Daddy (+18)

Capítulo 20.

Actualicé dos capítulos ayer por si Wattpad nada más les aviso de uno, pueden revisar 😉.

Ally.

Me despierto al sentirme perturbada en mis sueños, cuando abro mis ojos lo primero que apunta mi mirada es mi mano lastimada, esta atada por una cuerda.

- ¿Qué es esto? -me siento un poco aturdida y busco por mi habitación a Arturo.

Siento como se me hiela la piel al ver a un hombre en el cuarto, no es Daddy, ¿dónde está él?

- ¿Qué estas haciendo aquí, Héctor? -pregunto nerviosa, me siento en mi cama para empezar a desatar mi mano, me duele, esta muy apretado, pero quiero hacerlo rápido e irme.

- Te vez hermosa con ese vestido -dice ignorando mi pregunta, miro un segundo para abajo y captó que no me puse la pijama hoy-. Pero te verías más hermosa sin él.

Agarra mi mano buena con fuerza y me hace voltearlo a ver, agarra mis cachetes con su mano libre y me besa.

- ¡Siel...ta! Arg -trato de gritarle que me suelte pero mantiene su boca pegada a la mía y mierde mi labio inferior con fuerza al notar mi negación.

Cuando se separa un segundo de mi noto como mira cada parte de mi cuerpo con morbosidad, le vuelo una patada en la cara que lo hace tambalear y caerse, asustada vuelvo a luchar por desatar mi mano y al lograrlo corro fuera de mi habitación.

Agarro un adorno de cristal de mi mamá apenas me encuentro fuera y lo tiro al primer piso para que crea que he bajado pero me escondo en un pequeño pasadizo al lado de mi cuarto.

Sostengo mi mano lastimada contra mi pecho tratando de no llorar, ya era suficiente con el corte, pero además no ha tenido cuidado y seguro me ha apretado la palma de la mano cuando a amarraba mi muñeca.

Lo veo salir sosteniendo su cabeza con una mano, se queda en el borde de las escaleras observando el primer piso.

No puedo perder tiempo, corro hacía él y con toda mi fuerza lo empujo por las escaleras,  por el impulso yo también caigo unos cuantos escalones pero me agarro de un barrote con mi mano buena para detener la caída.

Creo que me he doblado el tobillo, me levanto despacio observando el cuerpo de Héctor.

- Ay no, ¿lo maté? -pregunto para mi misma sintiendo mi garganta secarse, bajo los escalones a saltitos pues me duele apoyar uno de mis pies.

Me da miedo acercarme a el tipo así que decido caminar hasta la casa de Jeremy, algo que no puedo hacer cuando la puerta se abre y encuentro a Arturo entrando.

- ¿Qué haces despierta, prin...? -veo como su vista gira al final de las escaleras y vuelve a mí-. ¿Estas lastimada? -pone las bolsas que cargaba en el suelo y corre a revisarme-. Mira como tienes la muñeca, ¿puedes caminar? -pregunta viendo mi pie levantado-. Voy a llamar a la policía -dice cargandome.

- No, no los llames, no quiero ir a la cárcel -digo asustada-. Me duele mucho el pie, daddy estoy asustada.

- No iras a la cárcel, eso jamás -dice bastante seguro pero yo no puedo creerle, acabo de matar a alguien-. Apenas llegue la policía te llevaré al hospital.

- Daddy por favor, por favor no los llames -pido apunto de llorar.

- Confía en mi, Ally, jamás haría algo que te ponga en riesgo, si algo así sería capaz de pasarte yo me culparia de todo.

- Pero no quiero que tu pagues lo que yo... -me acuesta en el sillon grande de la sala y marca al 911 sin dejarme hablar.

Les informa lo que puede de la situación, luego les da la dirección mientras ve hacia las escaleras.

- Espero que ese maldito este muerto -dice Arturo haciendo que mis ojos se abran mucho en sorpresa, no suele decir malas palabras.

Yo pienso igual pero a la vez siento miedo de haber causado la muerte de alguien.

La policía llega en cuestión de minutos haciendo demasiado ruido, la puerta esta abierta asi que entran a inspeccionar el lugar.

Revisan a Héctor mientras le dicen algo a Arturo que parece molestarle, unos paramédicos entran en mi cama después de que los policías digan algo por sus radios y suben a ese horrible tipo en una camilla.

- Nosotros iremos al hospital -dice Arturo levantándome de la cama, me carga como una princesa.

- Lo lamentamos señor pero usted y su hija deben quedarse para responder unas preguntas.

- Primero no es mi hija -Dios, daddy nisiquiera se ve tan viejo, para cuando el estaba cumpliendo 17 yo ya estaba existiendo, arg como sea-. Segundo por si no se ha dado cuenta esta lastimada y no pienso quedarme viendo como ella llora de dolor mientras atienden a ese desgraciado hombre, si tienen preguntas que hacernos lo harán en el hospital Houston, ¿no será algún problema o si? -no espera su respuesta para empezar a caminar, me sienta en el lugar del copiloto para luego cerrar la puerta.

Los policías se miran y se dicen un par de cosas, se encogen de hombros y suben a su carro, daddy enciende el auto, noto por el retrovisor que nos siguen los policías.

- ¿Daddy dónde estabas? -pregunto viendo mi mano lastimada que esta vendada con manchas de sangre.

- Vi que estabas moviendote de un lado a otro en la cama, trate de dormirte dandote un abrazo pero parecias adolorida así que pensé que podía dolerte el corte y decidí ir por unos medicamentos, estudie algo de enfermería, pero fui un idiota al no llevarte al hospital, luego decidí ir a algún AM/PM para comprarte algún dulce, pensé que querrías alguno... lamento haberte dejado Ally.

Dice arrepentido y no puedo evitar sentir mi corazón agitarse, es tan maravilloso, tan atento, hasta sabe cuando quiero comer algo dulce.

- Je -sonrio levemente-. Te amo -digo haciéndolo sonreír-. No debes lamentar nada, no era tu intención que algo así pasará.