Save me. (Baekyeol / Chanbaek)

Capítulo doce.

Los días restantes de la semana pasaron demasiado lentos al parecer de todos. Baek no quiere ver esa horrible cama de sábanas blancas nunca más en su vida; Chanyeol no quiere ver más esos pasillos blancos eternos del hospital con un montón de gente llorando en ellos, soltando suspiros de dolor, y aunque no reconociera, él estaba así o aún peor que ellos; la señora Byun no quiere fumar de nuevo, pero la cajetilla de cigarros pareció esfumarse en un par de parpadeos de sus manos, vacía en un día.

Los tacones de los zapatos hacían eco en el pasillo cuando caminaba de un extremo al otro, esperando al doctor, quien debería dar noticias, noticias realmente importantes. La pintura de uña está descascarada y el pelo algo desordenado producto de los días sin dormir. Su mente iba volando por todas las soluciones o ilusiones posibles de la situación en la que se encuentra hasta que siente el pisar del hombre, voltea casi de inmediato y sonríe algo histérica al ver al doctor frente suyo.

-Señora Byun.

-Doctor… -Arrastra las palabras porque el nudo en la garganta no la deja hablar con claridad.

-Bien, lo resultados de los últimos exámenes, dictan que si bien Baekhyun tiene un alto porcentaje de desnutrición, podrá ser operado –La madre de Baek suelta un suspiro que viene con angustia de la mano- Debemos actuar cuando antes, la operación será mañana por la tarde, bien, espero que todo salga como esperemos ¿Podría comunicárselo usted a él? –Ella asiente- Bien, hasta luego –Dice el hombre con frialdad y gira sus tobillos para profundizarse en el pasillo hasta desaparecer ante la mirada taciturna de la madre de Baekhyun.

Cuando la señora Byun, había controlado sus nervios, el temblar de sus manos y secó sus lágrimas, retoco un poco el maquillaje para camuflar un poco las ojeras de dolor que traía impregnadas debajo de los ojos y entro a la maldita habitación 111, donde se encontraba Baekhyun.

Una vez adentro, vio la cara de felicidad de su hijo, mientras Chanyeol le leía un libro, ambos reían y ella pudo suspirar en paz, sabía que pasará lo que pasará, los últimos días de su hijo habían sido los mejores.

-Mamá –Dice Baek cuando la vio atravesar el umbral de la puerta y le estira los brazos, mientras Chanyeol se voltea a sonreírle y le hace una reverencia. La señora Byun abraza a su hijo y lo besuquea por toca la cara hasta que suelta pequeñas carcajadas. Una vez que termino el cariñoso saludo, se sentó en un costado de la cama y suspiro lento ante de quedar frente a frente mirando a los jóvenes- ¿Pasa algo? –Dice Baek mientras la observa.

-Baek, Chany…-Dice dulcemente- Hable con el doctor hace un rato –Ellos atentos asienten ante sus palabras- Debemos actuar rápido, porque no debemos fiarnos de tu condición que llevas hasta el momento.

-¿Qué quiere decir eso? –Pregunta con voz ronca Chanyeol, Baek se detiene a mirarlo y luego posa los ojos en su madre.

-La operación será mañana –Dice y traga en seco, porque su garganta se anuda, Baek y Chanyeol se miran con un toque de preocupación y alivio- Todo saldrá bien chicos… Todo saldrá bien –Dice y los tres se abrazan, lloran y luego dan palabras de aliento.

-Ustedes dos… No estén tan preocupados por mi –Dice Baek y saca una mirada sorprendida de su madre y de Chanyeol- Yo estaré bien, créanme. Mamá, Yeol… ¡Ya! ¿De verdad piensan que los dejaré solos? –Chasquea la lengua en forma de indignación- Todo estará bien, lo prometo –Dice y los otros dos botan un suspiro.

El resto de la mañana y de la tarde Chanyeol se ausento por el colegio, la rutina le estaba pasando un tanto la cuenta, pero prometió llegar en la tarde. Baek y su madre pasan el tiempo a solas, acostados, hablando de cualquier cosa que pudiera salir de sus bocas. Ambos se sienten plenos, ya que hace mucho no tenían una conversación, una verdadera conversación, más allá de un ‘Hola’ o un ‘Buenas noches’, como lo era usualmente en su casa.