Cap.2 -Camino a otras tierras

12.7K 1.2K 246
                                    

Silencio...

Solo silencio...

En la diminuta estancia de los hermanos, Nezuko peinaba con cuidado los cabellos de su hermano, pasaba el peine con detenimiento para que no estén sus mechones enredados y este lo más presentable posible para irse, mientras ahogaba sus diminutos sollozos que quería esconder

Recibir la noticia que su hermano deba partir a la esplendorosa capital, causó tanto dolor y miedo, sin Tanjiro claramente estaban desprotegidos, no se imaginaba lo destrozada que estaría su madre en estos momentos, por más tranquila que fue su reacción a comparación de los tristes lamentos de sus hermanos menores y de ella, la más perjudicada era su progenitora, que estaba arreglándose también para ir al centro de la ciudad junto con su hermano Takeo, el tercero de los hermanos que a las justas tenía 10 años

* Ya está... _murmuro lo más alegre posible Nezuko, mientas que se ponía delante de él_ estás muy bien, hermano _dijo con cariño mientras acariciaba su mejilla, con su tierna sonrisa, queriendo alzar el humor_

Tanjiro solo apretó más sus manos, se sentía frustrado, mordió más sus labios y cerró con fuerza sus ojos, no quería gritar tampoco llorar, deseaba ser fuerte, fuerte como su padre, que defendió hasta lo último a la familia, quería ser así, compararse a él o a su antepasado Yorichii, del cual era un gran ejemplo como le solían contar sus padres

* Hermano... _hablo Nezuko mientras sus rosados ojos perdían su brillo_ por favor, no te culpes, estaremos bien _repitio mientras tomaba en brazos a su hermano, colocando su cabeza en su pecho_

* Nezuko!... _hablo desconsolado, mientras se acomoda mejor y se acurruca en sus cabellos azabaches_

La extrañaría...

Extrañaría a su familia más que nada...

* Tanjiro... _hablo despacio su madre desde el marco de la puerta, tomada de la mano con Takeo, que tenía sus ojos más rojos de los que ya eran, lloraba igual que los demás_

* Ya voy mamá... _menciono, separándose lentamente de Nezuko, siguiéndola hasta la salida_

🎑🎑🎑

* Siguiente! _hablo el gobernante de la ciudad con su distintivo tono de desprecio_ avancen ya, por los dioses... Se demoran un montón! _se quejó, tal vez era porque la sola presencia del general no le gustaba mucho, teniendo a un superior, a una maldita persona más cercana al sultán, dándole órdenes a penas llegó_

Estaba a las puertas de la casa central del gobernante, tanto como él y Rengoku estaban sentados, una mesa con exquisitas frutas a los lados, cuatro chicas dándole aire a ambos, los guardias alrededor, mientras que una larga fila, persona por persona daba detalles del joven que daban, luego siendo llevados por otras doncellas, poniéndolos en posición para que caminen hasta la capital

Pronto seria el turno de Tanjiro, faltaba otras 5 personas que pasaban temerosas, algunas despidiéndose de los jóvenes, otros les daba igual y se retiraban sin más, hasta que llegó el turno del señor Kaya, que solo dejo una pequeña bolsa en la mesa y seguidamente se arrodilló

* Pero que es esto!? _se indignó el gobernante, cuando abrió la misera bolsa y encontrándose pocas monedas de bronce y solo una de plata_ que no escuchaste la orden viejo decrépito!? _resondro mientras tiraba la bolsa a una de las chicas que abanicaba_

* Mi señores, lamento mucho esta miseria, pero yo no he de tener hijo varón...

* Pues que pena sabe? _dijo con sarcasmo mientras el entrecejo se formaba más para el gobernante_ lleven a este vago a la cárcel y decapitar lo de una vez, que acompañe al resto _agitando su mano en señal de que se largará_

¡𝐃𝐎𝐍𝐂𝐄𝐋 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐍𝐔𝐄𝐒𝐓𝐑𝐎 𝐑𝐄𝐘!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora