𝚂𝚞𝚎ñ𝚘𝚜 𝙼𝚎𝚗𝚝𝚊 𝚢 𝙽𝚊𝚛𝚊𝚗𝚓𝚊 ~𝚈𝚘𝚘𝚗𝚖𝚒𝚗~

Capítulo 20 - Final

19 DE OCTUBRE DE 2020

Yoongi desde la cama observaba de reojo a su novio saliendo del armario, quien entre sus manos traía la ropa que se pondría para ese día.

Dejó un rato el teléfono para darle completa atención a su pareja, quien se colocaba con algo de dificultad un buzo canguro de color negro.

-¡Hey! Ese no es mío ¿O sí?- preguntó el pelimenta, sacando un inocente sonrojo al menor, quien asintió tiernamente acercándose a la cama en la que su novio se encontraba para sentarse en ella.

-Lo uso en días especiales, siento que me trae suerte, aunque ya me queda un poco apretado- dijo mientras sentía desde atrás unos brazos recorrer su cintura, hasta dejarlo apresado.

-¿Qué dices? Si no creciste nada, sigues siendo un hermoso bebé- dijo el mayor con aquella tierna voz que usaba de vez en cuando, besando una de las cálidas mejillas del pelinaranja.

Jimin sonrió, acaricando con sus pulgares las largas y finas manos del pálido, bajando su mirada hacia los brazos que rodeaban su cintura.

-Yoonie- pronunció bajito, recibiendo un "mjhm" de parte del contrario que posaba el mentón en su hombro.

-¿Tú crees que debería... no lo sé, empezar una dieta? He subido mucho de peso últimamente- el pelimenta frunció su seño ¿Porqué Jimin podría creer eso?

-Jiminnie, mírame- con delicadeza, Yoongi volteó a su novio para poder mirarlo a los ojos.

-Eres el ser más perfecto y hermoso del planeta tierra y toda la galaxia, así tal cual como estás. Yo no quiero que hagas ese tipo de dietas porque te conozco y tengo miedo de que luego puedas enfermarte ¿Entiendes, mi amor? Obviamente tú puedes hacer lo que quieras, yo te apoyaré en lo que sea, pero por favor cuídate con eso- el pelimenta depositó otro pequeño beso en una de las regordetas mejillas de su Mochi.

》Te quiero muy sanito y contento ¿Si? Aparte, hay muchos restaurantes en Seúl a los que no te llevé aún- agregó con aquella tierna y aniñada voz que sólo su novio conocía de él.

-Chi- dijo Jimin siguiéndole la corriente al mayor, posando su cabecita en el hombro contrario, abrazándolo con un brazo.

-Gracias Yoonie, por quererme siempre, por apoyarme, por todo. Felices tres años, te amo- dijo sin despegar la cabeza de su hombro, llendo directamente hacia sus manos para entrelazarlas.

-También te amo, con todo mi corazoncito, bebé. Feliz aniversario- habló el pálido sin sacar su tierna voz, besando los cabellos anaranjados del contrario.

...

-Acá está- dijo Yoongi, entrando a la habitación con una enorme caja color azul y un gran moño dorado, acercándose a la cama de su dongsaeng, quien tenía una gran sonrisa en su cara.

-Pero ábrelo rápido que se asfixia- agregó, causando que la sonrisa de Jimin cambiase por una expresión de horror y confusión, acatando rápidamente a la indicación de su mayor.

Al abrir la caja, la cara del pelinaranja cambió nuevamente, por una de shock y de mucha felicidad. Los ojos del menor estaban presenciando a un pequeño felino, probablemente llegando recién al año de edad, con un largo pelaje blanco y un collar de cuero celeste con un dije brillante en el mismo. Unos hermosos ojos celestes eran los que tenían ese bello gatito.

Con delicadeza, el menor alzó al minino peludo, quien maulló tiernamente comenzando a ronronear entre los brazos de su nuevo amo. Jimin sonrió aún más.

-Es...hermoso...Yoonie. Muchísimas gracias, realmente no tenías porqué...- pronunció mirando al contrario mientras salía de su estado de shock, viéndolo sonreir.