De todo un poco

Izuna / Itama

Izuna / Itama: el lugar donde sientes el dolor del otro

Resumen:

Izuna / Itama: el lugar donde ambos pueden sentir el dolor del otro

Texto del capitulo

"¿Estás seguro de esto, Hachiro?" Izuna revisó sus alrededores tal vez por quinta vez en cinco minutos. "¿No deberíamos encontrar un lugar que no sea tan abierto? ¿Y si grita y llama la atención de una patrulla que pasa o algo así?

"Haces demasiadas preguntas". Gruñendo de alivio, su compañero de patrulla se dejó caer sobre una rodilla y dejó caer el cuerpo que había estado llevando a un lado. Hachiro era su primo tercero dos veces eliminado o algo así, un pariente lejano de un pariente, y para empezar nunca se habían llevado bien. Izuna deseó haber sido casi cualquier otra persona con él mientras él patrullaba hoy.

Encontrarse con un Senju solitario que podrían dominar y tomar prisioneros habría sido un golpe de suerte en cualquier otro día. Izuna los habría devuelto a su padre, si los hubiera dejado vivir. Hachiro, por otro lado, era del tipo cruel. Tan pronto como dejó al Senju inconsciente, dejó muy claro que tenía la intención de jugar un poco. La tortura no era exactamente el escándalo de Izuna en primer lugar, pero siempre estaba particularmente asqueado por lo mucho que Hachiro lo disfrutaba cada vez que alguien lo dejaba escapar.

Aún así, Hachiro era mayor y un poco más fuerte que Izuna se había resignado a esperar esto. Un Senju vivo era una captura rara. ¿Un miembro de la familia principal? Ni siquiera Hachiro sería tan estúpido como para matar al niño, no cuando sabía que Izuna se lo contaría a su padre más tarde.

"Aquí está bien". Hachiro juntó las manos una vez y sonrió. "Es hora de divertirse un poco. ¿Estás ayudando?

"UH no. Creo que solo, um, miraré desde allí.

La sonrisa que le envió su primo lejano fue desagradable e Izuna apartó la mirada rápidamente y se dejó caer en la base de un árbol cercano. Normalmente no le agradaban mucho las simpatías de sus enemigos, pero había algo en el chico que habían atrapado que no podía sacar de su cabeza. Tal vez fue el hecho de que tenían una edad tan cercana. O tal vez fue la cara linda, el cabello de dos tonos cayendo frente a los grandes ojos y las mejillas lo que aún mantenía rastros persistentes de grasa de bebé a pesar de que estaba en su adolescencia.

Una parte de Izuna, la parte que recordaba ser un hermano mayor, quería preguntar qué estaba haciendo este niño solo en el bosque. A veces aparecía en el campo de batalla y no era medio malo, pero por lo general Izuna lo marcaba deteniéndose con los otros médicos para remendar a los heridos y enviarlos de regreso a pelear. El Uchiha se propuso no enviar a nadie con entrenamiento médico solo. Tal vez fue diferente en el clan Senju, pero para los médicos de Uchiha se consideraba una mercancía preciosa.

Incluso si no estaba mirando y, desde luego, no le importaba personalmente este niño, todavía hizo una mueca ante el sonido de una fuerte bofetada, seguido rápidamente por un jadeo.

"Wakey wakey", se rió la voz de Hachiro. "Hola, pequeño Senju. ¿Estás listo para divertirte un poco?

"Oh, joder ". Izuna parpadeó sorprendido y giró la cabeza para mirar. El niño era casi tan viejo como él, sin duda lo suficientemente mayor como para maldecir, pero por cualquier razón, parecía del tipo inocente. Sin embargo, pensándolo bien, fue una suposición estúpida. Ningún shinobi fue nunca inocente.

"Quizás más tarde," dijo Hachiro. El chico amordazó.

"Asqueroso, de ninguna manera, no, gracias. Realmente no eres mi tipo. "Los grandes ojos marrones parpadearon hacia donde Izuna estaba desplomada y luego se alejaron nuevamente.