Parecía una pequeña fiesta, las manadas estaban conversando, los alfas comiendo y los omegas riendo a carcajadas, los cachorros jugaban cerca bajo el cuidado de sus padres que aún sentían el ambiente frío y frágil.
Hendery veía todo con una amplia sonrisa y una paz ligera en su corazón, su manada estaba a salvo, su territorio también, sus omegas estaban cerca, conversando con otros alfas y omegas, lo único que le preocupaba era que el sol estaba ocultándose a lo lejos, la oscuridad estaba llegando, tal vez, demasiado rápido.
Sintió el cambio en el ambiente cuando un aullido rompió el aire, todos se callaron y de inmediato los omegas tomaron a sus cachorros en sus brazos, Xiaojun empezó a dirigirlos en una línea ordenada por el camino que unos alfas de su manda mercaban en el bosque, directo a unas cabañas que funcionaban como búnker y Yangyang ayudaba los cachorros más grandes para que no perdieran de vista a su padres.
Al final se quedaron solo los alfas, líderes y ancianos, esa idea no le había agradado mucho, él sentía que alguien debía quedarse con los omegas y cachorros pero John y Kun le habían dicho que el espacio era seguro, nadie podía entrar a menos de que se abriera por dentro y los omegas habían tomado supresores para evitar ser detectados.
—Estamos bien, estamos con los omegas y los cachorros, Yangyang e Innie están a mi lado.—le dijo Xiaojun a través del lazo y Hendery agradeció las palabras de su pareja—. Te amamos mucho. —murmuró, casi podía sentir que lo decía en su oído y su corazón palpito con fuerza.
Los lobos de ojos azules los rodearon rápidamente, se veían toscos y agresivos, apenas les había dado tiempo de frenar en sus patas traseras al notar a Kangin a su lado y enfrente, como liderando una gran manada, unos pocos lobos habían chocado y los que quedaron enfrente dieron unos pasos atrás, ligeramente confundidos al notar a tantos alfas presentes.
—Transformate. —exclamó Kangin, su voz de mando poderosa hizo aparición y todos sin excepción se volvieron humanos, incluso algunos lobos de su lado lo hicieron, reconoció a los hermanos de Xiaojun, estaban casi enfrente de él, con mandíbulas apretadas mientras se lanzaban una mirada rápida... y luego lo vio emerger de los árboles.
Choi Siwon, con ojos azules poderosos y pómulos altos caminando hacia el frente de su manada, si había temor o preocupación en su interior no lo reflejaba, se acercaba a ellos caminando de manera casual, como si fuera en verdad una fiesta de jardín y los últimos invitados estuvieran llegando.
—Hacen fiestas y no nos invitan, que malos vecinos. —dijo el alfa, sus palabras de cierta forma calmando a su manada que se arremolino más cerca de él—. Kangin. —dijo, pero el anciano solo lo vio con asco y él apretó su mandíbula—. ¿Dónde está mi hijo, alfa Hendery?
El nombrado no pudo evitar bufar, después de que lo había enviado a la mierda ¡ahora resulta que se estaba preocupando por él? pura mierda—. Está salvo. —sentenció, apretando sus puños.
—Si a salvo te refieres que está viviendo unido a su secuestrador, no creo. —agregó y Hendery no pudo evitar moverse enojado ante tal mentira—. Vengo a recuperar a mi hijo, Kangin, ellos se lo han llevado contra su voluntad.
—Eso es pura mierda. —siseó, sintiendo las pesadas manos de Kun y Johnny en sus hombros, tratando de calmarlo—. Él vino aquí herido, lo recibimos, ¡le di un hogar a un omega lastimado, eso no es ilegal! —exclamó hacía Kangin, que se había quedado en silencio y Hendery de cierto modo tenía miedo de que le creyera.
—Sabemos toda la historia, Siwon. —murmuró al fin el alfa y los ojos del nombrado brillaron como lo hacían los de Xiaojun cuando se sentía en peligro—. Terminemos con esto de una vez, estás siendo juzgado por el asesinato en masa de tu propia especie, tu y tu manada...
La manada se alboroto un poco, notó como muchos se quedaron si aire y otros se tomaban de las manos, Siwon se movió hacía atrás, pero no huyo, solo se acercó más a su manada—. Déjalos a ellos fuera de esto, solo seguían instrucciones. —declaró, parándose firme—. Yo pagaré por ellos, pero deja que mi manada se vaya.
