Todo estará bien

Reclamo

Me encantaba que estuviéramos todas juntas después de tanto, me daba una satisfacción enorme saber que a pesar de mis acciones en el pasado ninguna había generado algún tipo de resentimiento hacia mi

Cómo Poché lo había pronosticado la cena transcurrió en calma, con un par de chistes y comentarios divertidos de todas, con una breve explicación de como fue todo mi proceso de recuperación y con preguntas bastante ordinarias

—Entonces hay algo que no entiendo... ¿Ustedes dos están saliendo?— la pregunta de Vale casi hacia que me ahogara con el vino que estaba bebiendo

—No es así, Dani necesita tiempo para arreglar un par de cosas que por cierto, son personales— Poché hizo un énfasis en sus últimas palabras dando a entender que no preguntarán más respecto al tema

—Pero escuchen, está vez quiero hacer las cosas bien, no les quiero volver a fallar y mucho menos a ti— dirigí mi mirada hacía mi cruela con una sonrisa que salía desde el fondo de mi corazón

Cómo ya era costumbre mi celular sonó interrumpiendo el momento tan mágico que se había creado, sentí una punzada en el estomago mientras comenzaba a imaginar que persona sería la que estuviera del otro lado de la línea

Al leer el nombre sentí mi corazón detenerse, me quedé sin hacer nada, la mano que sostenía el celular comenzó a temblar notoriamente

Sabía que no podía aplazarlo por mucho tiempo y con un puñado de valor que no se dónde saqué decidí contestar mientras intentaba salir de la cocina naturalmente, les hice una señal con la mano indicando que me tardaría unos segundos

—¿Hola?— pregunté con voz calmada

—Daniela— la voz de la mamá de Laura sonó con potencia

—Hola señora, ¿Cómo está?— escuché un suspiro de su parte, era algo frustrante tener que tratar con esto ahora

—Dejate de cortesía falsa, me puedes explicar qué demonios fue lo que pasó?— cerré mis ojos mientras buscaba algo que decirle que no sonará tan cruel

Coloque mis dedos en mi frente mientras me sentaba en el sillón de mi sala de estar

—A ver... Se lo puedo explicar— su voz sonó casi de inmediato

—Si y más te vale que lo hagas— me sentía como niña que estaba siendo regañada por su madre

—Escucheme, creo que a veces las personas se equivocan, como es ahora en mi caso... Ocurrieron un montón de cosas que me hicieron reflexionar un buen rato y me di cuenta que lo mejor para Laura y para mí es terminar con todo esto...— ya me estaba preparando mentalmente para sus sermones

—No me trates de engañar porque Laura ya me contó todo, te encontraste con tu ex novia no? La que provocó que cayeras en coma hace unos años— sus comentarios comenzaban a irritarme poco a poco, en una escala que se intensificaba

—Mire, no entiendo el porque de sus comentarios tan despectivos, creo que eso no va con el tema— no seguiría permitiendo que todo el mundo le echara la responsabilidad a María José cuando estar ahí había sido mi desición

—Es que hija, ¿como te vas a volver a enamorar de una persona tan rastrera como ella? Recuerda todo lo que te hizo, recuerda que te engaño quien sabe por cuánto tiempo— mi nivel de tolerancia había llegado a su límite, no permitiría esto de ninguna forma

—Escuche, yo ya tomé una desición, y lo que tenga que arreglar será con Laura, no con usted, así que le pediría de favor que dejara de meter sus narices donde nadie la llamó y que respetará mi vida privada, que tenga buenas noches— acto seguido colgué sin darle oportunidad de replicar

Nunca pensé que llegaría a hablarle así, pero una persona enojada cambia completamente, es un tanto molesto que se meta con Poché cuando no sabe nada de ella más que lo básico

Suspiré pesadamente y cuando me levanté para volver a la cocina me di cuenta que la chica del mechón rubio estaba de pie junto a mi sala mirándome con lo que parecía ser tristeza, sabía que había escuchado todo lo que acababa de discutir con mi ex suegra

—¿Poché?— ella se acercó a mi y hundió su rostro en mi pecho, me desconcerto demasiado

—Perdón Daniela— el sentir la calidez que sus lágrimas provocaban me preocupó demasiado

La separé para poder verla y en efecto, se encontraba llorando a cantaros por alguna razón que yo no lograba entender

—¿Que pasa?— intenté sonar lo más comprensible que pude, verla llorar es una de las pocas cosas en el mundo que me partía el corazón por completo

— Perdón por llegar de un día para otro y destruir la vida que tanto trabajo te costó hacer— yo negué con mi cabeza de inmediato mientras tomaba su rostro con ambas manos y lo levantaba un poco logrando que nuestros ojos se conectarán

—Nada de eso, tu no puedes destruir algo que no estaba destinado a ser... De todos los estudios musicales que hay en este país decidiste venir al de Laura, de todos los días que había para acompañarla decidí acompañarla ese día, Poché, ambas estábamos destinadas a encontrarnos... ¿Puedes entender eso?... Yo ya lo hice... Tu eres mi Serendipia y nunca dejaste de serlo— puse mis labios sobre los suyos unos cuantos segundos

A pesar de ser un beso relativamente corto, en el iban los sentimientos más poderosos que habitaban en mi corazón

—Pero ahora todas las personas están en tu contra— sus sollozos continuaron durante un tiempo más

—Y eso que me importa, lo que la gente diga de mi o diga de nosotras está de más, mientras seamos felices todo estará bien— mis dedos comenzaron a acariciar delicadamente sus mejillas, estás se sentían un poco cálidas por las lágrimas que habían pasado recientemente por ahí

—¿Y que hay de Laura?— su pregunta hizo que pensará un poco en mi respuesta

—Laura es una mujer maravillosa, no te lo puedo negar... Pero ella no se merece a alguien como yo... Ella merece a alguien que la amé como debe de ser... Es tan complicado— concluí

Realmente tocar este tema seguía siendo muy difícil para mí, Laura había sido mi compañera de vida desde hace un tiempo y es completamente imposible que los sentimientos que tienes hacia alguien se desvanezcan en un par de días

Tomaría tiempo en estabilizar mis sentimientos y mis pensamientos respecto a ella, sin embargo en ningún momento había dudado respecto a mi desición

Quiero estar con Poché, ella es la definición de mi felicidad, es mi agua cuando tengo sed, es mi cura para cualquier enfermedad

La abracé como nunca antes había abrazado a alguien, no quería que se separara de mi ni un segundo, estaba segura que ella podía escuchar los latidos de mi corazón, sus brazos rodearon mi cintura

En este momento necesito que nadie nos moleste, porque es nuestro momento

@Aristocacher