¿prometido o prometida?

Capitulo.7🏵️

Realmente tenía que ser una broma, porque tenía que volver ese mismo día, Chuya, cabe resaltar que Odasaku también, después de la llamada de Fyodor, recibió otra llamada de su padre iría a visitarle ese mismo día por su compromiso.

Dazai pensaba que su padre quería hacerle la vida de cuadritos y el hombre lo disfrutaba como nunca, al igual que su mayordomo Mori quien después de verle la cara de sorpresa no había dejado de reír en ningún momento, cosa que estreso de sobremanera al castaño, pero eso era lo menos importante, como haría para convivir con los 3 amores de su vida, había muchas cosas en contra.

1-Aun sentía cosas por Oda, aunque durante esos 4 años había dicho que no.

2-Amaba a Chuya, cosa que también había según el olvidado.

3-se empezó a encariñar, enamorar, atraer por su prometida.

Si Dazai no pensaba en una solución pronto se arrancaría los cabellos a causa de la locura cosa que estaba por pasar, pero una voz le distrajo, una molesta voz.

—Veo que te diviertes.

—Fyodor, ¿Qué quieres estoy muy ocupado? Vuelve emmm no se nunca, gracias.

—Que chistoso, solo vine a ayudarte a organizar tu fiesta de mascaras.

—¿De nuevo esa temática?

—Solo será para el evento principal.

—De acuerdo con tal de no encargarme de eso yo está bien, por cierto ¿Cómo llegaste tan rápido? hace un momento me llamaste por teléfono.

—Dazai ya han pasado 3 horas desde entonces.

—Vaya quien diría, mi sufrimiento emocional dura mucho, ¡ESPERA!...¿Que fiesta?

Fyodor suspiro cansado y se dispuso a sentarse en uno de los sofás, medito lo que iba a decirle y después le miro.

—Tu fiesta principal donde presentaras oficialmente a tu prometida, ante todos y así firmando el pacto de empresas y beneficios.

—Oh esa fiesta, entonces yo... iré a prepararme, ¿A qué hora?

—6:30.

—De acuerdo.

Sin más Dazai se dirigió a su cuarto para arreglarse, Fyodor se divertida al ver como Dazai sufría una confusión emocional, nunca espero verle de esa manera, por lo que no perdería la oportunidad de ello y le atormentaría un poco.

La hora la fiesta llego, Dazai estaba recibiendo cordialmente a todos los invitados, pasando de uno en uno a saludarles y decirles que disfrutarán de la fiesta, todos agradecieron ese gestó, cabe resaltar que cada una de las damas ahí se sonrojaban al ver lo apuesto que se había puesto, después de todo, solo algunos le conocían personalmente, y no le vieron crecer.

Dazai tenía una sonrisa que nadie podía apagarle o eso creía, ya que logro escuchar una voz que conocía pero no escuchaba desde hace mucho tiempo, se giró a ver, no se equivocaba ahí estaba aquel peli naranja de ojos azules.

Este saludaba a todos amablemente como solía hacerlo, dando una hermosa sonrisa y siendo educado como solo Koyo le enseño hacerlo, vestía un elegante traje negro junto con un pañuelo de bolsillo color rojo, zapatos a juego y su cabello recogido con una leve coleta, no podía creer que de verdad se lo había dejado crecer, a la vista de Dazai se veía muy sexy, a paso lento se dirigió a él, Chuya le noto y solo le miro.

—Chuya tiempo sin verte, ¿Cómo has estado?

—Sí, mucho tiempo, me ha ido bien mi empresa ha sabido mantenerse en el extranjero.

—Es bueno oírlo, empresas Nakahara había estado cayendo aquí drásticamente a pesar de ser una empresa de modas.

—Las empresas iban bien, solo faltaba extendernos y nos ha favorecido ¿Cómo vas tú?

—Con las mismas ganas de morir, pero va perfecta la empresa gracias a mí, mi padre ha descuidado su trabajo por lo que yo debo hacer frente a todo.

—No suena a tu padre.

—Lo sé, pero quiero pensar que a si es.

Ambos chicos quedaron en un silencio, para después soltar una leve risa, se habían extrañado, antes de que alguien pudiera decir algo, alguien se acercó a ellos y se recargo en el hombro de Dazai, este miro a su lado y abrió los ojos en grande.

—O-Oda.

—Has crecido mucho Dazai.

—Y-Yo tu... como... ¿Y mi padre?

—Solo vine yo por orden suya, el no vendrá hasta mañana.

—Típico de el.

—No deberías preocuparte.

—Supongo —soltó una risa mientras seguía sonrojado.

Chuya los miraba atento, después cerro sus ojos y tosió un poco llamando la atención de ambos hombres que pararon de charlar, y mirarle, Chuya les volvió a observar y sonrió.

—Como sea, solo vine a traer a tu prometida, yo me retiraré.

—No tienes que....

—Prefiero hacerlo yo no encajo en estos lugares.

—Veo que también has crecido mucho Nakahara-san —dijo el mayor de los 3.

—Sí, no puedo decir lo mismo de ti, digo no has cambiado nada mayordomo.

—¿Eso es un cumplido?

—Tómalo como quieras.

Dazai les miraba algo nervioso, ambos se miraban con ganas de pelearse y se sorprendía más ya que Oda también le mirara así, por lo general era muy sereno pero cuando se trataba de Chuya, todo cambiaba, trato de decir algo antes de que el lugar se tensara más pero de la nada fue separado de ambos y sintió como era abrazado por alguien, al ver su vista, hacia la persona, pudo ver un vestido color rojo y una cabellera naranja, los dos hombres miraron también.

—M-Mi lady.

—Te estuve buscando, no esperaba que estuvieras aquí con ellos.

—Lo lamento, pero...

—Chuya-ni, gracias por traerme, si quieres puedes quedarte.

—Prefiero irme, pero gracias por la oferta.

—Como gustes respetare tu opinión —la chica miro a la otra persona— ¿Tu eres?

—Oda Sakunosuke, soy uno de los mayordomos de la familia Dazai.

—Ah tu eres... —sonrió con malicia— un placer, espero que cuides de mi como lo haces con Osamu.

Dazai estaba tenso por qué siempre todo lo que pensaba o decía se volvía realidad, todo menos el morir sin dolor, ¿el mundo quería verle sufrir acaso?, Cual fue su pecado para hacer eso, ¿A verse enamorado de su mayordomo y engañar a Chuya con el mismo? No debía ser otra cosa eso no fue tan grave según él, solo sabía que tenía ahora a sus 3 amores conviviendo ahí, aunque dudaba amarlos a los 3, dios esto era muy complicado, y para el colmo los tres de veían con falsas sonrisas donde solo revelaban rencor entre ellos.