Jane Evans/ X-men. ✔

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Me fui a mi cuarto a descansar, estaba sonrojada y contenta, debo admitir que jamás olvidé el beso que nos dimos en cuba, pero también estaba algo triste por la "pelea" con Charles, la verdad sentía que me había comportado como una estupids niña y ya no era tiempo de eso, tengo 30 años y no puedo seguir como una niña, ¿Charles estará deapuerto?, digo para pedirle disculpas, ¿era buen momento?, ahh bajaré a pesir disculpas, me levanté de mi cama y bajé a la habitación de Charles, pero él no estaba, supuse que estaría en su despacho, fui pero antes de tocar la puerta, esta estaba entre abierta y ahí estaba Hank y Charles hablando.
-Entonces iremos a ver a Moira.- Decía Hank en tono burlón.
-Si....- Dijo Charles en suspiro y bajó la mirada.
-Cambiando de tema, deberias ser un poco más amable con Jane, ¿no crees?.- Dijo Hank.
-No la he tratado mal, sabes que la quiero mucho.
-Pero la ignoras y la tratas bruscamente y eso hace sentir mal a cualquiera.- Dijo Hank.
-Creo que tienes razón.- Dijo Charles en suspiro.
-Sobre todo después de lo que le hiciste.- Dijo Hank mirando seriamente a Charles.
-Quedamos que ese tema quedaría en el olvido, además sabes que lo hice por la escuela.- Dijo Charles con el ceño fruncido mirando fijamente a Hank.
-Es que aún no puedo creer que le hiciste ese daño tan grande... tu sabías donde ella estaba cuando experimentaron con ella ¡Y NO FUISTE CAPÁZ DE IR A BUSCARLA!.- dijo Hank golpeando la mesa y parandose.
-Es mejor que te rerires Hank, mañana temprano tenemos un viaje.- Dijo Charles bastante serio pero calmado
-No iré, debo quedarme con Scot.- Dijo Hank y salió de la habitación sin verme, y yo que estaba escuchando todo no lo podía creer, me sentí mareada y choqué con un mueble que estaba al lado de la puerta, Charles se percató y miró hacia la puerta y ahí estaba yo, pálida como un papel.
-J-Jane, esto es muy facil de explicar.- Dijo Charles nervioso.
-T-tu sabías.- Dije nerviosa y aún en shock pero el shock se fue rápido al oír la siguiente frase de Charles.

-Te juro que lo hice por los alumnos.- Dijo Charles con los ojos llenos de lágrimas.
-¿Por tus alumnos? O por tu dignidad y poder.- Dije realmente seria.
-Jane, no lo entenderías.
- ¿¡NO LO ENTENDERÍA?!, CHARLES TENGO 30 AÑOS, YA NO SOY UNA NIÑA, REALMENTE ERIK TENÍA RAZÓN SOBRE TI, ERES UN EGOÍSTA.- Dije gritando, jamás había estado tan alterada y las luces de la habitación comenzarón a parpadear.
-Jane, tienes que calmarte, sientate y lo hablaremos con calma.- Dijo Charles acercandose a mi con la silla.
-No tenemos nada que hablar.- Dije mientras estiré mi mano y lanzé a Charles a la pared, salí de la habitación, yo aún no estaba en pijama a si que salí de la casa y me fui a la ciudad en el auto de Charles, cuando llegué a la ciudad, me dirigí a un supermercado, sabía que mi cabello iba a parecer extraño a si que me puse la capucha de la sudadera blanca de Alex y me bajé del auto y entré al supermercado, fui bagando por los pasillos y recordé que no había traído dinero, mi#*da Jane, voy a tener que ocupar mis poderes para esto, tomé muchas papas de tarro y las metí en la sudadera, la sudadera era bastante grande a si que cabían, cuando me dirigí a la salida, descompuse los censores y salí, pero el auto de Charles ya no estaba, se lo habían robado, que mal día, caminé y caminé hasta que encontré un pequeño callejón y decidí metermé ahí, me senté y comencé a llorar, mucho, pero rápidamemte paré y comencé a comer papitas  me saqué la capucha y me recosté comiendo papas y dormí.

cuando desperté era temprano, me puse la capucha y me levanté, caminé hasta un bar y pedí un trago y otro y otro, no me emborraché pero luegp salí corriendo y el tipo del bar tras de mi por no pagar.
-¡Maldita ladrona!.
Solo corrí, bastantes cuadras hasta perderlo, me encontraba en otro callejón mucho más amplio y solitario, no sé ni que hora es, pero sé que es tarde, me senté y miré al cielo pero algo me interrumpió, se abrió un circulo, como un portal, ahí estaba un tipo raro alto y azul, una tipa de pelo blanco, un chico con alas de metal , otra vestida de rosado y....Erik, no me quedé en Shock pero él si.
-J-Jane.- Dijo con los ojos llenos de lágrimas y yo extendí mi mano y lo lanzé a un basurero que estaba a unos metros de mi.
-¿Que quieren?.
-A ti.- Dijo el tipo vestido de azul y raro.
-Mi nombre es Apocalipsis, y tú eres Jane mi pequeña niña, te busco para formar de algo muy importante en la tierra, no busco controlarte como otros, busco... liberarte.- Mis ojos se llenaron de esperanzas pero Erik rompió mi tranquilidad cuando salió del basurero y se acercó a mi.
-Iré con ustedes.- Dije y me di vuelta para mirar a Erik quien estaba justo al frente mio.- Pero si veo que se mueve un misero tornillo en contra mía, no durare en matarte Erik.- Dije amenazante.
-¿De verdad crees que soy capáz de hacerte daño?.- Dijo Erik.
-Ya lo hiciste.