Donate de esperma. (Wenrene) [G!P]

Capítulo 15

IRENE
Desde que la última cena tuvo lugar en la casa de mis padres, los padres de Wendy decidieron que la cena de Navidad sería en su casa. Todo el mundo estaba ya allí cuando Youi, Wendy y yo llegamos. Todos se saludaron con abrazos y besos, pero mi atención se centró en el olor de los alimentos suculentos que mi mamá y Tiffany habían preparado. Sin poder evitarlo, mis pies empezaron a ir en dirección a la cocina, pero en ese instante, mi mamá saltó delante de mí, deteniéndome antes de que llegara a mi destino.

– No, No... No... – Dijo moviendo en mi cara su dedo índice de un lado a otro. – Alto allí pequeña rata. Tú tienes que comer cuando todo el mundo coma, así que no creas que recibirás algún trato especial esta noche.

Puse mala cara. – Pero mamá… Por favor... – Me quejé.

– Nada de eso, Baechu. Ya deberías saberlo.

Puse mala cara no solo por el apodo, sino porque sabía que mi madre no se movería.

– Ya cálmate, pequeña comelona… Como consuelo te diré que hice tú pastel de chocolate favorito. – Ella me guiñó un ojo.

Por lo menos pude sonreír ante ese hecho, a pesar de que no pude cumplir con éxito mi robo. Yo sólo tenía que esperar un poco más antes de que pudiera tener algo de esa maravillosa comida en mi vientre.

Mi mamá me abrazó. – Prometo no hacerte esperar mucho por la comida, pequeña consentida. – Ella río un poco.

– Gracias mamá. – La besé en la mejilla.

Volvimos al grupo y, por supuesto, mi mamá dijo que era hora de tomar fotos. La primera foto era aquella en la que estábamos todos los presentes posando formalmente, luego éramos los mismos participantes pero con un toque más libre, permitiéndonos posar como quisiéramos. Mamá y Tiffany estaban una al lado de la otra en un abrazo. Sooyoung y mi papá estaban juntos dándose un abrazo pues se habían convertido en grandes amigos a través de los meses. Youi estaba con Wendy, ya que mis hermanos y yo decidimos darnos un abrazo de oso. Estaba segura de que mi sonrisa en esta foto fue tensa.

Después de la sesión fotográfica, la madre de Wendy y la mía se pusieron de acuerdo en que debíamos abrir los regalos antes de comer y felizmente la mayoría acepto sin peros, yo era la única con un puchero, pero accedí con rapidez.

Para los padres y los míos, los demás habíamos acordado darles un viaje, el cual sería como si ellos tuvieran una segunda luna de miel. Los mismo se mostraron agradecidos y nos besaron a todos nosotros. A continuación, fue el turno para Joy y Jaehyun, a los dos les fue dadas unas cajas verdes, dentro de las mismas habían unas entradas VIP para el concierto de IU, junto con un lighstick para cada uno; los dos parecían niños al ver sus presenten, pero sabía que era porque irían a ver de cerca a su cantante favorita. La siguiente personita en la lista fue Youi, a pesar de que ya le habían dado sus regalos en nuestra casa, parecía que tenían la sorpresa de darle más. Todos le regalaron peluches nuevos que añadirá a su colección. Yo sólo podía imaginar cuan llena estaría su habitación antes de que tuviera diez años. Por su parte, las abuelas juntas le regalaron unos pequeños delantales con lindos dibujos en él y un set para hacer muffins, para niños. Ellas sabían cuánto Youi amaba cocinar y me hicieron sonreír al ver sus presentes…

Por último, era el turno de Wendy y mío. Mamá y papá nos dieron un fin de semana en un hotel de lujo durante la semana del Día de San Valentín. Definitivamente estaba deseando que ese día llegará para pasarla con Wendy en una celebración tan especial. Fácilmente me encontré sonriendo debido a mis pensamientos, pero tuve que salir de ellos tan pronto como el siguiente lote de regalos se acercó. Joy y Jaehyun terminaron dándonos un cupón para una tienda de ropa interior, haciéndonos sonrojar ante la imagen mental de nosotras dos en tales atuendos. Youi nos dio pulseras a juego que Sooyoung y Tiffany le ayudaron a hacer. El regalo fue pequeño, pero especial puesto que venía de parte de nuestro pequeño retoño y a la vez, aquella gran conexión que nos unía. Los ojos de Wendy brillaban al ver la pulsera en sus manos, después de todo está era el primer regalo de navidad por parte de su hija. Ambas terminaron uniéndose en un tiernos abrazo, conmoviendo a todos los presentes. Por último, pero no menos importante... el regalo de Sooyoung y Tiffany…

Estaría mintiendo si dijera que no tenía miedo de lo que nos dieran, después de todo ellas eran las desviadas sexuales del grupo y desde que Wendy y yo hemos estado juntas, han sido cada vez más imprudentes.

