—¿Hendery? —murmuró Xiaojun, sus ojos acostumbrándose a la luz del sol que entraba por su ventana, una mano se estiró a su lado, lugar donde su alfa había estado durmiendo los últimos dos meses, pero no encontró nada.— ¿Hendy? —las sábanas frías, sin el olor del menor lo hicieron asustarse.— No es gracioso... tonto alfa.
Sus pies descalzos tocaron el suelo frío de madera haciendo a su piel erizarse, una de sus manos fue a quedar a su vientre que había empezado a abultarse hace poco. Se agachó para revisar debajo de la cama, frunciendo el ceño al no encontrarlo, respiró profundamente pero solo sintió un olor a cloro espantoso en todos lados y se asustó aún más al no sentir el lazo con su alfa.
Colocó sus pantuflas y a pesar de que buscó una chaqueta del alfa para usar, no había ninguna, parecía que todo lo que pudiera recordarle a su alfa había desaparecido y eso no podía ser menos sospechoso para él; con el corazón acelerado salió al pasillo, decidido caminando a la habitación de Yangyang e Innie, si Hendery no estaba con él, era casi seguro que estaría con Yangyang.
Pero no lo estaba.
Yangyang abrió la puerta frotando sus ojos, su rostro se veía cansado pero sonrío cuando vio a Xiaojun frente a su puerta.— Hola Junnie... ¿necesitabas algo?
—Yo... sí, bueno... mhmmm... —murmuró, tratando de no escucharse como un celoso y posesivo omega.— ¿Hendery está aquí?
El menor frunció el ceño, negando antes de abrir la puerta para que pudiera ver su habitación y un pequeño moisés al lado de su cama, donde Jeongin dormía.— Se despidió de nosotros anoche y dijo que iría a tu habitación... ¿no durmió contigo?
—Sí. —asintió el omega, recordando como Hendery lo había abrazado con fuerza y besado su rostro demasiadas veces, su piel se había sentido bien contra la suya, él estaba tan tibio y dulce.— Pero hoy desperté solo... creí que estaba aquí. —murmuró, más pensativo que antes.— Pero tranquilo, seguro anda haciendo cosas aburridas de alfa, iré a comer algo, nos vemos después. —exclamó rápidamente, tratando de calmar a un pequeño omega.
Camino de vuelta a su habitación, pero no entró, se movió unas puertas más y empezó a tocar con fuerza a la puerta del único alfa que no podría mentirle.
—¡Voy, voy! ¡maldición! —Johnny abrió la puerta cabreado, su rostro detonaba desvelo, su cabello estaba alborotado y tenía un rasguño superficial en su hombro.— Oh.
—¿Dónde está? —soltó Xiaojun, cruzándose de brazos viendo al mayor con un puchero.
—No sé de qué estás hablando. —bufó el alfa, su omega aún dormido en el fondo.— Deja dormir y vete.— El puchero de Xiaojun se hizo más grande, sus ojos vidriosos apunto de soltar lágrimas cuando asintió y dio unos pasos hacía atrás, Johnny suspiró, pasando una mano por su rostro.— Él está bien.
—Yo no pregunté si estaba bien, pregunté dónde estaba. —puchero Xiaojun, viendo con esperanza al alfa.— ¿Qué pasó? ¿por qué se fue?
—Es complicado.
—¡Soy su omega!
—Con mayor razón es complicado. —negó Johnny, colocando una mano sobre su boca, lo asesinaría si despertaba a Doyoung.— Pero está bien, volverá mañana.
—Voy a llorar.
—No serías capaz.
—Voy a llorar porque eres malo. —declaró, sintiendo sus ojos cristalizarse y su labio temblar.— Bien, entonces voy a ir a buscar a Hendery.
Johnny tomó su brazo con fuerza, cerrando la puerta a su espalda.— Estás esperando gemelos, no puedes irte a buscar a un alfa en este momento, él fue claro al decirme que tenías que quedarte aquí.
—¿Entonces él no está?
—Obviamente no. —el alfa siseo, señalando al omega.— Y tu no te irás de aquí.
—Llévame con él, alfa, es una orden del omega de esta manda. —exclamó Xiaojun, frente en alto y rostro tranquilo.— Ahora.
