26.- Día enfermo

464 50 8
                                    

Miraculous, les aventures de Ladybug et Chat Noir y sus personajes son propiedad de Thomas Astruc y Zag Entertainment.

Palabras: 455.


26.- Día enfermo

Se sorbió la nariz mientras metía las llaves en la cerradura, se encontraba fatal, no recordaba la última vez que había encontrado así. Abrió la puerta con un escalofrío recorriéndole de los pies a la cabeza ¿era cosa suya o hacía frío en casa?

—¿Marinette?

—No ha vuelto —susurró Wayzz.

—Es verdad, hoy había quedado con Alya y las chicas, no me acordaba.

—Hoy estás más atontado de lo normal —farfulló Plagg yendo directo a por una ración de queso.

Adrien ni se molestó en contestar, se quitó las deportivas y las dejó bajo la mesa de café, se estiró en el sofá sintiéndose agotado e incapaz de llegar hasta la cama.

—Plagg, ¿podrías traerme una manta?

—Estamos como a cuarenta grados, Adrien.

—Por favor.

—Yo la traeré.

Wayzz le llevó una fina manta de punto bajo la que Adrien se ovilló al instante. Eso no era normal, Plagg lo sabía, pero su portador no había estado paseando bajo la lluvia sin paraguas y, definitivamente, no hacía frío como para enfermarse.

—Voy a buscar a Marinette —declaró Plagg con tono preocupado.

—No, iré yo, cuida de tu portador.

Plagg se acurrucó junto a Adrien sin despegar sus ojos verdes de él.

«Miradme, guardianes, el terrible Plagg preocupado por su portador» pensó, le habían dicho tantas veces que era un egoísta y que sólo sabía pensar y preocuparse de sí mismo que le resultaba irónico. Sin embargo, él se preocupaba por Adrien, tal vez era el único portador por el que se había preocupado de verdad, porque había sanado su alma dañada y solitaria.

—No te mueras, no me hagas esto.

Llaves en la cerradura, pasos apresurados.

—¡Adrien! —Marinette se dejó caer en el sofá mandando a Plagg a volar con un grito sostenido—. ¡Estás ardiendo!

»Wayyz, trae el botiquín.

—En seguida.

—¡Plagg! ¿Desde cuándo está así? —Marinette lo buscó con la mirada, le había oído, pero no lo veía—. ¿Plagg?

—Casi me matas, Marinette.

—Pero...

—Después que si Plagg destruye las cosas, Plagg es peligroso, Plagg quiere cataclismarlo todo... y no nos olvidemos de los dinosaurios, por supuesto.

No sabía de qué demonios estaba hablando el kwami, pero parecía ofendido a tantos niveles que Marinette se olvidó por un momento de Adrien.

—El botiquín, Marinette.

—¿Puedes traerme agua?

—En seguida.

Plagg seguía farfullando cosas mientras Marinette rebuscaba en el botiquín paracetamol para bajarle la fiebre.

—Plagg sé que Adrien te importa, deja de protestar y dime desde cuándo está así.

—A media mañana ha empezado a moquear. No se va a morir, ¿verdad?

—No, se pondrá bien —contestó ella recordando aquel día de lluvia en el que había llegado a su casa como Chat Noir y la fiebre le había descubierto como Adrien.

Fin

Notas de la autora:
¡Hola! Sé que esto está más centrado en Plagg y Adrien que en Marinette y Adrien, pero bueno, no di para más con este prompt.

Adrinette en abrilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora