¡Un clásico! ¿Cuántas veces hemos visto a gente haciendo footing con el torso envuelto en plástico? ¿O incluso los muslos y los brazos, cual fiambre embutido? Éstas suelen ser las zonas "problemáticas", es decir, donde se suelen situar las reservas de masa grasa que tanto parecen molestar al canon de belleza vigente, tanto masculino como femenino.
De primeras diré que este mito es FALSO se mire por donde se mire, aunque hay que reconocer que la idea que lleva a pensar que sea cierto y que, por tanto, nos envolvemos cual salchichas ultraprocesados, suena realmente lógica:
Cuando ponemos un trozo de grasa sólida (mantequilla, tocino...) sobre una sartén y la calentamos, se funde. Cuando nos envolvemos el cuerpo en plástico, concretamente esas zonas de reserva grasa, aumentamos nuestra temperatura corporal y observamos que, efectivamente, sudamos más. Esto puede llevarnos a pensar que la grasa interna, al calentarse, se está fundiendo y saliendo por los poros de la piel, ¿cierto? PUES NO. Ya va siendo hora de que el mundo entero lo sepa: LA GRASA NO SE SUDA, sino que sigue su propia vía metabólica para "quemarse", la cual no incluye para nada una salida cutánea.
¿Qué es el sudor entonces? Bien, dicho lo anterior cabe aclarar que la sudoración es una de las formas que tiene nuestro cuerpo de regular la temperatura interna cuando ésta sube (igual que, cuando la temperatura es baja, nuestros poros se cierran y el vello se levanta para "atrapar" el máximo calor posible y evitar una hipotermia). Cuando tenemos calor, los poros de nuestra piel se abren y liberan vapor de agua y toxinas del interior de nuestro organismo, pero no grasa. Por eso es muy importante beber agua cuando sudamos, literalmente nos estamos deshidratado y puede ser peligroso.
¿Entendemos entonces la lógica de por qué no es para nada una buena idea envolverse el cuerpo en plástico? Lo único que logramos es aumentar la temperatura de nuestro cuerpo, provocando que sudemos más, pero a la vez impedimos que esa sudoración se lleve a cabo de forma correcta. Esto quiere decir que nos vamos a deshidratar con más facilidad pero impidiendo que el cuerpo libere toxinas de forma natural y eficaz ya que estamos taponando nuestros poros con el plástico (algo similar a lo que ocurre cuando utilizamos antitranspirantes con aluminio en nuestras axilas, pero en zonas mucho más grandes). Ah, y por supuesto sin quemar un solo gramo de grasa, que era el supuesto objetivo.
Por lo tanto, conclusión: Si lo que quieres es bajar tu porcentaje de masa grasa come de forma adecuada y haz ejercicio moderado, adaptado a tus necesidades y, a ser posible, guiado por un profesional sin hacer caso a falsos mitos como el del plástico, eso sólo puede perjudicarte.
ESTÁS LEYENDO
Mitos alimentarios
Random¿Es malo comer fruta por la noche? ¿Los smoothies verdes adelgazan?¿Las vitaminas de los zumos se pierden? ¿Si eres vegetariano/a te faltan nutrientes? Y un laaaargo etcétera. El mundo de la alimentación es una espiral de verdades y mitos que a todo...