A mil años de amarte [Terminado]

Capítulo 28✅

               Recuperando conciencia    

                      <Narra Alexa>

Estando inconsciente lo deseaba más, pero sabía que estando sobria me arrepentiría de cualquier acción que realice, los efectos del alcohol iban desapareciendo, y lo admito el alcohol fue un impulso a lo que yo deseaba hacer.

Me levanté,

-Vamos ayúdame con la ropa. Doy media vuelta tambaleando, todavía no podía evitar sentirme mareada. Quítame el cierre

Deslizo mi cabello largo apartandola de mi espalda, cuando siento las manos de Riam deslizar el cierre dejando mi espalda totalmente descubierta.

-Ire a buscarte una camisa, ya regreso

Quiero que hoy Riam me haga suya, de verdad tenía ganas y deseos sexuales hacia él, pero no debía.

El trae una camisa suya lo cual era lo suficientemente grande para cubrir mi cuerpo. Se pone frente mío

-¿está te servirá? -dice pasándome su camisa-

Lo miro y dejo caer mi vestido al suelo, mirando su reacción fijamente, él no sabía cómo reaccionar y solo miró cae el vestido dio media vuelta y lo tomé denlos hombros

-¿Qué pretendes Alexa? -me mira a los ojos-

-Quiero solo un beso, será solo uno y nos acostaremos a dormir esperando el mañana.

Riam se acercó a mí tomándome con sus suaves manos del cuello y otra deslizándose de mi espalda de mi cintura tocando mis labios con los suyos con un beso lento y fogoso. Me suelta

-Vamos a dormir -dice Riam apartándose-

Riam se acostó a lado mío.

-Me quedaré contigo hasta que duermas -dice tapándose con las sábanas-

En este momento siento que quería pertenecer a su cuerpo tocándolo como las sábanas lo acariciaban.

Quedamos cara a cara. Cerre mis ojos con la intención de quedarme dormida, no podía hacerlo. No lo haría teniéndolo tan cerca y sintiéndolo tan lejos de mi.

-Riam, no puedo dormir -bostezo-

Lo miro y él se encuentra durmiendo
Es tan mágico ver su piel Blanca recostada por la almohada, todo lo contrario a Vega.
Sus labios rojizos me hacen querer alcanzar a besarlo sin poder tener el coraje necesario, acarició sus mejillas tan suaves cual piel de algodón. Siento su cabello su pelo mientras lo miro y le planto en beso en la frente.

El cariño inmenso que guardo por él es incomprendible.

Al estar con él tampoco podía olvidar al alevoso de Vega.

Con mis pensamientos no puedo evitar entrar en un sueño profundo.

Luego de unas horas despierto con un dolor de cabeza excesivo, no recuerdo lo sucedido en la fiesta, lo que recuerdo es la cara de Riam al quedarme dormida, doy la vuelta para volver a encontrarlo. No está.

¿dónde se encontrará? Me cuestiono, me levanto de la cama, dándome cuenta de que llevaba vestida una camisa, no era mía, la huelo y tiene esa fragancia cual habia olfateando en el primer momento en la cafeteria al conocer a Riam. No sabe duda que el perfume de un hombre es la seducción más grande para una mujer .

Pongo en orden la habitación y salgo en busca de Riam. Bajo más escaleras, y lo veo allí abajo, en la cocina. El aroma a jalea derretida inundaba la cocina.

-No sabía que sabías cocinar -digo bajando las escaleras-

Lo veo a Riam con un short, nada más. Admito que sacia una ganas profundas de abrazarlo por detrás, pero no es debido.

-Quise que pruebes mi sazón -rie- Buenos días, al fin despertó la señorita -pone en orden las mesas-

-¿Qué hago aquí?, ¿qué pasó anoche? -Lo cuestiono-

-Te traje aquí por qué me lo rogaste, descuida, no ha pasado nada, te serviré -afirma-

Me siento en la mesa.

-No me digas que nosotros dos...

-No Alexa, no hubo nada entre los dos

-Estoy hambrienta, creo que me comeré todos los panqueques que prepares -sonrio-

-Podria prepararte todo el alimento que necesites pra retenerte aquí en mi hogar con el precio de que jamás te vayas -él afirmó-

¿Te puedo tener de desayuno a ti? -Pensé y rei-

-¿Qué te causó risa? -Sonrie sirviendome-

-Nada más estaba teniendo pensamientos, y ahora voy a comer ya que pronto debo irme a casa, mi madre no sabe en dónde me encuentro  -consumo deprisa-

-Me voy Riam, todo estuvo maravillosamente rico, le doy 5 estrellas y si quieres abrir una cafeteria con gusto te apoyo, -guiñeo el ojo levantándome-

-Alexa ¿Irás con solo mi camisa puesta? Todo el mundo te verá, allí está tu ropa extendida afuera en el balcón, te la lave anoche

Este chico no termina de gustarme cada día un poco más.

-Ire, te agradezco muchísimo por todo este día y también esa noche, nadie me hubiera cuidado como lo hiciste -corro a buscar mi ropa-