Capítulo 12.

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Tiempo después, se diría un par de días, las cosas se tornaron más normales, pero para nadie pasaba desapercibido el cambio de actitud de gerente de ventas para con la nueva asistente, es decir, a pesar que la mujer fuese bella, todos podrían pensar que quizas ese hombre talvez era asexual, no porque lo imaginaran, sino porque desde que entró a trabajar a esa empresa, jamás demostró cierto interés por nadie, ni mujer, ni tampoco hombres... pero desde que se conoció la mujer que andaba de arriba abajo recolectando datos, trabajando arduamente, era la asistente del Ingeniero Cifer y el Ingeniero Jaegerjaques, la curiosidad carcomía mucho más, al ver que aquel hombre como tempano de hielo, se le escapaban ciertos fantasmas de sonrisa, cuando ella estaba rondando a su lado... ¿Curioso no?...

—Srita. Inoue, eso es todo, por favor termine de recoger las carpetas y me entrega el informe con el resumen de la reunión de ahora, también detálleme los puntos que podemos mejorar según su análisis, lo tomare en cuenta y hare mi propio esquema de las propuestas que ofreceremos en unas semanas- menciono el pelinegro.

—De acuerdo Ingeniero Cifer, termino esto y comienzo a trabajar en su reporte...- pero mientras recolectaba los documentos, se detuvo un instante y miro a su jefe —Ahmm... Ingeniero-

—No hay nadie aquí Mujer, puedes llamarme por mi nombre – menciono mientras se sentaba y se disponía a leer unas cuantas notas que apunto durante la reunión.

La pelinaranja rio nerviosa —Ulquiorra, se que tengo poco de haber comenzado, pero quería preguntarte, ¿es necesario que mañana sábado venga a trabajar?, pregunto porque la semana pasada entendía que debía hacerlo, pero la verdad, es que, este fin de semana, bueno... quería ir a ver a Kazui, tengo mucho tiempo de no verlo, y ya creo que es tiempo que comience a recuperar mi vida normal junto a él-

Ulquiorra le tomo por sorpresa la petición, pero entendía que ella necesitaba y debía retomar las riendas de su vida nuevamente, pero con su nuevo status, además estaba el tema que le faltaba firmar el divorcio, no obstante, eso no impidió que ella se convirtiera en tan poco tiempo, gracias a su esfuerzo, dedicación, eficiencia y eficacia en una pieza fundamental en su equipo de trabajo junto al peliazul, era verdad que el sábado anterior les toco trabajar hasta un poco tarde tratando de organizar todo lo que tenían pendiente de ingresar a las bases de datos que ella iba a comenzar a llevar, era una ventaja que ella lograra ponerse al corriente con todo, por lo que un merecido descanso no estaría mal.

—De acuerdo, si quieres solo termina de copilar la información y me la envías, dado que has adelantado trabajo poder irte una vez me entregues la minuta de trabajo-

—¿Es enserio? -

—¿Acaso he bromeado alguna vez? –

—Bueno no... pero...- al mirar a los ojos de Ulquiorra entendió —Gracias!, en verdad gracias- sus mejillas estaban coloradas por la alegría, y eso no paso desapercibido por el ojiverde, era una vista gratificante para él.

—Bien, termina aquí y luego te retiras, el lunes pasamos el permiso de salida-

—Esta bien!, mil gracias Ulquiorra! - y con ello se apuro en ordenar todo, recolectar los apuntes y generar los informes solicitados por su jefe.

Ulquiorra notifico a Grimmjow de la decisión y el permiso de la mujer, pero no le tomó mucha importancia, puesto que al igual que el pelinegro, sabían que la pelinaranja se lo había ganado, gracias a su dedicación al trabajo.

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—Hola?-

—Yuzu-chan!, soy yo Orihime...- contesto alegre

—Hime-san!, me alegra escucharte, te oigo muy alegre ¿Cómo estás? -

—Muy bien, gracias por preguntar, si estoy muy contenta, pero llamaba para preguntar, ¿mañana no saldrán verdad? -

—La versad no tenemos nada que hacer, así que estaremos en casa ¿por qué? - pregunto curiosa la de cabellos claros.

