One Shots • NamJin / YoonMin / Vkook-KookV

🌈sweet🌈

one shot de amor, para que junto a la autora te acuerdes que no tienes novix y que necesitas que alguien como Yoon llegue a tu vida, no mereces menos.💖

Solía no muchas veces prestar atención al pizarrón mientras el profesor de química daba una explicación amplía sobre aquellos temas de balance de ecuaciones con compuestos y demás.

Poner numeritos a compuestos no era entretenido y algo que me emocionara porque no me iba ni bien ni mal.

Pero cuando solía voltear a otros lados para ver algo que me mantuviera despierto, a mi lado, justo a mi lado de la fila, estaba él.

Nos sentabamos enfrente, quizá yo por hacerme notar un poco y él por tener miopía. Él en el inicio de la primera fila y yo en el inicio de la segunda fila.

No podía a veces evitar mirarle un poco, no podía evitar pensar que quizás estaban sus piernas perfectas tan bien marcadas por su pantalón de la escuela que le quedaba algo ajustado, pero lo hacía más notorio que sus piernas estuvieran cruzadas.

A veces pasaba mi mirada por sus manos, no eran de lo más grandes a comparación de las mías, pero eran pequeñitas que daban ganas de besarlas por mucho tiempo y aunque estaban perfectas, a veces el chico a mi lado, admitía que ciertas veces le daba pena mostrar sus manitas.

Algunas veces, veía sus labios, en un color rosa bonito que era bastante perfecto considerando que a veces se veía su piel un poco bronceada pero a veces tan clara como la crema para el café que solía poner en el mío, y tan dulce, como sus mejillas regordetas.

Pero no evitaba sentirme perdido al pensar por unos instantes que quizá Jimin se sienta incómodo, y no lo culpaba, mis miradas eran de un tonto enamorado.

Fue entonces que la clase acabo y sin más, todos se levantaron de sus lugares y en mi mente, pensaba en aquellas bonitas facciones y físico del bonito chico a mi lado que nunca se cansaba de ser perfecto incluso si su intención no era serlo.

Estaba mal mirar las personas, pero no podía también evitar sentirme afligido, porque él era inalcanzable como lo veían todos los chicos de la clase, quería que fuera sólo mío, quería que tomara mi mano, quería sacarle risas y quería tomarme toda la vida que me restaba para amarlo.

Nadie era digno de su belleza, ni yo, lo admito.

Al día siguiente traté de acercarme pidiendo un bolígrafo y aunque a mi me sobraban y hasta de bastantes colores, no me lo negó.

Dios, incluso es tan amable, es perfecto.

Traté de rozar su mano un poco, quise que fuera como en las películas románticas que a veces veía con mi madre imaginando que era Jiminnie y yo.

Cuando toqué un poco, vi un poco de sonrojo en su rostro, me puse felíz de que fuera una buena señal. Ése mismo día, devolví el bolígrafo al final de clase con una sonrisa en un intento de ser coqueta, pero creo que fue un asco.

Al día siguiente llevé comida para compartir un poco a Jimin en la hora del receso, muchas personas rondaban por donde nosotros para saborear un poco del delicioso olor que se esparcia, pero aunque no quise dar nada, Jiminnie les compartió, y me enamoré más.

Mentí un poco diciendo que las había cocinado, pero en realidad sólo había ayudado en casi nada porque las había hecho mi mejor amigo y compañero de apartamento, Hoseok.

Platicamos un poco y Jimin quedó encantado con lo que "cociné", pidió más de la deliciosa comida y consideré el pedirle a Hoseok que me enseñara a cocinar.

Al día siguiente llevé doble almuerzo y de Hoseok casi me gano un golpe por llevar comida de más.

Pero no fui el único que llevó demás, también llevó almuerzo extra para mi y ya me sentía digno de empezar a ser su amigo, por el momento. Y así pasamos varios días, compartiendo el almuerzo, hasta que esos días se hicieron semanas y al pasar, nos hicimos dos meses compartiendo comida.

Uno de esos días a mitad de la comida, empecé a sudar frío, era la oportunidad de decirlo y aunque dudé y esperé a que hablara para escucharle, cuando terminó de hablar, tomé impulso y me atreví.

-¿qué harás el sábado?-

Y entonces me miró con ilusión y pude sentir lo mismo que él, la misma ilusión por saber si era correspondido, una pequeña y dulce vozl salió de él.

-no tengo nada qué hacer o algo en mente-

Fue la señal para invitarlo a salir y aunque sinceramente esperaba un "no" como respuesta, sorprendentemente, asintió con la cabeza, una pequeña sonrisa y un sonrojo bonito.

~~~

El sábado llegó más rápido de lo que había pensado, incluso sentía que se haría lento, pero la suerte estaba de mi lado ésta vez.

Pasé a recogerlo a su casa y cuando salió, escuché que de adentro una voz femenina.

-¡no llegues muy tarde de ir con tu novio, hijo!-

Entonces supuse que era su mamá y reí un poco, pero el sonrojo notorio fue suficiente para que tomara una de sus mejillas sin pensarlo y la acariciara un poco.

Me susurró un "lo siento" por lo sucedido unos momentos atrás.

Conforme íbamos caminando, rozamos nuestras manos y en un movimiento torpe, las tomamos y unos momentos después Jimin las entrelazo.

Toda la tarde estuvimos riendo por algunas cosas tan insignificantes, pero tenían sentido a su lado y aún cuando habíamos ido a comer, seguíamos riendo, haciendo que muchas miradas se centraran en nosotros.

No quise que el día se acabara, pero casi era tiempo para ir a dejarle a su casa, nuestras manos estaban juntas y la calidez de ellas me hacían querer no separarme.

Era hora de irnos cada uno a sus hogares.

-Me divertí mucho hoy, Yoongi- eso me hacía tan felíz.

-Yo también Jiminnie, espero salgamos de nuevo- recibí un asentimiento, sin pensar, dejé salir el apodo dulce que usaba en él y se sonrojo tanto que no pude evitar acercarme a sus mejillas y dar un beso un poco rápido, pero luego me disculpé por el atrevimiento.

-no te disculpes, eso me gustó- y vaya que le creí.

Y entonces me besó, fue dulce y lindo... Perfecto para dejarme seguir soñando, mirando aún en el cielo el atardecer precioso.

Ahora todo tenía un sentido, los poemas tenían sentido, las canciones, los colores, el agitar del corazón, la cercanía, todo estaba ahí por una razón.

Narrador omnisciente

Yoongi se fue felíz a casa y contento de que se sentía con una gran sensación en el estómago, recordar el beso alborotaba su corazón y su estómago.

Aunque nunca se dio cuenta de que Jimin siempre lo estuvo esperando.

Las miradas eran devueltas muchas veces por su parte, sus cuadernos tenían el nombre del chico de piel pálida en las hojas de atras.

Incluso cuando recién era la llegada a clases, Yoongi lo cautivó por completo, era y sigue siendo tan guapo.

Tan inteligente, tan apuesto, tan atractivo, a veces gruñon, pero con encanto.

Sin duda estaban tan enamorados, dudaban que su relación fuera corta, harían lo posible para que durara incluso hasta toda su vida.

[cry]😭✋