– Esto es de parte de Sooyoung y mía.  – Mencionó Tiffany con una sonrisa mientras dejaba caer una caja en frente de nosotras.

Wendy y yo nos miramos y luego miramos la caja... Luego nuestros ojos se dirigieron hacia Tiffany y Sooyoung. Yo no quería ni tocar la caja. Wendy parecía mas indecisa que yo.

– Oh, vamos, la caja no va a morder. – Sooyoung dijo con una sonrisa.

Miré a Wendy y todavía parecía que no quería ni acercarse a ella. Suspiré. Yo sabía que iba a ser la que tendría que abrir el regalo, así que me incliné hacia adelante y procedí a abrir la caja. Tan pronto como moví un poco el papel del interior, un rubor llegó directo a mis mejillas.

– ¿Qué hizo que terminarás así cariño? – Preguntó mamá con curiosidad.

Yo no quería mostrar lo que había allí, aún así por la insistencia de los demás, con un rubor masivo, saqué los artículos. Todo el mundo estaba entre ruborizados y riendo... excepto  Youi quien estaba confundida por lo que estaba pasando. Lo que estaba en mis manos era un traje de “dominatrix” de cuero junto con un látigo. Debajo de ello había una mordaza, un collar negro y también habían unas esposas negras. Además de todo esto habían unas orejas de gato y algo que parecía una cola, ambas cosas en los mismos tonos negros y grisáceos.

Todos miraron a Sooyoung y Tiffany y lo único que hicieron fue sonreír.

– Bueno, nosotras sólo pensamos en ayudarles a lo largo de lo que suceda dentro de la habitación. – Tiffany contestó levantando los hombros.

– El juego de roles es siempre divertido. – Intervino Sooyoung – Tu madre y yo lo disfrutamos mucho, así que pensamos que ustedes lo disfrutarían también. – Ella sonrió.

Yo estaba tan dispuesta a dejar la habitación, debido a lo avergonzada que me encontraba en este momento. Mi vista fue en dirección había Wendy, y al verla supe que ella no estaba mejor que yo.

– Hmm... creo que deberíamos comer. – Intervino mamá con la esperanza de detener la tensión en la habitación.

Con esas palabras, todos empezamos a movernos. Wendy aprovecho para regañar a sus padres en una esquina de la habitación, los mismos lucían inocentes. Por otro lado, Joy se acercó a mí, mientras sostenía a Youi en sus brazos.

– Vaya, vaya… Creo que tus suegros quieren que tengas mucha diversión. – Ella me levantaba ambas cejas al mismo tiempo, poniendo cara de cerda pervertida.

– Haz silencio. Tu sobrina te está oyendo. – Le hice un puchero ya que se burlaba de mí.

– Yo no he dicho nada malo… GA-TI-TA… – Me susurró en sílabas lo último. Yo ya estaba dispuesta a correr detrás de ella. – Meow~ – Levantó su mano libre cerrando el puño, para simular la acción de un felino.

– ¡Ahora sí verás! – Empecé a correr detrás de ella.

– ¡CORRE TIA JOY! – Gritaba Youi entre risas.

– Ya deténganse y vengan a comer. – Exclamó mamá con seriedad, cosa que hizo que nos detuviéramos al instante.

– Ella empezó.

– Yo no sé de qué habla esa gatita pasiva. – Maté con la mirada a mi hermana, pero no hice un berrinche puesto que me encontré avergonzándome de que Wendy hubiera escuchado ese apodo y ahora se encontrara mirándome mientras seguía con las mejillas enrojecidas.

Después de poco tiempo finalmente empezamos a comer. La comida era deliciosa y exquisita como de costumbre, por lo cual ahora estaba como en el cielo. Todo era tan bueno, después de todo estaba comiendo una comida sabrosa con mi familia y la de mi pareja, mientras ella y yo estábamos tomadas de la mano bajo la mesa. Todo se sentía bien, pero creo que había hablado demasiado pronto.