—Es una sorpresa, pero a ti si puedo decírtelo, mañana quiero ir a visitarlos y quiero salir con Kazui, ya hace mucho que lo deje con ustedes, así que quiero comenzar a pasar la pagina junto a él, se que he pasado por mucho y ustedes junto a mis amigos aquí, han sido un pilar fundamental en que no fuese a caer en depresión, por lo que quiero mañana hablar con ustedes respecto a mi decisión de donde viviremos con Kazui-kun-

Todo eso le tomo por sorpresa a la chica, pero si le preguntaban si prefería eso a escuchar a una mujer que estaba la borde del colapso gracias a las constantes insistencias de su hermano de firmar el dichoso papel del divorcio, diría que era preferible tener a una mujer llena de vida que a la otra mujer que esta inconsolable y devastada. Si recordaba bien, su hermano hace mucho atrás discutió con su padre diciendo que Orihime estaba ya viviendo con un hombre y que no le parecía para nada justo que no firmara el documento del divorcio y lo dejaba vivir la vida que ella ya estaba viviendo.

Claro está que eso no le diría a la pelinaranja, recuerda que su padre lo golpeo tan fuerte que estuvo cargando un morete por mas de una semana, y que le exigió que respetara la decisión de ella, que eran tonterías lo que él estaba hablando, que jamás haría eso Orihime y que dejara de estarla hostigando con lo de la firma, que cuando ella lo decida ira por su propio pie a firmar el divorcio, que lo mínimo que debería de hacer es dejarle esa decisión a ella misma el tiempo que considerase pertinente, claro esta que se lo dejo muy claro pero a punta de puñetazos.

—E...esta bien Orihime, amm... ¿a qué horas estarás por aquí?-

—mmm... temprano, quiero aprovechar todo este tiempo junto a mi querido Kazui, emm... Yuzu, estará ahí...-

—No, si tu pregunta es por mi hermano, no, .... La verdad ... bueno mañana platicamos y te informo-

—Muy bien, entonces los veo mañana-

—Si, nos vemos, ten buen viaje-

—Gracias!, adiós- y con eso termino la llamada.

Orihime llego muy contenta a casa de Nell, le comento el porque llego tan temprano y su idea de viajar a Karakura a ver a su hijo, su amiga la animo muy contenta en que estaba haciendo el de ir avanzando con respecto a su vida, no podía seguir escondiéndose en un rincón , esperando que todo sea un mal sueño, no, tenia que aceptar la idea de que todo terminó y que ella tenía que continuar su vida, así como darle un nuevo significado a la misma, y que mejor que su hijo para eso. Por lo que este seria un buen comienzo ir a visitar al niño justo en ese entonces.

Tomaron el té, entre risas e historias el tiempo se fue volando, pronto Orihime se vio arreglando su maleta ya que saldría muy temprano para dirigirse hacia Karakura a ver a su pequeño niño.

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El tren arribo a la estación, ella se bajo y cuando puso un pie fuera del mismo, sintió todo su cuerpo temblar, hace mucho que no estuvo por ahí, no podía negar que se encontraba ansiosa y nerviosa, pero a la vez temerosa, eran tantos recuerdos los de ese lugar que simplemente sentía como le dolía el pecho, apuño su mano a la altura de su corazón, inhalo y exhaló un poco para tranquilizarse, cosa que logró muy bien, que ahora se dirigía a paso muy seguro a la casa de los Kurosaki.

—Espérame Kazui, tu y yo debemos hablar de esto...- susurro para si la mujer —Ojalá te hubiera pedido que me acompañaras- pensó la pelinaranja —pero bueno, también tú tienes cosas que hacer, ¿no es así Ulquiorra? -

Y con ello a paso seguro caminaba por las calles de Karakura rumbo al que antes era su hogar y ahora casa de su exsuegro.

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DOLOR Y CONFESIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora