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Hwanwoong se encontraba con la cabeza recargada sobre su pupitre y sus brazos alrededor de ésta, haciendo un tipo de fuerte para que nadie le viese

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Hwanwoong se encontraba con la cabeza recargada sobre su pupitre y sus brazos alrededor de ésta, haciendo un tipo de fuerte para que nadie le viese. Estaba jodido.

Había vuelto a reprobar el examen de matemáticas y solo le quedaba uno para que el periodo terminara y, si no sacaba la nota máxima, entonces tendría que repetir el curso. Así que ahí seguía, debatiéndose entre salir del colegio e ir a su departamento a deprimirse por sus pésimas notas o bien, ir a un curso y hacerse un as en la materia. Se le iluminaron sus ojitos al pensar en el curso, pero automáticamente se ensombreció su mirada al darse cuenta de que no podía darse el lujo de pagar cursos porque apenas le alcanzaba para sus necesidades básicas y bien, el trabajo de medio tiempo con el que contaba era el que más pagaba y no podía arriesgarse. Ser autodidacta estaba totalmente descartado; una vez había intentado hacerlo - a decir verdad, muchas veces -, pero entendía nada de los libros de matemáticas y terminaba confundido aún más. 

Con mucha pesadez y sin ganas, se levanto de su pupitre y comenzó a caminar hacia la puerta del salón, cuando la voz del profesor Kang, quien lo hacía sufrir, dijo su nombre.

— ¿Sí? — Respondió temeroso, pero nada sorprendido. Sabía lo que vendría a continuación: "Joven Yeo, necesita esforzarse más en la materia, no queremos que repita, así que vaya a casa a estudiar", luego le regalaría una sonrisa compasiva y le daría unas palmaditas en la espalda. Pero eso no sucedió.

— Veo que ha vuelto a salir mal en el examen, ¿Le interesaría un tutor?. Tengo alumnos excelentes que ya han pasado por mi curso y que estarían dispuestos a ayudarle. 

— ¡Sí! — Gritó, a lo que el profesor se sorprendió un poco. — Quiero decir,me interesaría mucho, por favor — Dijo con una sonrisa incómoda mientras le volvía el alma al cuerpo y se sentía más motivado.

— De acuerdo, venga el lunes a mi oficina. Asegúrese de descansar bien este fin de semana y aléjese de la escuela por un rato; al parecer está estresado y un poco bloqueado.— Terminó de decir el profesor,esperando una última respuesta de su alumno.

— Muchas gracias, profesor — Hwan le regaló una sonrisa mientras hacía una reverencia. — ¡Nos vemos el lunes! — Y partió emocionado hacia su hogar.

Definitivamente iba a hacerle caso al profesor, así que pasó a la tienda de conveniencia cercana para comprar lo que necesitaba para una tarde de relajación mientras veía películas y comía todo tipo de chucherías.

El lunes llegó más rápido de lo que le hubiese gustado a Woong, espabiló cuando notó de que se encontraba enfrente de la puerta del profesor Kang. Estaba nervioso, esperaba que le tocara una persona amable con la que congeniara bien y le ayudara a resolver todas sus dudas estúpidas sobre la materia. 

Dió un respiro grande y se animó a tocar, unos segundos después escuchó un "adelante" proveniente de la oficina. Así que abrió con cuidado y cuando estaba dentro hizo una reverencia para posteriormente cerrar la puerta detrás suyo e ir a sentarse frente al profesor.

Extraño. No había ninguna otra persona en la oficina más que él y su profesor.
Quizá nadie había accedido a ayudarle por lo problemático que podría ser; la simple idea que atravesó fugazmente su mente le hizo sentir cohibido y mucho más nervioso. Estaba a punto de hablar cuando alguien más golpeó, el señor Kang le sonrió a Hwanwoong e inmediatamente dijo un "pase" lo suficientemente audible del otro lado. Curioso, Hwan volteó para ver quién estaba entrando.

Un chico, mayor que él y muy imponente; alto y de hombros anchos con un cuerpo tonificado. Vestía una sudadera negra con un estampado simple de color blanco, la cual estaba dentro de su pantalón, igualmente negro, roto de las rodillas y con cadenas colgando; mentiría si Hwan dijera que no se sintió intimidado y pequeño en presencia de aquel tipo. Cuando terminó de inspeccionar su físico, disimuladamente, dirigió su mirada hacia la cara del chico cuyo nombre aún desconocía y sentía que podía morir por lo atractivo que era; su cabello negro caía sobre sus ojos cafés con un poco de maquillaje que resaltaban gracias a su cara alargada, sus labios eran la mejor parte, se veían tan jugosos que Hwan quiso juntar sus labios y besarle hasta quedarse sin aliento. Pero la mirada del sujeto parecía estar juzgándolo, así que volteó rápidamente hacia el profesor intentando ocultar su sonrojo y calmando sus sucios pensamientos.

— Lo siento, creo que estoy retrasado.— El chico sexy se disculpó mientras se dirigía a la silla al lado de Hwanwoong. El corazón del más bajo comenzó a latir muy fuerte temiendo que lo escucharan.

— Oh, no te preocupes, Youngjo.— Habló el profesor Kang.

"¿Youngjo? Bonito nombre." Pensaba Hwan mientras mantenía su cabeza gacha para no exponer su nerviosismo.

— Verás, él es Yeo Hwanwoong, el chico que te comenté y que le ha ido muy mal en los exámenes. Espero que le puedas ayudar con los temas para que no tenga que repetir mi curso.— Dijo el señor Kang mirando a Youngjo.

— Y joven Yeo, éste es Kim Youngjo, es un año mayor que usted y es de los mejores en clase de lo que respecta mi materia.— El profesor Kang hablaba de forma entusiasta y orgulloso de su alumno.

Dicho ésto, el alto le extendió la mano al chico lindo que se encontraba a su lado para estrecharlas, a lo que Hwan respondió torpemente mientras el de cabello oscuro lo miraba fijamente.

— Será un placer ayudarte con la asesoría, Hwanwoong. — Dijo Youngjo mientras sostenía fuerte su agarre y agitaba levemente. — Espero que podamos llevarnos bien para que las asesorías sean cómodas y logres tu objetivo. 

"Su agarre es tan cálido y sus manos son enormes que podrían simplemente ahorca..." Pensó por un instante Hwanwoong, deteniéndose en su mente para poder responder apropiadamente como si ese pensamiento no hubiese existido.

— Claro, Youngjo. Haré mi mejor esfuerzo. — Hwan le dio una sonrisa pequeña y su mayor lo miró de una forma que el rubio no supo descifrar.

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𝙈𝙖𝙩𝙝𝙚𝙢𝙖𝙩𝙞𝙘𝙨 » 𝑦𝑜𝑢𝑛𝑔𝑤𝑜𝑜𝑛𝑔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora