Erick ☆•°•°
Mi especialización para educar a pacientes con discapacidad intelectual, me ha llevado a un empleo bueno.
Demasiado, tal vez.
—Buenos días, señor presidente —digo bajando la mirada y él se ríe.
—Erick, por favor, esta es tu casa, puedes sentirte cómodo.
Asiento nervioso aún.
Me ha costado mucho trabajo, pagarme una buena universidad y esforzarme en mi maestría, pero esta, es la oportunidad más grande de mi vida.
El presidente tiene un hijo, y yo cumplo con lo que su familia quiere para él.
La seguridad me ayuda a llegar al piso superior, aunque he visto ya a Joel, es la primera vez que vamos a estar a solas, y me pone nervioso.
Sé cuán receptivo puede ser un chico como él, y si toma la decisión, él va a alejarme.
Quiero agradarle.
—Hola —digo sentándome junto a él y me mira directamente.
Seguro se pregunta qué tan confiado puede ser conmigo.
Aunque él tiene mi edad, mentalmente diría que está muchos años abajo.
Mi ficha es más exacta.
—Soy Erick, ¿tú eres Joel o me he confundido de habitación?
—Joel —dice señalándose a si mismo y sonrío sentándome a su lado.
—Erick —repito señalándome a mí.
—¿Erick?
—¿Has oído de la palabra "amigo"? —pregunto suavemente y él asiente rápido— yo quiero ser tu amigo.
—¿Y jugar?
—Y jugar, claro que sí, estoy emocionado por esto —respondo sonriendo más.
Él es adorable.
Temo como cualquier especialista a un caso complicado, pero Joel me provoca sentimientos positivos.
No creo que represente un problema profesional.