Me di cuenta de que Sooyoung nos miraba con el rabillo de su ojo. Yo estaba empezando a sentirse incómoda porque sabía que ella estaba tramando algo, pero yo no sabía lo que era. Entonces caí en cuenta de mi error... Yo me había sentado junto a Sooyoung, quien era sin duda mucho peor que Tiffany cuando se trataba de bromas y se burlarse de ti. Y cuando ella hace eso, es inevitable que la vergüenza se apodere de ti. Lo único que podía hacer era prepararme para su ataque. Tras unos minutos, de repente Sooyoung dejó caer su tenedor… Allí supe que el momento había llegado.

– Entonces... – Empezó a decir. – ¿qué pasa con las bufandas?

Wendy y yo estábamos jodidas…

– ¿Qué quieres decir? – Le dije fingiendo que no sabía de lo que estaba hablando.

– No te hagas la tonta conmigo querida Irene. Está claro que ambas traen puestas bufandas alrededor de sus cuellos.

En este punto, todo el mundo estaba interesado en lo que Sooyoung y yo estábamos hablando. Esto no iba a ser bueno.

– Hubiera sido buena idea, sino fuera porque aquí dentro no hace nada de frío. – Ella sonrió. – Creo que ambas están ocultando algo.

Sentí que se me caía la cara en ese momento. No podía creer lo que estaba a punto de pasar en frente de todos. Miré hacia Wendy, ella se veía tan pálida como yo.

– P-Papá, ¿por qué estás preocupada con el tema de bufandas? S-Solo es una simple prenda. – Wendy habló intentando disimular su pánico.

– Tenía curiosidad, pero parece que mi curiosidad a sido saciada.
Yo estaba totalmente confundida. ¿De qué estaba hablando ahora?

– Me parece que mi pequeña Wendy ha estado un poco ocupada después de que tus padres supieran todo, ¿no te parece Irene? – La mujer me miró fijamente con una risilla en sus labios. – Después de todo parece que ella te ha dado múltiples mordeduras en el cuello y estoy bastante segura de que también le devolviste el favor, ¿O me equivoco?

¡Oh, Dios mío! ¡No puedo creer que ella lo dijo en voz alta! Yo podía escuchar claramente la risa ahogada de unas pocas personas en la mesa. Joy estaba atragantando su carcajada, incluso mi madre reía por lo bajo. Esto fue más allá de ser embarazoso... ¡Esto era una locura! A partir de ahora sabía que debía tener cuidado cuando estuviera alrededor de Sooyoung.

Creo que el banquete principal en la cena fue definitivamente el burlarse de Wendy y de mí. Bueno, al menos ella estuvo conmigo todo el tiempo apretando mi mano para tranquilizarme. Era su culpa que estuviéramos en este lío en primer lugar. ¡Así que ella estaría en serios problemas cuando llegáramos a casa!
[………]
[……]
[…]

WENDY
Después de que Irene llevo a Youi a la cama, ella volvió a nuestra habitación cerrando la puerta detrás de si. Yo ya me había cambiado a una camiseta sin mangas y pantalones cortos, mientras que Irene aún tenía la ropa de la fiesta de Navidad.

– ¿Así que ya se durmió Youi? – Le pregunté.

– Sí. – Habló mientras caminaba hacia el armario y se quitó la chaqueta. – Ella se aún seguir despierta, para jugar más con las cosas que le regalamos, pero ya vez que toda esa energía que soltó en la fiesta de hoy, la dejó agotada y terminó rindiéndose.

Ella siguió hablándome de algo que le hizo una jirafa de dos patas, según sus propias palabras, pero yo estaba tan distraída por el cuerpo de Irene que lo único que podía decir era – ah huh… Ya veo. – No podía quitar mis ojos su piel. Era como si Irene estuviera burlándose de mí pues parecía que todo lo hizo más lento a medida que se quitaba su camisa. Un suspiro se escapó de mis labios, cuando su pecho quedó descubierto en el momento en que llevó su camisa sobre su cabeza. A pesar de que vi su cuerpo por primera vez ayer, todavía se sentía como si fuera la primera vez de nuevo. Yo ni siquiera sabía lo que había pasado con la camisa pues ahora yo estaba centrada en su parte trasera. Si pensaba que ver los senos de Irene era una tortura, entonces la tanga que llevaba era una agonía. Ya hasta podía sentir a mi cuerpo reaccionando a causa de Irene y empecé a preguntarme si estaba tratando de burlarse de mí o no.

