mi celulaaar~─me reía corriendo.

Devuelvemelo!

Todas las personas que estaban en la habitación miraban la situación totalmente confundidas. Nadie sabía quién era y no entendían que estaba pasando o como había entrado al edificio siquiera si es que llegaba a ser una fan.

La puerta se abrió y entró el mánager, quién tenía cara preocupada al no haberme encontrado afuera en los pasillos. Al verme corriendo con el celular en la mano, se tranquilizó y suspiró aliviado.

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una duda, cada cuánto les gustaría que subiera capítulos?

 𝙆𝙞𝙣𝙙𝙡𝙮 𝙍𝙚𝙖𝙘𝙝𝙞𝙣𝙜 𝙔𝙤𝙪 ||| Soojin y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora