GUARDIAN'S LOVE I; SEGUNDO LIBRO DE LA TRILOGÍA "YOU"
Era imposible que un ser humano estuviera tan roto, que lo hubieran lastimado tanto como él se sentía en esos momentos de pena. Barry Allen consiguió derrotar a uno de sus peores enemigos con in...
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»34. Vivir gracias a él o morir por él. «
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—¿NO CREES QUE LA VIDA DE MARCUS BENNETT ERA MUY BUENA?
Barry se tensa y aprieta las manos en puños, el semblante deformándosele lentamente—. No vayas por ese camino, te lo advierto.
—Su hija era la guardiana más poderosa de la que se hubiera tenido registro antes, y él estaba teniendo la dicha de verla desarrollar todo el potencial de sus habilidades —el morocho se gira y señala hacia atrás. Barry entonces descubre la figura falsa de su chica sentada en un escritorio cercano, mirándolo con una sonrisa. A su lado, Sabrina le sonríe de igual manera—. Perdió a su esposa, pero, no importó. Creaste Flashpoint y entonces pudo recuperar por unos segundos la vida perfecta que él se merecía. Pero tú...
—Basta.
—Tú tuviste que echarlo todo a perder.
Las figuras de las chicas Bennett desaparecen de golpe. De repente, el pecho de Marcus se abre y un hueco parece formarse en el centro, de donde comienza a emanar sangre a borbotones. De su boca chorrean gotas rojas y espesas de aquel elixir de vida mientras camina hacia a Barry, quien no puede hacer más que mantenerse estático en su lugar, sintiéndose pálido y mareado. Jamás se había tomado el tiempo de imaginarse la muerte de Marcus, no quería hacerlo porque sabía de Kailan que él había tenido pesadillas con ese momento, y tampoco pretendía volver a torturar a su guardiana con las mismas emociones negativas. Ahora que tenía a la fuente de sus poderes recreando ese instante doloroso, unas tremendas ganas de vomitar se le acomodan y lo único que agradece es no tener a su Kailan ahí con él para presenciar esa terrible escena.
—Su legado se vio mancillado —continúa hablando con la boca llena de sangre—. Ya no pudo ver a su hija alcanzar su máximo potencial, no pudo verla convertirse en la guardiana más poderosa. Del destino que le esperaba, ahora sólo queda un cascarón de sueños desechos.
—Basta... Basta... —suplica Barry, sintiendo sus ojos picar.
Marcus sonríe, secándose la sangre de los labios—. Entonces, ¿sólo viniste aquí para salvar a Vincent?