Intenté mirar a otro lado cuando noté que algo estaba creciendo, pero ya era algo tarde; mis ojos la buscaron nuevamente con deseo. Si ella estaba intentando burlarse, pues lo estaba haciendo muy bien. Finalmente el infierno se desató cuando ella bajó esa última prenda. Yo definitivamente iba a quedar frustrada y adolorida en mis partes nobles esta noche.

Pronto, Irene estaba en su camisa favorita de noche, color rosa. Ella se volvió hacia mí, mientras una mirada curiosa cruzó su cara. Luego me inspeccionó con la mirada, captando de que se trataba, y entonces un puchero en sus labios fue acompañado con una mano en la cadera. – Ni siquiera me mires así. ¡Tú tienes la culpa de que nos molestaran ya que eres la causante de estas mordidas! – Y para probar su punto, mostró los evidentes moretones en su cuello.

– Siento lo que pasó Irene. Sabes muy bien que lo último que hubiera deseado era que mi padre se enterara. – Yo me acerque para abrazarla y darle pequeños besos a ver si la hacía cambiar de semblante.

Irene al principio pareció no corresponder, pero luego me siguió la corriente, y pronto nos vimos en una batalla por ver quién tenía la ventaja sobre la otra. Pensé que yo la tenía en un momento dado, pero eso era una ilusión. Debería haber sabido que utilizaría su fuerza sobre mí, después de todo, ella sabe técnicas de como neutralizar a alguien que puede doblar su peso u estatura. Gracias a ella ahora me encontraba con mis manos inmovilizadas con las suyas por encima de mi cabeza, mientras que ella se mantenía a horcajadas sobre mí.

Las dos estábamos tratando de recuperar el aliento después de aquel pequeño forcejeo, pero pronto me di cuenta de que con cada subida y bajada de mi estómago, yo podía sentir los pequeños y suaves rizos de la zona más íntima de Irene. Había olvidado por completo que ella no sustituyó la ropa interior que se había quitado. No quería mirar había abajo, pero al final terminé haciéndolo y de pasó mis ojos afirmaron lo que había estado sintiendo. Tragué saliva pasada mente. Podía sentir la sangre corriendo aún más a mi cara y ni hablar de mi 'amigo', solo sabía que esto estaba volviéndose devastador para mí.

Aparté mis ojos del área justo cuando sentí la mirada de Irene inspeccionándome; ella rápidamente mostró esa sonrisa que me hacía saber que estaba en problemas. Irene se inclinó juntando más nuestros cuerpos, mientras se acercaba a mi oreja, haciendo que su aliento entrara en contacto con esta. No sabía que me susurraría, pero no sería nada bueno.

– ¿Te gusta lo que ves? – Dijo de forma sexy y sin pudor. Yo solo atiné a cerrar mis piernas para evitar sentir algún tipo de fricción. Una parte de mí estaba muy preocupada por la forma en que ya me estaba empezando a frustrar un poco sexualmente y estas bromas que Irene hacía, no ayudaban mucho.

– I-Irene... p-para – Traté decirlo de manera uniforme, pero salió como un gemido y un lío de tartamudez.
Pero Irene no se detuvo, en cambio se acercó a mi cuello y empezó a chuparlo. Yo jadeaba moviéndome de izquierda y derecha, con las piernas cerradas aún más fuerte. Aún así, pronto sentí la necesidad de tocarla o sentir su toque, pero las dos teníamos las manos atadas.

– I-Ir... ¡I-Iren-ne!–  Esto tenía que haber sido el sentimiento más frustrante que había experimentado en toda mi vida. Me sentía tan impotente con Irene. Supongo que ahora sé lo que papá se refería cuando decía que su chica sexy la tenía loca, justo ahora era la sensualidad de Irene la que me estaba enloqueciendo.

– ¿Por qué quieres que me detenga? – Ella habló manteniendo ese sexy tono de voz.

– P-porque... porq-

– ¿Por esto? – Preguntó mientras liberaba uno de mis brazos antes de que su mano se fuera adentro de mi pantalón y agarrara a mi "amigo".

Mi cabeza se echó hacia atrás en la almohada cuando un largo gemido salió de mis labios. Mi brazo libre desesperadamente se agarró a mi novia, mientras me acariciaba con mayor rapidez. Mi cuerpo había empezado a sudar, mi corazón se sentía como si estuviera latiendo fuera de mi pecho. ¡Todo en mí estaba en llamas!... Me estaba volviendo loca de placer, en el instante en que mi estómago se empezó a contraer, dándome la señal de que pronto me vendría... Justo allí Irene se detuvo.