Donate de esperma. (Wenrene) [G!P]

Capítulo 1

Desde que tengo memoria, siempre he querido tener hijos. Yo quería tener ese tipo de amor y cercanía con mis hijos como la que he tenido con mis padres. Pensé que no habría sido nada más que eso.

Yo estaba tan emocionada cuando llegué a ser de una edad adulta, porque imaginé que el embarazo sería probable que sucediera, pero el problema de todo esto era que …. Me gustan las chicas.

Yo necesito de un hombre para poder quedar embarazada y sabía que no podía tener relaciones sexuales con uno, incluso si quería tener un hijo.
¿Cuáles eran las alternativas?

Yo no tenía conocimiento de ninguna otra que no fuera tener relaciones sexuales con un hombre y como yo sabía que eso no era posible, me entristecí ya que mi sueño de tener un hijo no se haría realidad.

Por suerte, después de mencionar mi problema a mi hermana Sooyoung, ella mencionó algo acerca de los bancos de esperma. Me sorprendí porque no me había dado cuenta que esos lugares existían, pero estaba contenta porque tenía una manera de cumplir mi deseo de tener un bebé. Así que le pregunté inmediatamente por la dirección.

Al día siguiente, fui a la dirección del banco de esperma para iniciar el proceso de mi embarazo. Yo estaba un poco asustada de lo que iba a pasar cuando hice mi camino en el interior del edificio, más yo estaba segura de que todo saldría bien.

–Buenos días. ¿En qué puedo ayudarte? – La recepcionista detrás del mostrador preguntó. Por alguna razón, me puse nerviosa.

–H-hola. Estoy aquí para tener una inseminación – Traté de sonreír a pesar de mis nervios.

La recepcionista se levantó de su silla, fue a la pila de tablillas con papeles en ellos.

–¿Sabes si estás ovulando?. –Preguntó después de entregarme el portapapeles con un poco de información en el.

Definitivamente no sabía si estaba ovulando. Estúpido de mí parte.

–N-no, no lo sé. Creo que estaba tan emocionada en tener un bebé que me olvidé de ese detalle. Ella sonrió.

–Realmente quieres tener un bebé, ¿eh? – Asentí con la cabeza. – Está bien, no eres la primera que ha venido aquí sin saber si estaba ovulando debido a la excitación de tener un bebé. – Se agachó buscando algo. Después de encontrarlo, se puso de pie, con una caja en la mano. – Esto te ayudará a determinar si estás ovulando. Sólo tienes que seguir las instrucciones y cuando hayas terminado, regresa con el papeleo y podamos empezar.

–Gracias – Respondí.

Me dirigí hacia las sillas que estaban en el vestíbulo, tomando asiento y procedí a llenar el papeleo para la inseminación. El papeleo era bastante simple, por lo que lo hice en unos pocos minutos. Todo lo que tenía que hacer era tomar la prueba de ovulación. Caminando hacia la recepción, coloqué el portapapeles en frente de ella.

–¿Haz terminado con todo? – Pregunto la recepcionista.

–Si, solo me hace falta tomar el test de ovulación, pero no sé dónde está el baño. – Le dije tímidamente mientras me rascaba la nuca.

–Está bien, tienes que ir por ese pasillo. – Señaló ella a mi izquierda y así siguieron mis ojos. – Y es la primera puerta a tu izquierda – Dijo con amabilidad.

–Gracias.

–Cuando hayas terminado vuelve y empezaremos el proceso.

–Está bien. Ya vuelvo. – Y dicho esto, me dirigí por el pasillo y abrí la puerta de la izquierda.

El baño era una habitación espaciosa de color rosa. Había algunas revistas en la esquina, que me decía que estas son con las cuales probablemente los donantes de esperma llegaban a hacer su trabajo. Yo no podía dejar de reír por ese hecho. Era una especie de estupidez, sin embargo, mis pensamientos aterrizaron sobre donde se ponía el esperma de los chicos, tal vez en algún lugar que no sea siempre el mismo.