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Hwanwoong despertó en medio de la noche sintiendo su estómago gruñir. Con sumo cuidado retiró el brazo que abrazaba su cintura dejando a Youngjo profundamente dormido. Sonrió con cariño y apartó algunos mechones que cubrían sus bellos ojos.
Se levantó del colchón caminando a la cocina buscando algo que comer; exasperado de ver únicamente carbohidratos se sobó la sien apoyándose en la barra de la cocina.
— Ah, si como ésto aumentare de peso.— Dijo frunciendo sus labios mientras pensaba en que comer sin ganar peso. Quería darle una gran sorpresa a Youngjo en su cumpleaños.
Hwanwoong se sobresaltó al sentir unas manos tomándolo de la cintura y pegando su espalda al pecho contrario pero se relajo al percibir la característica colonia de su novio.
— Woongie ¿Que haces despierto? — Preguntó con voz ronca debido a que acababa de despertar.
— Me has asustado.— Woong golpeó el brazo de Youngjo haciendo que se quejara.
— Me preocupe al no sentirte a mi lado, bebé.— Youngjo apoyó su mentón en el hombro del menor mientras pegaba más su cuerpo enredando sus brazos alrededor de la cintura de su novio.
Hwanwoong estaba dispuesto a hablar pero su estómago lo hizo primero. Youngjo sintió la pancita de Woong moverse debajo de sus brazos junto con un ruido que se escuchó más fuerte debido a que el cuarto estaba vacío.
El rubio rió avergonzado antes de hablar: — Tengo hambre y buscaba algo de comer.
— ¿Porque no lo has hecho? Hay muchos bocadillos.— Dijo Youngjo señalando la barra repleta de paquetes de galletas, panes y chocolates.
Hwanwoong suspiró. — Me harán subir de peso.— Recargó su cabeza en el hombro del mayor cerrando los ojos.
— Puedes comerme a mí.— A Hwanwoong lo tomó desprevenido tal propuesta, por lo que lo miró con los ojos muy abiertos.
— Ya, tu también tienes muchas calorías.— Dijo saliendo del agarre que el mayor mantenía en él, pero Youngjo lo jaló de la muñeca para volver a pegarlo contra su pecho.
— Si, pero después te puedo ayudar a bajar de peso Hwanwoong. — Susurró cerca de su oído, acariciando con su nariz parte de su mejilla; acción que erizó el cuerpo de Woong.
— Eres un sucio, Youngjo.— Hwanwoong intentó separar al mayor de él quien después de reír lo soltó.
— Entonces ¿Qué comerás? — Preguntó al ver qué no comía nada y solo revisaba los empaques. Fue a revisar en la nevera viendo hasta atrás un paquete de gelatina la cual tomó y se la mostró a su novio.
Después de comer una rica gelatina de fresa se dirigió hacia el colchón dispuesto a volver a su sueño pero Youngjo fue más rápido que él y en un parpadeo ya tenía al mayor comiéndole la boca acorralandolo en una pared.