A Jungkook nunca se le había ocurrido que un día entraría en el despacho de Jin y se lo encontraría llorando. O bueno, secándose las lagrimas justo después de haber llorado.-Necesito que me hagas un favor-dijo Jin, girándose hacia el joven.
-Claro. Para eso estoy.
No había sucedido nada la noche anterior y, pese a sus amenazas, G Dragon no había llegado a presentarse por allí. Pero Jungkook había pasado la noche en vela, ya fuese esperando al mafioso al lado de Seokjin, compartiendo besos y juegos con su novia o confundiendo a Taehyung mientras este creía que tenía el control. Y los círculos morados alrededor de sus ojos daban fe de ello.
-Es...Dios, no pensé que me costaría tanto decirlo. Pero ha pasado algo. Y quiero que se lo digas a Kim Taehyung. Yo...sé lo difícil que es decir estas cosas...y lo duro que es escucharlas pero...
-¿Qué sucede?-Jungkook abrió mucho los ojos, preocupado.
-Bueno...
-¿Sí?
-Me llamaron esta mañana del depósito de cadáveres.
-No...
-Jungkook, escúchame, por favor...-le pidió Jin-. Anoche ni G Dragon ni ninguno de los suyos se presentó por aquí para cumplir con sus amenazas. Pero eso no significa que...no significa que no hiciesen nada... Anoche...
-¿Puedes decirme lo que pasa de una vez, Jin?-Jungkook empezaba a impacientarse y estaba asustado, de otra forma no le hubiese hablado así a su jefe.
-Namjoon. Kim Namjoon...
-¿Está...?
-Sí...Alguien lo vio. TOP le disparó por la espalda. Le dijo que ella le mandaba saludos. Supongo que se refería a aquella chica...No se pudo hacer nada por él. Falleció poco después. Yo...
-¿Taehyung no tendrá que ir a reconocer el cuerpo?-Jungkook no conocía demasiado a Namjoon, por lo que sus primeros pensamientos fueron a parar a Tae y al dolor que aquella terrible noticia le causaría.
-No...Yo ya lo hice por él.
-¿Tú? No lo entiendo.
-Namjoon y yo fuimos al mismo instituto hace tiempo-explicó Seokjin, sereno, mientras se limpiaba otra lágrima-. Nos acabamos distanciando. Yo...bueno, ya sabes que soy de buena familia y que siempre quise dedicarme a esto. Hubo un tiempo en que éramos muy amigos, ¿sabes?. Y yo sabía que tenía problemas en casa...Estaba...casi exactamente igual que entonces...En el fondo, todo este afán por buscarlo, por ponerle entre rejas...Sé que es una tontería, Jungkook pero...pensé que podría ayudarlo...que todo volvería a ser como cuando éramos críos...Es una tontería...¿verdad?
Jungkook se limitó a abrazar a Jin y se despegó después de él, resignado a informar a Taehyung de que acababa de perder lo más parecido a un padre que había tenido nunca.
No supo como llegó a pronunciar las palabras exactas, no recordaba habérselo contado todo. Solo recordaba haber visto de nuevo a aquel niño perdido en los ojos de Tae. Solo recordaba que, cuando lo había visto llorar, no había podido evitar echarse a llorar también. Se sentó en el frío suelo de la celda y meció al chico entre sus brazos. Ya no había lugar para provocaciones.
Tae lamentaba profundamente haberse entregado por un capricho. Jungkook solo era un capricho para él en aquellos instantes. Lo amaba, claro, pero en ese momento le pesaba mucho más el no haber estado al lado de los suyos, el no haber estado ahí, quizá para salvar a Namjoon.
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BLOOD AND TEARS
FanfictionJungkook es agente de policía, y ama su trabajo. Pero esconde un secreto que le haría perderlo si su jefe, Seokjin, llegase a enterarse. Y ese secreto tiene mucho que ver con Kim Taehyung, miembro de la banda de Kim Namjoon, y sigue doliéndole pe...