¡𝐃𝐎𝐍𝐂𝐄𝐋 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐍𝐔𝐄𝐒𝐓𝐑𝐎 𝐑𝐄𝐘!

Cap.13 -Despertar en la nueva etapa

6 meses después

¿Resumen de todo? Resumen de todo...

Bueno luego de aquella gran celebración siendo la boda de Muzan y Tanjiro, hubo 1 semana entera de regocijo, donde todos se embriagaron hasta decir basta, el matrimonio fue de lo mejor, Tanjiro ahora era considerado una entidad llena de amabilidad, se volvió instantáneamente el ídolo del pueblo por todas las acciones que hacía, mejoro considerablemente los recaudos del gobierno para dar un poco más de beneficio a las personas de bajos recursos y de los esclavos, ayudo a varias causas, estableciendo cuidadosamente reglas con ayuda de Zenitsu, que para buen augurio de muchos el sultán aceptaba, poco a poco las disputas y expansiones del imperio bajaron un montón, debido que ahora el sultán paraba más tiempo con aquel pelirrojo que como se afirmó a sí mismo, termino por cumplir todo lo que esté le pidiera, moldeando su relación en una entre ternura y pasional en todos los sentidos, por no decirlo de menos, ya que Rei y Daki en especialmente la segunda, ya no tenían tanta atención como la que el pelirrojo ahora gozaba, su familia tuvo también beneficios, no vivían en el palacio pero si en una buena casa en los suburbios más costosos de la capital

Con respecto a las relaciones, pues también tuvieron avances y como no, Zenitsu ya creo que no es sospecha, se digno a reclamar y hacer destacar que era un pretendiente comprometido al cien por cierto a la segunda de los Kamado, que aunque hubo una contienda en medio de la sala, agarrándose a los pinshes chingadazos, el pelirrojo con el rubio, que claramente el segundo termino perdiendo, la madre dictaminó que debido a la gran hazaña (quedó más chancado :v) aceptó gustosa, haciendo que por poco y Zenitsu se muera de la felicidad

Los generales no pasaba algo nuevo, excepto por algunos guiños, Uzui no cambiaba seguía tranquilo con su espaciosa familia, ahora ya pronto nacería su séptimo hijo de su tercera esposa, Iguro ya se preparaba para poderse confesarse al general Kanroji, que aún sabiendo lo malo que lo tomaría el sultán si es que "el chico" aceptaba no importaba y estaba dispuesto, Giyuu en estos momentos estaba con su abuelo, hermana Tsutako, su infantable amigo Sabito que lo quería como hermano y su esposa Makomo, para presentarles mejor al general Kochō, no pregunten mucho, la única respuesta que le dieron a esto como dijo Uzui: "los opuestos se atraen, Giyuu es agua así todo controlable y Kochō es el aceite, con eso se puede dar una idea, pero enserio debo darle mis condolencias a Giyuu" sus exactas y sabias palabras, Sanemi se limitaba a entrenar queriéndose quitar la presencia de una hermosa dama, Himejima también entrenaba con Muichiro, los otros generales igualmente entrenaban, aunque algunos tenían algo entre manos, Kokushibo siendo a cada rato acosado por su hermano, quien había venido de visita y quería saber si había conseguido pareja, Gyutaro que aún tenía la preocupación de su hermana, Douma que estaba "molesto" por la relación de Kochō pero sin dejar de molestar al pobre de Akaza que ya ni podía estar con su amada esposa

Y por último dejamos a Rengoku, en estos días el mismo sultán le había otorgado ser el general de Tanjiro, que cuando salga del imperio(con su permiso) o en transportarse de ciudad en ciudad lo que estaba haciendo seguido, el lo tendría que cuidar, una recompensa también por ser él quien trajo a esa belleza a su lado, al principio todo iba bien, es más Tanjiro varias veces le había dicho que le encantaba mucho su presencia, creo que aprendía más de historia o cosas complicadas con él que con Zenitsu que ya ni paciencia le quedaba debido a sus preguntas, todo bien esa barrera de amistad y confianza que ambos tenían era muy reconfortante para el rubio de mechas rojas, pero dias y más días, la belleza mayormente interior como exterior o la inusual carisma que tenía el menor termino por cautivarlo, esos días quería mantenerse al margen, porque era su superior, era el esposo del sultán! Del sultán! Osea no entendía porque su corazón y la razón no lo captaba

* Gra-gracias... Mi señor _suspiro ligeramente el menor, jugando con sus dedos debido a la cercanía del sultán_

* Lo que sea por mi pequeño _susurro seductor, besando lo poco que quedaba expuesto el cuello del menor, acariciando con sus labios las marcas que este ocultaba con el collar_ además ya aprendiste a llamarme de buena forma