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CAPÍTULO 7

𝑅𝐴𝑌 𝐻𝐸𝑁𝐷𝐸𝑅𝑆𝑂𝑁

La muchacha se encontraba sentada en uno de los escalones de la entrada a la secundaria. El timbre de fin de clases había tocado hace unos tres minutos y todavía no había visto a Jonathan en todo el día, pero su enojo se había desvanecido en un santiamén cuando una pregunta peor que la anterior se le sumo a la cabeza, ¿y si le paso algo realmente malo? Jonathan nunca le había hecho algo así, nunca la había dejado tan plantada como el día de hoy, nunca había desaparecido sin llamarla, sin mandarle por otra persona algún mensaje, Will casi siempre era el encargado de eso, sin embargo, al niño tampoco lo había visto desde el día de ayer.

Pero lo peor era que cuanto mas pensaba en Jonathan, en su cabeza se formulaban cada vez mas horribles ideas sobre lo que le hubiere pasado a su amigo. Así que solo dejo que su mente se pintara de blanco y pensó que tal vez a Joyce le había agarrado un brote psicótico y había encerrado a Jonathan en su habitación hasta que llegara el cuatro de Julio.

Ray Henderson se rió de su propio y muy mal chiste.

Chicos y chicas salían por la entrada principal de la escuela y bajaban por los escalones restantes que la flacucha de Ray, no llegaba a ocupar. Recordó que tampoco tenía como volverse a su casa, y que claramente no pensaba volver a usar el autobús de nuevo, no iba a soportar un viaje mas de esos ni aunque la drogasen. Pensó en decirle a Dustin que se iría con él, pero luego recordó que no iba a poder llevarla sobre el manubrio por mas flaca que fuese, su hermanito solo era un niño y no tenía tal fuerza como para eso.

No le quedaba otra que volverse caminando. Solo se quedo unos segundos mas apoyando la cabeza sobre la baranda metálica de la escalera, cerro sus ojos y dejo que el viento moviera su corto cabello por encima de sus hombros.

De repente escucho un bocinazo, supuso que no era para ella porque no conocía a nadie mas que a Jonathan con auto, y sabía que no era él porque no lo había visto en toda la mañana. Pero igualmente, por reflejo, abrió sus ojos y en el asfalto a unos metros de ella donde se encontraba el estacionamiento de la escuela, estaba Steve Harrington dentro de un BMW color bordo.

Y para su segunda muy "linda" segunda sorpresa, noto que él no solo había tocado la bocina de su auto para llamar la atención de ella, sino que también la estaba esperando algo impaciente tamborileando sus dedos contra el volante del auto.

—¿Que haces? —le pregunto Ray frunciendo el ceño tratando de descifrar el código morse de la expresión que Steve tenía en su rostro.

—Te llevo a tu casa.

Ray comenzó a reír.

Que gracioso eres... —la muchacha imitó las propias palabras que Steve había usado esa misma mañana.

—Hablo enserio, ¿como piensas volverte? —Steve enarco una ceja mientras mas estudiantes rodeaban su auto y algunas chicas se sonrojaban y chismorreaban al verlo.

En cuanto Ray noto aquel gesto, le dieron ganas de volver dentro de la escuela.

—Prefiero el autobús, gracias. —Y lo mejor de todo es que lo decía de verdad.

Steve sonrío y se puso sus anteojos de sol.

—Que lastima, me parece que se olvidaron de ti... —Steve señalo como el autobús color amarillo se marchaba y sin ella.

Ray se levanto rápidamente del suelo y con la boca abierta vio como su único transporte se alejaba rápidamente de ella. Volvió a ver a Steve y pensó sus opciones, tenía la posibilidad de llegar a su casa como a las seis de la tarde por ir a pie y que su madre la regañe porque aquella tarde le había pedido que por favor preparara la cena, o podía llegar temprano perder tiempo en su cuarto y luego hacer la cena, el único problema era que su medio de transporte era él.

UN CLICHÉ MÁS ENTRE TÚ Y YO | STEVE HARRINGTON | Stranger Things Donde viven las historias. Descúbrelo ahora