Capitulo 21

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Entre los dos intentamos quitar la sangre del suelo. Tuvimos éxito. Luego limpiamos el papel de la pared con una mezcla de bicarbonato de sodio. Y las manchas desaparecieron por completo.

Ya era el mediodía cuando volvimos a mí departamento. Al entrar, el teléfono estaba sonando. Corrí a contestar.

- ¿Hola?
- Hola, señorita T/A.
- ¿Que necesita?
- No se cómo decir ésto más sutilmente. ¿Usted conocía a Jenny Whitelock?
- Si.
- Falleció anoche. Lo lamento mucho.

Sentí que se me adormecían las piernas. Conocía a Jenny hacía años. Muchos años. Desde la secundaria. Era mi amiga.

- ¿Qué?
- Su... Su ex novio la asesinó. En su casa. No quiero entrar en detalles, señorita. Su funeral será ésta tarde,  las tres, en el cementerio de Gótica. Lo lamento mucho.

Cortó. Pasaron unos segundos hasta que pude reaccionar. Y caí al suelo llorando.

- T/N, ¿Qué pasó?

Arthur corrió hacia mi, se sentó a mi lado y me atrajo hacia él. Me abracé contra su cuerpo. Escondí mi rostro en su cuello. Aún llorando, hablé.

- Jenny. Su ex novio la mató anoche. Carajo.

Arthur intentaba calmarme. Debió sentirse mal. La conocía. Nos habíamos juntado varias veces.

- T/N, lo siento mucho. Ésto es mi culpa.

Y tenía razón. En parte lo era. Los disturbios que se habían causado en la noche habían hecho que Jenny muriera. Su ex novio había aprovechado la situación.

El tipo tenía dinero. No era un payaso. Incluso podía afirmar que si fue a su casa, ni siquiera debió llevar una máscara.

Y así, sucedió en toda la ciudad. Gente inocente falleció.

Aún así, no podía enojarme con Arthur. Él nunca había pedido nada de esa gente. No les dijo que hacer. Si lo hicieron, fue porque ellos quisieron.

El karma había caído sobre mi. Había ayudado a un asesino. Me había convertido en una criminal. Y lo pagaba con una amiga muerta.

Cuando pude calmarme un poco, fui a darme una ducha. Iríamos al funeral. Los dos.

Hacía algo de frío ese día. Y había comenzado a llover. Me puse el vestido negro que había utilizado en el funeral de la señora Fleck un par de días antes.

Había olvidado por completo que había fallecido.

Arthur se puso el traje negro, y se ató el cabello como pudo. Quería estar más presentable.

Ni siquiera habíamos almorzado. El cielo estaba gris. Las gruesas gotas de agua caían sobre nuestro paraguas mientras caminábamos junto a las demás personas, siguiendo el féretro.

Nos habíamos encontrado con T/M/A al llegar a la Iglesia. Nos abrazamos fuertemente. Las tres habíamos sido amigas desde la escuela.

- Tienen las cintas de seguridad del edificio. Fue Roger. Está prófugo. Ni siquiera ocultó su rostro, T/N.

Saludó a Arthur cordialmente. Era una de las única personas que sabía que él era el Guasón, pues lo conocía desde antes que pasaran el video en el programa de Murray. Y aún asi, no dijo nada.

La gente lloraba. T/M/A también. Había sentido nauseas. Por lo que al ir caminando se había tomado del brazo de Arthur, al igual que yo.

Arthur estaba serio. Estaba muy enojado, podías notarlo. Se sentía culpable.

Despedimos a Jenny. Vimos el féretro hundirse en la tierra.

Cuando la gente comenzó a dispersarse, sólo quedamos los tres frente a la tumba.

- T/M/A.

Arthur iba a decir algo.

- Ésto no quedará así.

T/M/A lo observó extrañada. Arthur exhaló, encendiendo un cigarrillo. Había dejado de ser él.

- ¿Qué quieres decir?
- ¿No quieres vengarte? ¿No lo quieren ambas? Yo puedo hacerlo.

T/M/A no comprendía nada. Hasta que fue cayendo muy de a poco.

- Art, no. - dije - La ciudad se está calmando.
- Ésto no puede quedar así, T/N. Ese hijo de perra debe pagar lo que hizo.

Era el Guasón quien estaba hablando. Y yo comencé a doblegarme ante su presencia. Al fin y al cabo, no podía cambiar nada. Ya tenía la idea de vengarse. Ahora la llevaría a cabo.

- T/M/A... ¿Qué dices? ¿Quieres vengar a tu amiga?
- Si. Quiero hacerlo.

Ella no se sintió mal, al contrario. Si bien había estado encerrada en su casa durante la noche, por miedo, compartía las ideas de los payasos. Sólo que nunca había dicho nada.

Incluso se sentía honrada de estar frente al hombre que había comenzado todo el movimiento.

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Nos juntamos los tres en casa de T/M/A. Debíamos planear cuidadosamente la forma de encontrar a Roger.

Lo había visto durante la fiesta de Navidad. No sabía que se había separado de Jenny. Ninguno lo sabía.

T/M/A tenía contactos que podían ayudar. Gente que tenía máscaras de payaso. Que habían estado en los disturbios. Ella estaba segura que cuando les dijeramos lo que queríamos, no tardarían en ayudar.

Llamó a un par de personas por teléfono. Uno de ellos trabajaba en la televisión.

Arthur había llevado pintura, una peluca verde similar a su cabello teñido, y el traje carmesí. Cuando salió de la habitación, maquillado y vestido, T/M/A y yo sonreímos. Había vuelto.

El hombre de la televisión vino a casa de T/M/A también. Estrechó la mano de Arthur con ganas. No podía creer que estaba frente al Guasón.

Ideamos un plan. El hombre filmó al Guasón, mandando un mensaje a los payasos. Mostró una foto en la cámara, de Roger. Pidió ayuda para encontrar al "rico que asesinó a una de los nuestros".

A la noche, mientras las noticias seguían hablando de todos los disturbios, el hombre, ayudado por otros payasos, tomó la señal del noticiario. Y pasó el video de un minuto.

El video se repitió en otros noticiarios. En una hora, los payasos salieron a buscar a Roger. Y haciendo cadenas de llamados, uno de ellos logró comunicarse con nosotros.

- Está en el departamento de al lado, escondido.

La policía no logró hacer nada. No sabían cómo habían cortado la señal. Y todo rastro de quienes lo hicieron fue un misterio.

Los payasos no aparecían en público, con sus máscaras como hacían desde hacía un tiempo. Aquellos que eran payasos, que apoyaban el movimiento, lo hicieron desde las sombras, por lo que no podían sospechar de nadie.

Arthur, vestido de Guasón, acompañado de cuatro payasos armados, se dirigió cerca de las tres de la madrugada a donde estaba Roger.

Los payasos lo asesinaron. El Guasón sólo les dió la órden. Lo torturó mentalmente por asesinar a Jenny. Y antes de matarlo, le dijo al oído que era Arthur Fleck.

Uno de los pocos quienes sabían había muerto.

Arthur llegó a casa una hora más tarde. Los payasos se dispersaron. Yo estaba nerviosa, ansiosa y asustada. Pensaba que Arthur podía ser detenido por la policía. Pero nada pasó.

Guasón, de pie frente a mí en el sofá, se quitó la peluca, y sólo dijo una cosa antes de sentarse a al medio, entre T/M/A y yo.

- Está hecho.

Asi es la vida: Arthur Fleck/Joker x Lectora (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora