A mil años de amarte [Terminado]

Capítulo 42

Ven a casa y hagamos el amor

Mis problemas solo aumentan, ahora tenía que superar a dos personas ya que con Abraham aún ese ciclo no lo podía cerrar y menos con lo que había pasado en su habitación.

Mi madre preguntándome porque Riam no volvía aquí. Y yo solo acostada viendo series, siempre sucede esto, se van o me voy y al siguiente mes ya soy reemplazada pero mo había nada que reprocharle na Riam, bien por el si me superó.

Era domingo, él debería estar rondando en la casa y siento ausencia más aún encontrándome sola. No me siento bien...

Mi madre entra a mi habitación.

-¿Por qué Riam ya no esta aquí hija?

-No vendrá nunca más madre.

Me siento en la cama doblo mis piernas y  las abrazo

-¿Lo dejaste? Alexa él era como un hijo para mi

Lagrimeo

-Yo sí quise que funcionara

-Tu sí pero tus sentimientos solo buscaba a Vega

-No entiendo que fue lo que me llegó a volver loca en el. Han pasado tantas cosas y tanto tiempo 2 años... Mi cumpleaños ya está llegando de nuevo y está vez me tocará celebrarlo sola -solloze-

-Tus amigas estarán contigo, además no necesitas a nadie para ser feliz ¿qué ha pasado de tu autosuficiencia?

-Solo quiero estar sola y pensar mamá, cierra la puerta al marcharte y te agradezco por los concejos -sonrio-

No quise volver en donde Vega me había dejado, el dolor que habia sentido por Abraham ers inmenso a comparación de lo que siento al dejarle o estar sin Riam.

Suena mi móvil
Mensaje de texto

-Hola, ¿querés acompañarme a ver películas y hablar de la vida?

Era Vega, justo en estos momentos, sonreí salté de la cama y fui a su casa.

Su casa quedaba nada más a unas cuadras de la mía, no me visto llegar.  Él estaba afuera esperándome.

-Hola -abre el portón-.

-Buenos días -le paso mi mano soriendo-.

Pasamos adentro, y nos sentamos en el sofá de la sala.

-1 año atrás había esperado esto con entusiasmo-rei- y aquí nos tienes, de vuelta a la casa de mi ex novio -Lo mire-

-Tal vez te preguntaras a qué va todo esto -se acerca a mi, mirando mis labios-.

-No, se para que. Te folle bien y quieres más

-Oye, tampoco sos un objeto sexual para mi -Vega fruce el ceño-

-Pues tu si lo eres -Lo beso lentamente-

Nos levantamos del sofá besandomos y sacandonos  la ropa lentamente. Fuimos hasta la cocina y subí a la mesa besandolo y el bajando el pantalón. Lo siento dentro, el deseo tan grande que lo tengo hace que no tarde más de 1 hora en venirme.