John parpadeo un par de veces, su lobo le indicó obedecer, al fin y al cabo, era el omega de su alfa, tenía autoridad si él no estaba pero su sentido común le hizo detenerse.— ¡No puedes hacer eso! —exclamó, viendo con pánico como su lobo se hacía pequeño.
—Estás ocultándome a mi alfa por algún motivo y quiero saber cuál es... si me dices, tal vez considere no ir.
El mayor suspiró, había sido derrotado por un omega.— Está en celo, no había pasado por un celo hace años, al parecer vivir entre betas lo había neutralizado... pero despertó a media noche sin poder controlarse, no quiere lastimarte a ti ni a Yangyang... así que me buscó a mi y a Kun para llevarlo lejos de ustedes.
—¿Está en celo y no me quiere cerca? ¿acaso es bruto? —preguntó el omega, más molesto que antes.— Con más razón quiero ir... él debe estar sufriendo... si no ha pasado por esto hace mucho será muy doloroso.
—Él está bien, no está solo. —aclaró y la mirada de Xiaojun se endureció.— Oh wow, tranquilo, no tiene ese tipo de compañía... Kun está cuidándolo, le está dando supresores y colocando hielo cada cuento, yo estuve en la madrugada.— Xiaojun se quedó parado un momento frente a él, su mirada no cambió y el alfa solo hizo rodar sus ojos cuando se dio cuenta que luchar con Xiaojun sería tonto.— Santa mierda, bien, pero no entraré ahí o Hendery me arrancará la cabeza, la verdad... yo le dije que tenerte le haría bien, pero dice que no sabe si puede controlar su celo... así que prefiere evitar lastimarte.
Xiaojun hizo rodar sus ojos, vio su ropa un momento, ¿su pijama celeste que le quedaba un poco grande y unas pantuflas serían la mejor opción para caminar por el bosque? tal vez no, pero pequeños sentimientos de parte del alfa estaban empezando a llegar él, si bien había podido bloquear su lazo parecía que estaba perdiendo el control porque podía sentir el dolor del otro lado de manera lejana. No tenía tiempo que perder.
El camino fue relativamente corto, la cabaña estaba más metida en el bosque, alejada de la manada como un cuarto de kilómetro, su piel se erizó cuando escucho un grito de parte de Hendery cerca, se giró hacía John que negó y tomó su brazo.
—Creo que es mejor que nos vayamos.
—Está bien. —negó Xiaojun, caminando un poco más rápido.— Sé cuidar a un alfa en celo.
John endureció la mirada, su mandíbula se apretó antes de tomar su brazo de nuevo.— No es nada gracioso que hagas chistes con eso. —agregó, viendo al omega.
—No lo digo de chiste. —negó Xiaojun, viendo la cabaña más cerca con cada paso, sus piernas temblando al sentir el fuerte olor de Hendery en el aire.— Hay que aprender de todas las experiencias... sé hacerlo, puedo hacerlo... déjame estar con él.
—Jun...
—Puedo hacerlo. —negó, parándose al fin frente a la puerta, los sollozos de Hendery se escuchaban más fuertes.— Al menos ahora es mi alfa... —agregó, antes de abrir la puerta y conectar su mirada con la del menor.
Hendery estaba amarrado, brazos y piernas a los postes de la cama, un pañuelo húmedo en su frente pero él parecía retorcerse de dolor, su piel se veía sudorosa, su mirada perdida.— N-No... Xiaojun, bebé... vete de aquí. —balbuceo el alfa, sintiendo más dolor al sentir el aroma de su omega.— Mierda...
—Ni siquiera podrá tocarse así. —dijo Xiaojun indignado, mirando hacía Kun que traía más hielo.
—Él lo pidió... no quería arriesgarse.
—Desatalo, por favor. —pidió el mayor, acercándose a la cama donde Hendery lo veía totalmente perdido, pero aún así alcanzó a negar.— Vine a cuidar de ti, mi alfa.
ESTÁS LEYENDO
Los Omegas del Alfa | HenXiaoYang
FanfictionHendery no quería esto. No quería estar a cargo, no sabía estar a cargo y estaba seguro que no podía con una manada... pero cuando su hermano mayor muere la hora de la presentación del nuevo alfa llega. Y él tiene un deber. Ahora él, que no se prepa...