Capítulo 12 "Pensar de más"

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Chloe

El fin de semana pasó como siempre, demasiado rápido. En la fiesta no paso nada, además de las típicas miradas "intimidantes" de Holt.

Hoy de nuevo andan con gorros, aunque la noticia ya se esparció y la mayoría de los alumnos ya saben lo que pasó. En el desayuno el director los mandó a llamar, pero volvieron a los 10 minutos como si nada, supongo que de verdad son los favoritos del señor Hugh.

- Hoy quiero que vuelvan a intentar lo que hicimos en la primera clase, pero esta vez iremos rotando a los 20 minutos, van a alcanzar a estar con cuatro compañeros diferentes, ya saben lo que tienen que preguntar- Explica la clase el profesor de orientación.

Yo estoy sentada con Holt, como siempre. Él se encuentra con los brazos cruzados y está sentado en la silla casi acostado, se le ve realmente incómodo, pero debe ser lo contrario.

Veo como los demás empiezan a hablar con su respectivas parejas, pero no trato de iniciar conversación con la mía, ya que tampoco veo disposición de su parte.

- Ya, chicos, conversando - Se nos acerca el profesor moviendo la manos, como si nos apurara.

- Ya estoy harto de mi compañera, creo que trabajaría mejor con otra persona - Por fin escucho una palabra de parte del pelo rosado y no es nada agradable.

- Llevan solo dos semanas, yo que ustedes empezaría a llevarme bien, porque no los cambiaré de lugar - Se da la vuelta - ¡Ah!, y quítate el gorro, es una falta de respeto adentro del aula - Le ordena, haciendo que una sonrisa se produzca en mi cara al tener que hacerle caso.

Su pelo rosado sale a la luz de mala gana, está todo desordenado, ya que se lo quitó del tirón.

Todos lo quedan mirando y susurran cosas.

- ¿Qué ven? - Grita molesto y los demás vuelven a sus tareas, pero mi sonrisa no desaparece - Te da gracia, ¿no?

- Admito que es bastante divertido.

- Entonces también admite también que incluso con un color horrendo me veo guapo - Esboza su típica sonrisa de lado

- Ya quisieras - Le guiño un ojo.

Los ojos del chico ven hacia el profesor y al ver que no está prestando atención se coloca de nuevo su gorro.

- Entonces... ¿Como se te ocurrió esta broma? Tengo que admitir que me impresionó - Ladea la cabeza.

- No deben revelarse ese tipo de secretos - Me acomodo con mi mentón en mi mano y mi codo apoyado en la mesa.

- Para la próxima prefiero un color más común, como negro, o... ¿me imaginas siendo rubio?

- Eso no tendría tanta gracias - Apreto lo labios - Además, pensé que te gustaba destacar y el rosado te ayuda bastante con eso.

- Linda, no necesito de un color de cabello extravagante para sobresalir - Dice con arrogancia.

- ¿En serio me acabas de decir linda? - Elevo una ceja.

- Tengo que admitir que lo eres - Se encoje de hombros.

- ¿Ya superaste la broma entonces?

- Una cosa no tiene que ver con la otra - Se cruza de brazos - ¿Eres linda? Sí; ¿Vas a pagar por lo que hiciste? También - Asiente para sí mismo.

El tema se agotó, pero para no terminar con la conversación le hago una pregunta que me tiene con cierta curiosidad.

- ¿Qué les dijo el director Hugh?

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