N U E V E

7 0 0
                                        

Empece a escuchar como mis compañeros empezaron a susurrar cosas.

El equipo no dejaba de ver a los médicos como en burla. Yo solo la veía a ella. Se le notaba más relajada.

Cuando entro al campo respiro y se relajó mucho, se veía que extrañaba entrenar.

Yo tenía las brazos cruzados estaba enfrente de todo el equipo viendo como los médicos nos escaseaban a todos. Algunos llevaban algunas materias de rehabilitación y otros de administración así que el escáner completo se sentía raro.

- Profesor, ellos juegan baloncesto, como nos enseñaran algo si no están en una chancha de madera o cemento. El pasto y el lado no es su zona. -dijo una de las muchachas mientras algunos se reían.

- No sabia que los "medicos" podían correr aunque sea por 2 minutos. -dijo uno de mi equipo.

- Me esta gustando esto... vemos a donde va. -dijo el profesor.

- Cuanto a que nosotros podemos correr por más tiempo que ustedes aquí afuera. -dijo un chico.

- Veamos... gana el que quede hasta la ultimo.

Los de mi equipo me miraron como pidiendo permiso, asentí teniamos que empezar dando unas vueltas para calentar así que me ahorrarían un paso.

Mire a Roma y ella nomas negaba con la cabeza.

Mi equipo y el grupo se posicionan en la línea de salida, el maestro tiene un cronómetro en la mano y da la salida.

Todos salen corriendo menos unos pocos, no es velocidad si no resistencia. Mi equipo llevaba bien sus vueltas, pero se resbalan en las curvas ya que no tienen agarre.

Después de unos minutos solo queda más de la mitad del equipo de baloncesto y 3 de medicina entre ellos Roma.

- 5 minutos!

El profesor daba un grito cada minuto dándonos a saber cuanto llevábamos. Algunos del equipo o bueno todos se les veía bofeados y cansados, los chicos iban a desmayarse si no dejaban de correr. Cuando pense que se caerían por correr tanto se salieron al llegar a dond estaban los demás de su salon.

Mi equipo agusnto otras 6 vueltas, solo quedábamos 3, mi co-capitan, Roma y yo. Se le veía como disfrutaba esto. No lo sufría como nosotros. Respiro profundo y trato de controlar mi respiración, ya me esta faltando algo de aire, llevo mucho trotando.

De un momento a otro veo a Roma como agarra carrera y mi co-capitan me ve sorprendido.

- Pensé que ya se iba a salir, tiene buena resistencia.

- Más de la que pensé...

- 7 minutos!

- Si corremos se cansará más -dijo el.

- Y nosotros también.

Mire como Roma nos pasó y asenti hacia mi amigo. Ambos aumentamos la velocidad y corrimos por el campo. Alcanzamos apenas a Roma pero mis piernas ya ardían.

No sé cuánto nos tomó alcanzar su ritmo, pero así como tomé un respiro ella aumentó más la velocidad y nos dejo atrás.

- 10 minutos!

- Ya no puedo más... voy a morir, te la dejo a ti capitán.

- Que... gracioso -dije sin aire.

El se solio y solo escuchaba las porras de los dos a los que quedaban. Estaba bajando la velocidad cuando vi que Roma igual la bajó, la vi que miraba un punto, mire ahí y no vi nada, estaba a punto de parar pero ella se detuvo de la nada dejándome pasarla.

Roma Suize Civic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora