9-ᴍᴇɴᴛɪʀᴀ ʙʟᴀɴᴄᴀ

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Los ojos de Marinette estaban de fijos en el despampanante rubio. Se veía tan guapo y simpático como siempre, su sonrisa impecable y su conocido gesto de cerrar los ojos cuando algo le parecía divertido, ¡oh todo era perfecto en el!. Si tan solo pudiera hablarle sin miedo. Pero en cambió estaba a mas de 10 metros mirándolo de lejos como toda una acosadora...

Pocos días habían pasado desde el baile y aunque Adrien y Marinette habían ido juntos y se habían coronado como los reyes, nada en su relación había cambiado.
Ella seguia siendo solo una amiga valiosa para el.

-Si lo sigues mirando de esa manera su belleza se desgastara ¿no lo crees? -la suave voz de su amiga la hizo sobre saltarse. Con algo de pena volteó lentamente, estaba roja hasta las orejas, llegando al punto de no poder contestar.
-En lugar de mirar de lejos tan solo ve y dile hola como las personas normales. Pensé que ya habías superado esto. Sabes que Adrien jamas te rechazaría, vamos te invito al baile, ten mas confianza en ti.

-Eso lo se, el jamás me rechazaría por que para el solo soy una buena amiga, una amiga como lo son todos los que estudiamos junto a el.

-¿pero y el baile?.

-Solo me invitó al baile por que Kagami no pudo asistir. El mismo me lo dijo cuando me llevó a casa y no paró de hablar de lo linda que ella es.

-Marinette -con esfuerzo Alya detuvo su andar. -no debes rendirte tan pronto. No pierdas las esperanzas.

-Tras cada intento fallido me convenzo cada vez mas de que el yo sólo podemos ser amigos y esta bien, me gusta la idea de ser una buena ayuda y estar cerca, al menos como una buena amiga -Sin decir mucho la chica corrió hasta un lugar apartado.
No quería que nadie la mirara tan triste y aunque deseaba que fuera diferente, sentía bastantes celos al pensar que Adrien estaba feliz de amar a Kagami a pesar del rechazo de ella. «Debo ser muy feliz por ti ¿no?» suspiró de nuevo esta vez tratando de sonreír.

-Es tarde ¿A caso no piensas comer? -y como caído del cielo apareció Luka, con su sencilla sonrisa, su angelical mirada y su inseparable guitarra en mano.

Al parecer tenía algunos minutos mirándola.

-¿Desde cuando estas ahí? -se separó poniendo una de sus graciosas caras.

-Lo suficiente -Sonrió -¿Entonces? ¿Vamos a comer algo?

-¡es verdad, si vamos por algo de Pizza!
-Sugirió la peli-negra al muchacho, quien permanecía cerca mirándola en silencio...

-me parece una gran idea -concluyó manteniendo la sonrisa en los labios.
Juntos caminaron por el amplió pasillo de los casilleros, Marinette no podía esconder el hecho de lo bien que se sentía junto a Luka. Pero había algo que simplemente no la dejaba en paz y eso era la extraña relación que tenía el. -¿Que ocurre?
-preguntó al notarla tan callada mientras lo miraba.

-No, era nada -la chica de inocente mirada solo bajó un poco la cabeza, como queriendo esconder el hecho de estar algo sonrojada.

-No tengas miedo de preguntar lo que tu quieras -La muchacha no se atrevió a decir palabra alguna, solo sonrió y prefirió seguir al chico hasta donde se encontraban los demás. Quizás el almuerzo le haría olvidar, todas sus preocupaciones...

Asi que para disimular mientras llegaban miró su bolsa y notó que dentro tenía una lonchera de almuerzo y una nota.

Nota

Matinette no vallas a olvidar
Que prometiste
Cuidar hoy de Manon.
Pasa por ella
Después de clase...
Y lleguen temprano
Para que cenemos juntos.

LUKLOE- EL ACUERDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora