Capitulo 1.
PDV Luke.
Todo los días la misma mierda, ¿qué es una clínica psiquiatrica?, una mierda, ¿de qué sirve?, para gastar dinero. Te encierren en una habitación, blanca, vigilada y vacía. Pidén permiso para entrar, no contestas y de igual forma entran. Supongo que ésto vuelve más "locas" a los "pacientes". Te dejan aquí, te visitan cuando quieren, no les importan cómo estamos.
-Luke, ¿hoy vendrá alguien a verte?- preguntó una enfermera, mientras tomaba los controles diarios.
La mire con odio, mientras sonreía con cínismo. Negué con la cabeza y volví a lo mío.
-Oh. Vendrán otro día, seguro.
-Cómo sea, no me importa.
Ella dejó de hablar, continuado con sus tareas. Luego de unos minutos, escuché como la puerta se abría. Levante la cabeza y vi a la doctora Evans. Rodé los ojos.
-¿Qué quieres?.
-Hola Luke- Ella me sonrió.
-No, no "evolucioné". Aún tengo ganas de matar, ya sé puede ir.
Y morirse, si quiere.
-¿Como te sientes hoy?- me ignoro.
-Largó.
-Luke, sólo quiero ayudarte.
-No necesito ayuda, y menos de una mujer.
-¿No quieres mi ayuda porque soy una mujer?.
-Exacto. Ahora, por favor, váyase. Hoy no tomé mis "medicamentos", y no me temblaría la mano para, bueno, usted sabe.
-¿Para que?- preguntó.
Me levanté de la cama y caminé hacía la puerta, a puntó de irme.
-Para matarla.
Cerré la puerta y caminé hacía una especie de "sala", donde a veces había personas. Hoy iba a estar llena, era domingo.
Mientras me dirigía hacía allí, vi cómo un chico corría. Francy, creo que se llamaba, por lo qué sé, él tenía autismo.
Llegué, y me senté lejos de todo. Ya habían llegado personas. Miraba con odio a las chicas que estaban ahí. Me sonreían coquetamente, si tan sólo supieran porque estaba aquí.
A mi lado, estaba Francy. Parecía desesperado, miraba a cada minuto la puerta, y se tocaba la cabeza, parecía un tic. Luego de varios minutos, sentí cómo alguien se sentaba a su lado. Voltee, y pude observar a una chica, rubia, blanca y baja, con ojos celestes. Ella empezó a hablarle, mientras que él se limitaba a contratarle con pocas palabras.
Odié la felicidad de ella, odié cómo sonreía. Odiaba que las chicas estuvieran feliz, no lo merecían, ninguna de ellas.Ojala pudiera hacerla sufrir.
Capítulo editado.