—¿Por qué deberíamos darle clemencia a ellos cuando tu no tuviste clemencia con nadie? —soltó Christopher y los otros alfas asintieron—. Ellos comparten tu culpa.
—No, por favor... Kangin, te lo ruego. —dijo colocándose de rodillas, incluso su propia manada abrió los ojos sorprendida—. Te lo pido, perdónales la vida, ellos solo seguían mis instrucciones.
El mayor lo vio en silencio, sus ojos escaneando la gran cantidad de lobos con ojos azules que estaban frente a ellos, muchos eran jóvenes, él les calculaba unos veinte años, se preguntaba si muchos de ellos habían sufrido igual que Xiaojun, que había hecho lo que sea con tal de sobrevivir.
—No seremos igual que tu, tu manada puede irse. —sentenció y aunque algunos alfas no se veían contentos con la idea no fueron en contra—. Pero no queremos ver a ningún azul en este bosque, estarán firmando su sentencia de muerte, si deciden volver, los asesinaremos sin dudar.
Siwon asintió hacía él, elevándose nuevamente y girando hacía su manada que a pesar de todo parecía seguir esperando instrucciones—. Ya han escuchado... este ya no es nu-nuestro territorio, ningún azul se quedará en el bosque, todos se irán. —dijo, viendo a sus hijos en estás últimas palabras—. Todos los azules se irán.
Ambos hijos se inclinaron delante de su padre, conscientes de que sería la ultima vez que le verían—. Nos encargaremos de eso. —murmuró Chanyeol, viendo directamente a su padre.
—Ningún azul se queda. —repitió Sehun, antes de que su padre elevara sus manos y todos los ojos azules le dieran la espalda, dejándolo solo frente al verdugo.
Siwon los vio irse con tranquilidad, un par de alfas se colocaron a su lados, dándole un golpe en las costillas que le hizo caer de lleno al suelo bajo la vista de todos, que no tardaron en sonreír ligeramente al ver al gran líder de los azules derrotado. Un par de golpes más vinieron después, sacando sangre de su boca y nariz, sus manos habían sido amarradas en la parte de atrás y Sungmin, ayudante de Kangin le había entregado al anciano líder un cuchillo lo suficientemente largo y filoso como para terminar el trabajo rápidamente.
—¿Últimas palabras? —preguntó, con el cuchillo a un lado y la mirada fija en su lastimado rostro. Hendery desearía poder sentir pena por él, pero no podía.
Siwon asintió, sus ojos se dirigieron a la del alfa de la manda Wong, Hendery sintió sus brazos erizarse al unir sus miradas, espero lo que sea, incluso un insulto... pero el alfa empezó a reír, escupió un poco de sangre a un lado y le preguntó con burla.
—¿Dónde está mi hijo? —soltó y sonrió ampliamente al ver que Hendery se veía confundido e incluso un poco enojado ante la pregunta, río como un loco, mientras elevaba la mirada hacía Kangin, esperando que apuñalara su corazón como lo mandaba la tradición.
Pero Hendery se sentía intranquilo ahora, por un comentario que la parecía incluso insolente, su corazón latía rápidamente en su pecho, Kangin alzó el cuchillo al aire, enterrándolo sin compasión en el pecho de Siwon que grito dolorosamente antes de empujarse a si mismo lejos del cuchillo y comenzar a desangrarse frente a sus ojos, él se obligó a calmarse para no agobiar a Xiaojun a través de el lazo hasta que cayó en cuanta que no podía sentirlo, que su pareja no estaba.
Hendery hubiera querido patearse a si mismo, había sido tan tonto, "ningún azul se queda" habían dicho y lo que por un momento se escuchó como una promesa a su manada en realidad era una amenaza hacia él.
—¡Xiaojun! —exclamó, corriendo a través de todos los alfas que lo veían confundido, Johnny y Kun corriendo a su lado aunque no sabían bien el por qué pero parecieron entender cuando vieron a dónde se dirigía el alfa, a la cabaña donde los omegas estaban escondidos, donde se supone que estarían seguros.
Pero ya no lo estaban.
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Los Omegas del Alfa | HenXiaoYang
Hayran KurguHendery no quería esto. No quería estar a cargo, no sabía estar a cargo y estaba seguro que no podía con una manada... pero cuando su hermano mayor muere la hora de la presentación del nuevo alfa llega. Y él tiene un deber. Ahora él, que no se prepa...