ʸᵃᵏᵒ ˡⁱⁿᵉᵃᵍᵉ [sєsshσmαru]

22

Narrador Omnisciente

Las palabras fueron aun más difíciles de ser expresadas por Sesshomaru. Su odio crecía a pasos agigantados así su hermano menor. Un híbrido.

Sus dorados ojos seguían el sendero asta su palacio, llevando con sigo a una pequeña humana y a su fiel sirviente. Había pasado años que habia abandonado su hogar, por ella.

-—No a cambiado en nada este lugar. Tan lleno de recuerdos inútiles... Padre.

-—Lord Sesshomaru esta aquí, Lady Irazue —anuncia su sirviente entrando al despacho de la Yokai mujer.

Su rostro no mostró ninguna expresión, ante lo dicho por su fiel sirviente, limitándose a decirle algo más se apoyo más en su cómodo sofá.

La puerta fue abierta una vez más, está vez por el pequeño demonio de color verde que ella conocía perfectamente. Seguido su hijo con su típico semblante de seguridad, odiaba y amaba a la vez los rasgos parecidos a su ex-esposo. Tanto así que sería capas de odiar a su propio hijo por su difunto Padre.

-—Suplicó me disculpe Madre de mi señor, por nuestra repentina aparición —se arrodilló ante la mujer.

-—Aque se debe tu repentina visita, Sesshomaru. Creí haber escuchado suficiente de ti, en los cien años que han pasado.

-—No he venido por tu misericordia, Madre.

-—¿Quieres información?, si es eso no te preocupes, te la daré —accede sin tener otra opción.

-—Dime tú relación con la familia Yako.

Aquella petición la agarró desprevenida, sin embargo, ella supo ocultar bien su reacción, en una máscara de indiferencia.

-—¿Mi relación con los Yako? —se toma su momento. —Por supuesto, me parece haber escuchado de ese Clan.

—¿Y bien? —los iris dorados la analizan sin ninguna discreción.

—Los próximos, herederos. Fueron amigos cercanos de Taisho, tu Padre —comento restándole importancia. —Una pena que hayan mordido la mano que les dió de comer, por esa razón tú Padre los desterró aún lugar mejor —cuenta, sin dar mayores detalles.

—¿La razón de su destierro?.

—No me importo en su momento, menos ahora.

—¿No tuviste nada que ver en eso? —cuestiona. —Tú, no tuviste un romance con el amigo de Padre —le cuestionó sin ir con rodeos.

—-¡¿De donde sacaste eso?! —interroga, levantándose de su sillón.

—Respondeme.

—Sesshomaru, creía haberte aconsejado en más de una ocasión, no te dejes llevar por absurdos rumores —le recrimina, volviéndose a sentar. —Por otro lado, si tú objetivo es comptobar si cierto rumor es real, ya podemos hablar de otra cosa. ¿Como haz estado? —cambia de tema.

—Mejor ahora que mi prometida está de vuelta. Una hembra Yako —anuncio.

Los párpados tranquilos se chispiaron ante tales palabras.

Silenció.

-—¡Promet-! —fue interrumpida abruptamente.

—-¡Lady Irazue!. ¡Han invadido el palacio!.

Y al instante los gritos de Lin se escucharon por todos lados, Sesshomaru salió de ahí sin decir más, avanzando con rapidez por el largo pasillo oscuro, dejando muy detrás a Jaken que trataba de no tropezar con los cadáveres que ya asían en el suelo.