Game Traveller: Una historia de videojuegos.

1. ¿Donde estoy?

Basta...Ya basta...

Se repetía a cada instante tras despertar de sus pesadillas, que le recordaba el que no podía superar su enorme soledad, tras una experiencia familiar horrible que sufrió.

3 años atrás...

El muchacho en casa, escuchaba como sus padres discutían, escuchando fuertes gritos, apenas el muchacho escuchó que su padre golpeó a su madre, el muchacho bajó de inmediato para defender a su madre.

¡¡PAPÁ YA BASTA!!-gritó el muchacho-¡¡YA DÉJANOS EN PAZ!!

El padre molesto golpeó al muchacho, sacándole sangre de su boca, y acto seguido, debido a que estaba borracho, encendió la cocina, dejando salir un olor a gas insoportable, al rato sacó sus fósforos, su propósito era obvio, quería matarlos a todos, incluyéndose a él mismo.

Con sus últimas fuerzas, la madre del muchacho, ayudó a sacar a su hijo de la casa, sus últimas palabras fueron"Eres el mejor de nosotros, Chris, nunca pares, te amo, hijo mío".

Segundos después...la casa explotó...llevándose todo consigo, sus pertenencias, y sobre todo, su familia...

¡¡¡¡MAMÁ!!!!

Ahora en la actualidad...

Eran las 2 de la mañana, día sábado, tras no poder dormir, se dirigió al baño, con un dolor insoportable de cabeza, y se miró al espejo, viéndose a si mismo con ojeras, sudando por su pesadilla, y respirando agitadamente.

Vaya mierda de vida...-dijo el muchacho, frustrado y afligido por recordar su pesadilla- Si tan solo hubiera reaccionado mucho antes...

Cabizbajo, apretó los puños y se dirigió a la sala de estar de su departamento, este departamento lo compraron su madre para poder vivir allí en caso de que perdieran la casa, el cual el muchacho se dirigió allí apenas ocurrió su trágica experiencia.

Al llegar a la sala de estar, comenzó a hacer lo de costumbre, buscó su Nintendo 2DS para poder jugar un par de videojuegos, hasta no dar más y dormirse en el sofá de su departamento, al cabo de unas 7 horas despertó, vió que el reloj marcó las 9, y el muchacho se dirigió al baño para poder asearse y afeitarse un poco.

El muchacho tenía de nombre Chris Lowell, tenía una edad de 18 años, además de una estatura de 1,70 cm, junto con un peso de 62 kilos, este muchacho ama jugar videojuegos, desde los 4 años que juega, había terminado su último año de preparatoria, tras aprovechar la herencia de su madre, que dejó respaldada en caso de que ocurriera algo, al rato, Chris se vistió.

Chris no tenía amigos, era bastante cerrado tras su pasado, no quería que nadie sufriera lo que él sufrió, por lo que no hablaba con nadie, asi es, NADIE.

Tras terminar de asearse, se dirigió a su sofá a escuchar música, al pasar unos minutos, triste, miró el techo.

Desearía tener amigos...una vida mejor...menos solitaria....-dijo Chris, al borde de llorar, cerró sus ojos, dejando caer lágrimas, y al rato, se durmió.

Lo que él no sabía, es que ese deseo...cambiaría su vida de forma que nadie creería...

Mientras dormía, un portal se abrió, absorbiendolo lentamente al muchacho, sin que despertara, ese portal, dejó al joven, bajo un árbol, junto a una criatura, de color rosa, durmiendo.

Apenas esta criatura sintió a Chris, despertó, observándolo, y procedió a tocarle la mejilla.

¿Poyo?-dijo la criatura, tocándole más la mejilla a Chris-Poyo...