Jane Evans/ X-men. ✔

Entrenamiento parte 2

Salimos al balcón de la gran mansión, bajamos y nos sentamos en el pasto, era un lugar tranquilo y bonito, solo se oían las aves pasar y la brisa que había.

-¿Te gusta el paisaje?- Preguntó viendome de reojo.- Creo que tu ya sabes mi reapuesta.- Dije tambien mirandolo de reojo con una sonrisa de lado, el soltó otra de sus risitas negando.
-Jane, sientante.- Dijo algo más serio. Yo le hice caso, el se sentó al frente mio, lo miré algo extrañada.
-Jane, trata de entrar a mi mente y busca un recuerdo triste mio y muéstramelo.- Dijo levantando una ceja y bastante serio, lo miré algo desanimada ya que sabía que la mente de Charles era la más poderosa del mundo y la mía no era ni la mitad de eso, de todos modos lo intentaré.
-Solo concentrate Jane, todo es posible si así lo quieres. Me concentré y cerré mis ojos, forzando demasiado mi mente, la memte de Charles estaba demasiaso protegida. Seguí concentrada pero ya me estaba doliendo mucho la cabeza hasta que un tipo de silbido agudo y fuerte penetró mi mente, grité un poco de dolor, me detuve entonces.
-Jane, ¿Estás bien?- Me dijo Charles preocupado. Lo miré y le dije:
-Charles, es imposible entrar a tu mente.- Le dije bajando mi mirada.
-No es imposible es solo que no te concentras del todo y eso no te ayuda, dejame ayudarte.- Dijo Charles aún con su ceja levantada.-Debes dejar de centrarte en la rabia para amplificar tus poderes, debes encontrar un punto medio entre la rabia y la serenidad y la bondad, eso no te hace más debil como te dijo Erik.- Dijo firme Charles. Yo solo lo miré y me apuntó con sus dedos a su cien como queriendo preguntarme si podía entrar a mi mente, solo asentí, derrepente se me vino un recuerdo hermoso de mi madre y yo cocinando un pastel de limón, olía delicioso, salieron lagrimas de mis ojos y sentí una pena enorme porque esos recuerdos no se iban a repetir, miré a Charles y también estaba con unas lágrimas y los ojos rojos por la tristeza.
-¿Que me hiciste?.- Le pregunté a Charles.- Solo hurgué en tu mente y fui a una esquina y encontré ese recuerdo tuyo, muy hermoso por cierto. Dijo mientras se quitaba lss lágrimas de sus mejillas.
-Vuelve a intentar entrar a mi mente, confio en ti. Me volví a concentrar en la mente de Charles cerré mis ojos y pensé en mi madre y la rabia que me daba no estar con ella, entré a la mente de Charles pero luego solo escuché gritar a Charles de dolor, le estaba aplastando la mente sin darme cuenta.
-¡JANE!, ¡SAL DE MI MENTE!. Asustada por sus gritos salí de su mente, lo miré y me fui corriendo a encerrarme en mi cuarto, me sentía mal por herir a Charles quien había hecho tanto por mi.
-¡Jane! No te vallas ¡Solo fue un error!.- oí gritarme Charles mientras yo corría, lo ignoré y seguí corriendo con lagrimas en mis ojos iba subiendo las escaleras cuando choqué con Alex, el me miró preocupado.
-Jane,¿Estás bi...- Solo seguí corriendo y llegué a mi cuarto alterada, tenía miedo de volver a dañar a alguien.

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Hoy era un día nuevo y no quise salir de mi cuarto, cerré con llave esta vez.
Miré por mi ventana y Charles estaba con Hank corriendo pero esta vez Hank estaba sin zapatos ni calcetas, sus pies manos eran veloces y agiles, yo sabía, sonreí y volví a cerrar mis cortinas.

Horas después...

Oí un ruido fuerte como si algo se hubiera caído pero mut fuerte, salí de mi cuarto rápido para ver que ocurría fui hacia una ventana y miré como Sean estaba en el suelo pero luego gritó

-¡Estoy bien!. Me calmé un poco, Erik y Charles me miraron, Erik estaba preocuoado y Charles algo apenado por lo que sucedió :

RELATA CHARLES:

La verdad estaba preocupado por Jane ella me miró y se devolvió corriendo a su cuarto, quise hablar con ella pero no salió nada de mi boca, Erik me miró algo confundido.

-¿Que le hiciste?.- Preguntó Erik serio, no dije nada y bajé la mirada. -Charles ¿Que le hiciste?.- Repitio esta vez algo más fuerte, lo miré y le dije:
-Ayer entrenamos y hubo un accidente, ella tiene miedo de causar daño.- Dije bajando la mirada. -Ve a hablar con ella, Charles.- Me dijo Alex quien estaba escuchando la conversación, lo miré y me fui a la habitación de Jane.

Toc-toc. -Jane, abre la puerta porfavor.- Dije algl serio y firme.- Jane, no estoy enojado, porravor abreme. Jane abrió la puerta con la telequinesis y en seguida pasé, ella estaba acostada en su cama mirando hacia su ventana, estaba llorando, pobrecita pensé.

-Charles, siento que voy a terminar haciendo cosas malas y no quiero dañar a nadie. Dijo susurrando, me dio pena, era sierto que me había hecho daño, pero confiaba en ella y sabia que no lo hizo aproposito que ella podía mejorar. -Jane, te dije que te quedaras en un punto medio entre la rabia y la serenidad te inclinaste demasiado a la rabia, confio en ti y en que lograrás cosas grandes.- le dije lleno de esperanzas.