El Secuestro

Capítulo 58

Anastasia

Con los ánimos un poco más calmados Taylor logra enfrascarse en una conversación con su suegro, yo los dejo que resuelvan sus diferencias y me retiro un poco de ellos. Aún me tiene intrigada este hombre.

Mientras avanzo por el pasillo vea a Gail llegar hasta mi muy nerviosa.

- Discúlpeme pero yo le exigí a Taylor que si no hacía nada pronto le diría todo a mi padre pero veo que él lo termino llamando.

-No te preocupes, Gail.

-Se que no debí meterme pero todo esto es injusto y esos desgraciados siguen libres mientras mi pequeño muchacho está esa cama sin poder levantarse.

-¿Tu lo quieres mucho verdad?

-Es una larga historia y se que no debo querer a mi jefe como lo quiero pero él a sufrido tanto que no sé cómo pasó pero me conmovió tanto cuando conocí realmente como era él.

-Él está muy agradecido por todo lo que has hecho por él.

-Pero yo no...

-Se que tú lo ayudaste aquella noche en el balcón y se que tu misma lo llevaste a terapia con el doctor Flynn.

-¿Él le contó lo que pasó hace cuatro años?

-Si. Cuando creímos que Christian murió encontré varias cartas escritas por él y en una de ellas me contó lo que pasó esa noche. Él me pidió que te diera las gracias por lo que hiciste.

-Yo solo hice lo que creí mejor para él y afortunadamente le sirvió ya que logró controlar un poco las pesadillas después de empezar a recibir terapia.

-Y no sabes cuánto estoy agradecida contigo por haberlo ayudado. Ahora quiero mostrarte algo.

Le indico que me siga hasta la habitación de Christian y cuando entramos él está dormido, ella lo mira detenidamente y cientos de lágrimas salen de sus ojos la dejo que saque todo lo que lleva dentro y me voy a buscar la carta que llevo guardando desde hace semanas en la maleta cuando la encuentro se la entrego a ella en sus manos.

Ella la toma con las manos temblorosas y abre la carta cuando la empieza a leer se lleva una de sus manos a la boca para callar un sollozo. Sigue llorando y cuando termina de leerla la vuelve a doblar y la lleva su pecho.

-Todos esto años pensé que él se quiso quitar la vida.-dice entre llantos.

-Fue todo un malentendido.

-Pero ¿por que no me lo dijo?

-Supongo que pensó que si te lo decía tal vez tú no le creerías.

-Bueno eso suena razonable y yo de tonta pase durante meses guardando los cuchillos bajo llave y cientos de cosas con la que se podría hacer daño.-dice un poco más calmada y limpiándose las lágrimas de su rostro.

-Él jamás pensó quitarse la vida lo único que quería era recuperar la única foto que tenía de bebé.

Ella se acerca hasta la cama y delicadamente toma la mano de Christian.

-Perdón por haber creído eso de usted pero es que me asuste demasiado esa noche.-su llanto se hace más grande cuando Christian despierta y se le queda viendo fijamente.

Ella se sorprende mucho y luego se aparta de la cama limpiándose las lágrimas que caen descontroladamente en su rostro.

-Ya, Gail, no llores todo lo que hiciste fue para bien.- me acerco a Christian y tomo asiento al lado de él.-Aunque en este momento no sepa que pasa a su alrededor se que en el fondo recuerda todo lo que has hecho y está agradecido.