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Capítulo nueve: "M o n t a ñ a Á v i l a".

~Es una locura, no podemos permitir que pasen el portal~ manifiesta Jasges en su consciencia, serio por el alud

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~Es una locura, no podemos permitir que pasen el portal~ manifiesta Jasges en su consciencia, serio por el alud.

─No queremos pelear de nuevo ─avisa Anthony enterado de su ideología, al lado de Danielle con una postura dispuesta a escudarle.

~Que no se atreva a tocarla...~ condensa en desvíos mentales.

Rhosa mira a su amado, reservada y transfiriendo su aprobación.

Jasges alista su magia contra los mestizos─. Son criaturas prohibidas, si no los llevo con Amelia...

─Sé que ustedes también deben sufrir con la masacre, ¿no? ─la oji-rosada se le acerca al Crativ a pesar de la sospecha─. Estar en vela todos los días no debe ser fácil y mucho menos tener que arrebatarle la vida a alguien más porque sea su trabajo.

Justo en frente del Criarzu, abierta a una charla razonable, sus más hermosas intenciones son definidas ante todos.

─Nosotros queremos terminar esto ─continúa manteniendo su miramiento directo al receptor─, y el primer paso es llegar a la biblioteca. Sé que es complicado quedarte ahí de pie para oír a una "amenaza" pero no tengo motivos por los cuales mentirte ─sonríe con los labios cerrados, sincera como afirma su exposición─. Por favor, déjanos traspasar el portal.

─Jasges, está bien ─asume Rhosa rompiendo su silencio.

─No, no lo está.

─¡Jasges!

El mismo, dispuesto a hacer lo necesario por sobrevivir a su reina, estira su brazo hacia atrás para darse impulso.

─Yo debo... ¡hacerlo!

Su voz se hace susurro y se esfuma en un ataque precoz.

─¡Dan─!

Danielle recibe una cortada verdosa justo en la mejilla izquierda, tras ser jalada por Anthony para evitar la puñalada que iba planeada hacia el cuello; el fluido gris mancha las manos del acometedor, robándole cualquier ecuanimidad construida en un santiamén.

─¡Váyanse ahora! ─brama Catalina.

Y sin darse cuenta, el Raimbark la ha tomado por los brazos, extendiendo una vez más sus alas para dirigirse al portal...

Y sin darse cuenta, el Raimbark la ha tomado por los brazos, extendiendo una vez más sus alas para dirigirse al portal

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Danielle: Reina Perdida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora